EL futuro da miedo cuando no tenemos claro nuestro camino, Kaminari Denki es un chico que solo busca disfrutar su presente junto a su mejor amigo Kirishima, quien había estado a su lado durante mucho tiempo y apoyado. Sin embargo ciertos acontecimie...
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Las mejillas del rubio aplastaban las teclas del computador mientras estas eran bañadas en sus babas. Parecía estar inconsciente y las ojeras solo mostraban las horas de juego que había tenido esa noche. Había perdido la noción del tiempo mientras trataba de eliminar de su mente el tema de su abuelo y ese extraño sentimiento. Había caído inconsciente a las cinco de la mañana.
El pitido de su teléfono le hizo deslizar su mano por el escritorio hasta encontrarlo y aun con los ojos cerrados deslizo su dedo como si respondiera una llamada.
—¿hola?—pregunta a la nada sin recibir una respuesta—¿quien habla?—pregunta con una voz ronca mientras abre los ojos para revisar su teléfono y darse cuenta de la hora—mierda...
El rubio salió a toda prisa de su habitación y en el pasillo se encontró a su madre quien al parecer se dirigia a su habitación para despertarle. Kaminari se dirigió a la cocina y tomo un poco de pan que guardo en su mochila y prosiguió a dirigirse a la puerta despidiéndose de su madre al final. Al salir de su departamento se encontro con aquel chico cajero. Ambos parpadearon simultáneas veces para tratar de asegurarse de que veían bien, pero lo que sus ojos les mostraba no era un espejismo, era la realidad.
—por un momento pensé que estaba mirando un espejo—bufo Shinsou burlándose de la apariencia del rubio.
—¿como...? ¿tu saliste de esa puerta?—pregunta señalando la puerta del departamento del frente. Shinsou regresa su mirada y después asiente.—¿realmente vives ahí?
—si...
—no es posible—niega sacudiendo su cabeza—he vivido en este departamento toda mi vida y jamas te había visto—el pelo morado desvío su mirada hacia otro lado—¿te acabas de mudar?
—no—sigue sin mirar al rubio—desgraciadamente he vivido aquí desde que era un feto—Kaminari se queda mas pasmado de lo que ya estaba. 18 años de su vida y jamas había visto al chico cruzar la calle si quiera. Solo lo había visto caminar por la UA y estar con su compañera de clase Yuki, pero fuera de la academia nunca lo había divisado ni de casualidad.
—¿entonces como...?—las palabras de Kaminari fueron cortadas por su teléfono sonar, esta vez si era una llamada.—¿hola?—el pelo morado ignoro la presencia de Kaminari y bajo las escaleras con calma siendo seguido por el rubio.
—Kaminari ¿que estas haciendo?—pregunta Kirishima–la clase ya comenzó—los susurros de su amigo solo le dicen que este le habla durante la primera clase y eso le hace volver a mirar la pantalla de su teléfono para verificar la hora, claramente no es mentira así que trata de apurarse, pero al ver el paso tranquilo de Shinsou le hace preguntarse porque actúa tan despreocupado a pesar de la hora.
—estaré ahí....—responde colgando la llamada—oye, oye, Hiro...
—Hitoshi—corrige el contrario sin detenerse.
—¿sabes como entrar después del inicio de las clases?—el pelo morado se detiene y suelta un suspiro.
—¿que si es así?—pregunta con notoria seriedad, pues estaba un poco furioso por el hecho de que su presencia había pasada desapercibida durante muchos años, cuando el claramente fue capaz de mirar a Kaminari, incluso mas de la cuenta. Y ahora este chico pretende que no ocurrió nada y que se conocen de toda la vida.
