Capítulo doce.

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- ¡No puede ser! - Grita Marveth haciendo que Lauren y yo demos un brinco del susto.

- ¿Qué pasó? - Pregunta Lauren mientras lleva la mano a su pecho.

- Van a sacar segunda temporada de Baby. - Nos enseña el móvil pero no conseguimos ver nada, ya que no lo para de mover.

Lauren y yo nos miramos y ponemos los ojos en blanco,ni a ella ni a mí nos entusiasmó esa serie. O sea, no está mal, es parecida a Élite pero esta vez nadie muere. Ah no, mentira en Baby moría. Perdón, casi os hago spoiler. Bueno, en resumen, la serie no está mal pero no entra en una de mis favoritas.

- Yo aún voy por la segunda temporada de Prisión Break. - Se encoge de hombros Lauren y está vez Marveth y yo la asesinamos con la mirada.

- ¿Cómo puedes tardar tanto? ¡Llevas desde verano por la segunda temporada! - Dice Marveth leyéndome la mente.

- Yo he comenzado a ver Peaky Blinders, según Jaime el de La casa de Papel y Élite está buena.

- La tengo agregada en la lista, pero primero me tengo que terminar The walking dead. - Dice Lauren.

- Y Prison Break. - Añade Marveth haciendo que las tres nos reíamos.

- ¿Saben? - Pregunta Lauren después un tiempo en silencio mientras miramos la televisión. - Salgamos. - Propone pero Marveth y yo la miramos como si estuviera loca. - Venga ya, son las 21 de un sábado y estamos apalancadas en el sofá.

- Pero es que se está muy calentito. - Digo mientras me tapo con la manta hasta el cuello.

Lauren nos mira desafiante y no nos queda más remedio que aceptar, ya que cuando a Lauren se le mete una idea en la cabeza hat que hacerlo sí o sí, al menos que quieras que te insista durante horas. En serio, es la persona más pesada que conozco.

- Digámoslo a los chicos. - Dice Marveth y yo rápidamente niego.

- Mejor tengamos noche de chica, hace tiempo que no salimos nosotras solas. - Lauren asiente dándome la razón y sonrío satisfecha.

No me apetecía para nada ver a Dylan. No le veo desde el día de los bolos, es decir, desde hace ya casa una semana. Encima se tuvo que ir a mitad de la partida con una excusa pésima, creo que el momento que tuvimos le incomodó. Ese día me dí cuenta que mi relación con él había cambiado, ya no éramos mejores amigos parecíamos unos simples conocidos. Ni me habla al WhatsApp, ni me envía memes por Instagram o fotos de él con muecas raras. En fin, creo que mi virginidad solo me trae problemas.

Decidí por ponerme un vestido negro apretado de asillas, es decir, algo sencillo ya que el toque de atención estaría en mis botas rojas de tiro alto a juego con mi color de pintalabios y mis pendientes.

Lauren va casi igual que yo, un vestido pegado y corto pero a diferencia de mí, es de color violeta y de mangas largas, y sus botas son de color negro a juego con el smoking de sus ojos.

Marveth es la que más destaca, su vestido es corto y de palabra de honor lleno de lentejuelas plateadas. Lleva unos pequeños tacones de color negro, ya que ella ya es alta.

Decidimos por ir en taxi, así todas nos podemos emborrachar y no estar preocupadas por si tenemos algún accidente. Suspiramos aliviadas al ver que hay tres porteros, por lo que la gran cola de gente avanza rápidamente. Nada más entrar, nos pedimos dos rondas de tequila y después me pido un tequila.

- Dentro de un rato hacemos la ronda. - Dice Lauren mientras choca nuestros vasos para beber nuestro tercer chupito.

- ¿Y Cody? - Pregunto, ya que el tonteo que se tienen es demasiado notable.

¡Adiós virginidad!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora