🐰Cuarenta y seis🐣

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Jungkook quiere llorar. Gritar y salir corriendo de ahí, pero el Señor Kim no se lo permite.

Muerde con fuerza sus labios mirando el piso unos segundos impidiendo que sus lágrimas salieran de sus ojos y observa al mayor a su lado luego, quien solo le sonríe como si nada pasara sosteniéndole de su brazo para que no se escapara también.

- Ve por él. Te va perdonar... -intenta hacer que Jungkook sea fuerte dándole una caricia sobre sus nudillos- No te derrumbes ahora que estás aquí, él solo tiene muchas emociones ahora, entiéndelo. -el moreno asiente con su cabeza.

Limpia las lágrimas que querían escapar de sus ojos con su puño y da un suspiro.

No iba derrumbarse ahora, YuGyeom tenía razón. No podía rendirse al estar frente a él, nunca lo hizo ¿Por qué debería hacerlo ahora?

Y sin esperar más salió corriendo por detrás donde el infante se había ido.

Buscó por el patio, y lo pudo encontrar atrás de Taehyung, quien le daba caricias a su espalda preguntando qué pasaba. Sin embargo, JiMin no decía nada y solo lloraba con fuerza ocultando su cabeza entre su pecho como si quisiera desaparecer del mundo.

Jungkook se asomó por la puerta del patio. Taehyung al verle se sorprendió de igual manera, pero luego le sonrió comprendiendo la situación, levantándose del suelo y dejando que el pequeño infante se ocultara tras de sus piernas entre lágrimas.

- Que bueno verte aquí otra vez. -Tae dice regalándole una de su preciosa sonrisa cuadrada estirando una mano para saludarle.

- ¡No es bueno en lo absoluto! -grita JiMin entre lágrimas impidiendo que se saludaran. Taehyung solo suspira acariciando los cabellos castaños del pequeño.

- ¡Pero es Kookie! ¿No lo habías extrañado? Está aquí de nuevo por ti. -JiMin lloriquea otra vez negando con la cabeza, sin querer ver al moreno que sentía lloraría también.

Jungkook quería abrazar al pequeño, apretarlo entre sus brazos diciéndole lo mucho que lo había extrañado y lo tanto que amaba. ¡Por dios! Que sentía que se iba derrumbar al ver a su bebé llorar de esa manera, no podía soportarlo.

- ¡N-No! ¡No lo quiero aquí! -Taehyung no entiende nada de lo que pasa también.

JiMin cada noche lloraba porque quería volver a ver a su "hermano mayor". Aquel que había dado todo por él, que hizo todo lo que pudo para hacerle feliz, sin embargo, ahora notaba una nueva faceta que nunca había visto.

Si bien había visto al infante destrozado antes, nunca lo había escuchado gritar pidiendo que alguien se alejara como si se tratara de un monstruo, pero ahora era así, y no le gustaba para nada.

Miró a Jungkook, el cual ya tenía lagrimas amenazando por salir en sus ojos, con sus pies pegados a la tierra, no podía moverse, su corazón dolía y no sabía qué hacer.

Sentía que el pequeño le odiaba, pero su boca no se atrevía a formular alguna palabra como para preguntarle confirmando su duda o hacer algo para calmarlo.

- Pero Jungkook vino por ti. -siguió insistiendo Tae para que JiMin dejara de llorar escondidos en sus piernas. Sin embargo, el menor se negaba a verle.

- E-Es malo. ¡Es un ser malvado! ¡Me mintió!

Jungkook no puede evitar llorar por fin. Era verdad, y aquella verdad le dolía.

Quiso dar media vuelta para irse de allí, pero el Señor Kim estaba a su lado otra vez, dándole leves caricias en su espalda. También Mark estaba ahí, pero este solo le hacía algunas señas a su novio Tae para que viniera con él y dejara al pequeño solo.

Todo por él [Yugkook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora