Es parte de mi vida. Marco Asensio.

Capitulo 45-¿Dónde estás?.

-No sé qué decir Mónica...no sé qué hacer.

-Pues te lo voy a decir Xama, cuando salgamos de aquí vas a ir a casa de Marco y vas a hablar con él. ¿No veis que separados os hacéis más daño? Estáis hechos el uno para el otro.

El alguacil entra a la sala y nos dice que tenemos que volver ya. Mi madre, Yuri y Logan salen del baño y vienen con nosotros.
Cada uno nos volvemos a sentar en su sitio y vemos cómo el juez entra y se sienta en su silla.

-Se reanuda la sesión-dice el juez serio-Aunque este tribunal ya ha deliberado y tiene la sentencia final. Antes de mostrarla, ¿Podrían decirme por qué nunca llegaron a denunciar al acusado sobre lo que hacía?

-Miedo-responde Yuri.

-Amenazas-contesto yo cabizbaja.

-¿De qué tipo?

-Nos amenazaba con despedirnos a todos, cuando no nos sobra el dinero, y alguna vez con matarnos.

-¡Eso es mentira!-grita Luis enfadado.

-Eso es verdad-dice una voz de la sala y nos giramos, es Rosa-A mí también me amenazó con despedirme si contaba algo.

-¿Quién es usted?-pregunta el abogado de Luis.

-Rosa Sánchez, camarera del bar.

-Como anuncié hace escasos minutos, este jurado ya ha deliberado y tenemos la sentencia final.

Logan, Chad, Yuri y yo nos cogemos las manos y agachamos la cabeza deseando que metan a Luis en la cárcel y nos deje en paz de una vez.

-Estás jurado declara al acusado Luis Vega, inculpado por traficar drogas, exigir a sus empleados que trafiquen por él y que compitan en carreras ilegales, y por último por malos tratos y amenazas constantes...Culpable a veinte años de cárcel por todo lo que ha cometido, se cierra la sesión.

Da con el martillito en la mesa y todos suspiramos. Por fin...libres.

Dos policías se llevan a Luis, quien intenta oponerse al veredicto, pero el juez lo amenaza con cinco años más si se opone. Finalmente se lo llevan de la sala.

Un miembro del tribunal nos comenta que en nuestro expediente no va haber ni rastro de todo esto, y que con eso podemos hacer vida normal y trabajar en cualquier sitio.
Nos levantamos y nos abrazamos todos juntos.

-Por fin chavales...por fin libres-dice Chad emocionado-Por fin vamos a poder hacer lo que queramos.

-Por fin podemos echar currículums por ahí-dice Logan riendo.

Nos separamos y mi madre y Mónica vienen y nos dan un abrazo a cada uno.

-¿Y ahora qué vais a hacer chicos?-pregunta mi madre sonriendo.

-Pues de momento...no tengo ni idea María-contesta Chad riendo-Pero sé que voy a hacer lo que yo quiera.

-Esa es la actitud Chad.

Nos quedamos hablando un rato sobre ideas o planes que podemos hacer, desde montar un negocio hasta irnos a trabajar todos juntos al extranjero. Pero yo no puedo hacer eso último, hay cosas o más bien personas que me atan a estar aquí.

Me despido de ellos y salgo del juzgado. Tengo que llamar a Marco y hablar con él.
Marco su número y me salta el contestador. ¿Hoy tienen entrenamiento por la mañana?

Voy a probar llamando a Isco y esperar a que haya más suerte.

-¿Lexa?

-La misma.

-¿Que haces tú llamándome BFF? Se me hace raro, por cierto tengo que hablar contigo sobre mi pisha.

-Por eso te llamo, ¿A qué hora termináis el entrenamiento hoy?

-Hoy tenemos el día libre Lexa...¿Marco no te ha cogido el teléfono?

-No...-isco no me responde y me empiezo a poner nerviosa-Isco ¿Que pasa?

-Nada, solo que...eh...ve a su casa a ver si está, ¿Sigues teniendo las llaves verdad?

-Si claro, voy para allá, chau.

Cuelgo el móvil y voy al parking para subirme a mi coche.¿Por qué estaba Isco tan nervioso? Nunca lo había visto comportarse así... Esto no me gusta ni un pelo.

Me subo a mi coche y conduzco hacia la casa de Marco. Lexa céntrate, puede que esté en la ducha o que esté en la piscina nadando y no haya escuchado sonar el móvil... Pero a quien intento engañar, Marco siempre que se ducha o está haciendo algo por casa, tiene el móvil al lado con la música puesta.

Llego a su casa y antes de entrar llamo, no quiero colarme por la cara estando él dentro. No es plan.
Espero unos minutos y vuelvo a timbrar...me estoy empezando a alterar y seguro que para el bebé no es bueno. Que esa es otra, no sé cómo decirle que estoy embarazada.

No abre la puerta, así que la abro yo.
Entro y veo que sus llaves están en el cuenco del mueble de la entrada. Está aquí.

-¿Hola?

Cierro la puerta y camino por la casa buscándole.

-¿Marco estás aquí?...¿Hola?...Soy Lexa, quiero hablar contigo.

Voy al salón y veo que en la mesa que hay delante de la tele hay cuatro cartas. Cada una tiene un nombre diferente, hay una para Gilberto, otra para Igor, otra para Isco y una para mí.

Miedo me da lo que me estoy imaginando...por favor que no haya hecho ninguna tontería.

La abro y me pongo a leer.

Querida pingüinita:

Ante todo me gustaría decirte que te quiero, y que no eres fácil de olvidar, eres experta en robarle latidos a mi corazón porque puedo decir que estoy enamorado de ti hasta las trancas. No me arrepiento de haberte conocido en ningún momento, porque eres la persona más especial que he conocido en mi vida. Para mí nuestra relación nunca fue un juego, porque nunca lo ha sido, en todo momento pensaba en ti, únicamente en ti.
No sé si Mónica habrá hablado contigo, pero no es todo como piensas, habla con ella y volver a llevaros bien. Aunque me cueste admitirlo, te has ido de mi lado y me duele en el alma. Siempre que me han preguntado por ti he respondido diciendo que eres lo mejor que me ha pasado en la vida sin pensármelo dos veces. He soñado tantas veces contigo, un futuro contigo con dos niños pequeños correteando por nuestro lado. Sé que cuando nos miramos, el mundo no gira y solo estamos tú y yo, tu simple y mi rarita.

Perdona si te he hecho daño, ha sido sin querer, nunca fue mi intención hacerlo.
Me duele mucho que ya no estés a mi lado, me quema por dentro. Y sé que no voy a ser capaz de verte con otro hombre que no sea yo. No sé cuántas veces tengo que decirme que no vas a volver y que me quite los pajaritos de la cabeza. Y que no voy a verte nunca más, ni volver a abrazarte, ni volver a besarte. Vivir sin ti es como vivir sin razón Lexandra.

Aquel maldito día en que todo se volvió gris, además del colgante te iba a regalar una cosa más. Está en el segundo cajón de la mesa de la tele. Aquella misma noche te iba proponer ir a cenar a un restaurante, a tu favorito, el italiano. Y cuando termináramos de cenar,tenía pensado ir a la montaña y a la luz de la luna, iba a arrodillarme delante de ti y pedirte que te cases conmigo. Porque sin ti no puedo vivir Lexa, has entrado en mi vida muy fuerte y no logro que salgas de ella.

Solo he encontrado una forma de que salgas de ella, quitandomela. No quiero que te sientas culpable de nada porque no tienes la culpa. El culpable soy yo, por no saber cuidar bien lo que más quiero en mi vida. Te he perdido y no puedo seguir viviendo así.
He tomado una decisión, y creo que es la mejor para los dos...no hay vuelta atrás.

Tu guapo, tu cielo, tu cariño, tu simple, tu empanado, tu niño, tu Marco.

Te quiero.