INFECTADOS

Capítulo 26 (Muerte y vida)

— Despierta Geisy. — Me acerco y estremezco su delgado cuerpo.
Esto no podía estar pasando, no podía perder más, no podía perderla a ella.

Los chicos me miraban perplejos, sin poder hacer nada.

— Ella se ha ido. — Mencionó Taylor con voz quebrada y lágrimas en sus ojos.

— ¡Noooo! Ella no. — Alzo mi cabeza y empiezo a gritar como loco.

— Geisy por favor, despierta.  — La muevo una vez más con fuerza. 
De inmediato Josh y Daph van hasta mí y me retiran del cuerpo de Geisy.

Con fuerza los empujo, desatándome de sus brazos y empiezo a gritar al mismo tiempo que golpeo la pared del cubo.

Mis manos empezaron a sangrar pero no podía detenerme. Ya no sentía dolor, nada superaba el dolor de ver a mi  pequeña hermana muerta. Sentía que le había fallado a papá y mamá.

— Rey ya detente por favor, te estás lastimando.  — Taylor grita mientras me abraza por la espalda.
Sin controlarlo hago un movimiento brusco y la lanzo al suelo.

Acto luego caigo de rodillas en el frío suelo del maldito cubo, mi cabeza estaba totalmente suspendida, mis lagrimas hacían un charco y solo un minucioso gemido salía de mi. Los chicos por otra parte no decían nada, solo lloraban ante la pérdida de Geisy y mi estado casi demente. Estaban a la expectativa de otra reacción extraña de mi parte.

Estando arrodillado siento como mi cuerpo empieza a arder, mi corazón se aceleró y sin poderlo soportar me levanto de un salto y vuelvo a golpear las paredes al mismo tiempo que gritaba como demente.

La temperatura en mi cuerpo cada vez se hacía más fuerte, sentía como si me quemara por dentro. Mis puños no dejaban de golpear esa pared aunque sangraban a chorros.

De repente siento una energía que recorre desde mis pies hasta mis manos, mi cuerpo temblaba hasta que sin poder resistirlo grito con fuerza llevando mi cabeza hacia atrás y mi rostro hacia arriba . En ese instante mis manos se encendieron en energía.

No podía creerlo, el poder había vuelto a mi. Me quedo perplejo viendo mis manos, mientras que los chicos me miraban totalmente paralizados, no podía asimilar lo que estaban viendo.

Sin perder tiempo y sin poder casi controlarlo mis puños ahora encendidos en energía empezaron a golpear una y otra vez la pared del cubo con más fuerza.

De repente el cubo empezó a estremecerse y se escuchaba un fuerte eco que llenaba todo el lugar.

— El cubo se está desestabilizando. ¡ No te detengas Rey! — Anima Taylor con voz eufórica.

En ese momento miré hacia atrás y ví a Geisy, ví su delgado cuerpo pálido. Grito con mucha fuerza y pongo mis puños después de un gran impulso sobre el cubo, logrando que en la pared metálica se abriera un enorme agujero.

Sorprendido por lo ocurrido doy dos pasos atrás y con respiración agitada doy media vuelta y observo a los chicos quienes me miraban igual de sorprendidos.

Paso mi antebrazo por mi rostro para quitar el sudor y lagrimas y siento como Jhosh se abalanza a mi para abrazarme.

— Bien hecho amigo. — Daph se acerca y pone su mano en mi hombro.

Los chicos podían sentir algo diferente en sus cuerpos, el neutralizador del cubo estaba perdiendo fuerza lo que significaba que estaban recuperando sus habilidades.

—¡ No soporto un minuto más aquí! — Exclama Daph acercándose al agujero para salir.

— No se ve nada hacia fuera, todo está totalmente oscuro. — Jhosh se acerca al agujero temeroso observado hacia afuera.