Todo por él [Yugkook]

🐰 Veintisiete 🐣

La noche se le hace eterna. Intenta que JiMin no se despierte, pero su cuerpo todavía se siente inquieto.

La vista a la nada en el techo con sus ojos cerrados le hace preguntarse muchas cosas todavía. Hay algo que no le termina de cerrar y le da rabia que Mark se haya ido a dormir como si nada luego de haberlo puesto de ese modo.

- Mierda... Necesito coger. -gruñe al aire levantándose de la cama con su ceño fruncido.

Cuando las cosas se ponen de ese modo, Jeon siempre ha huido a lugares donde lo hacian sentir bien con alcohol y un buen sexo. Así que está no iba ser la excepción.

Se da una corta ducha y cepillas sus dientes, y ya está frente al espejo con pantalones ajustados oscuros que resaltan su figura y hacen apetitosos sus muslos gruesos, una camisa blanca en su torso con dos botones sin abotonar y un abrigo ligero por encima por si la noche se tornaba fría.

Sus botas negras que le sirven para correr veloz por si algo malo pasaba, su billetera con un par de billetes y unos condones por si los demás no tenían, finalizando con un beso al espejo para darse ánimos y confianza.

Al salir del baño observa a su pequeño durmiendo sobre la cama matrimonial que el señor Kim les dio, está abrazando todos sus peluches como puede y ya una leve babita hace sus labios y mentón un poco brillosos.

Jungkook da una risita tapandolo bien con las sábanas, limpia su baba y le hace cerrar su boquita de patito para irse a la cocina

Del tiempo que estuvo allí ya se sabía dónde se ubicaban las alarmas y como hacer para no activarlas. Había una cámara de vigilancia en la puerta principal, portón de afuera y el patio, una alarma en la puerta principal que se activaba desde afuera y un sensor de movimiento en el jardín, así que el conejito aprendió abrir la ventana de la cocina sin hacer ruido y saltar las paredes de afuera para salir.

Al estar estar en la cocina frente a la ventana que le daba su libertad escuchó una voz que le causó el susto de su vida.

- ¿A dónde crees que vas? -ahoga un grito dándose vuelta encontrando a Mark en piyamas abriendo el refrigerador, viéndole con su ceño ligeramente fruncido.

- M-Mark... Me asustaste. -aleja sus manos de la ventana.

- Vine por un bocadillo nocturno ¿Sigues con eso de salir a tomar y follar por las noches? -su voz es baja casi en un susurro, pero aún así hace notar su disgusto mientras lo analiza de arriba abajo.

- Es una necesidad que tengo. No lo entenderías. -refunfuña.

- No puedo decirte nada ahora. JiMin está asalvo después de todo, haz lo que quieras.

- Mark... -le llamó, debido a que este estaba buscando un poco de comida en las repisa como si nada, solo asiente con la cabeza en señal de que lo estaba escuchando- Necesito saber algo...

- ¿Sobre lo que te dije antes? -da justo en el clavo- Si es así entonces yo soy el que tiene muchísimas cosas que contarte.

- Me gustaría saber todo...

- ¿A qué te refieres con "todo"?

- Todo... Desde cuándo conoces a YuGy para considerarlo tu amigo, porque hasta donde sé, ustedes dos deberían ser enemigos, y ¿Sabes algo de mi persona? ¿De mi bebé MinMin? ¿Qué sabes que yo no? ¿Qué es lo que le ocultas a Tae por lo que estás tan callado y ciertamente confundido?

Mark sonríe volteando a verle, tenía una caja de cereales en su mano.

- Creo que está noche no vas a salir de estas paredes, Jeon Jungkook.