UNA NOTICIA

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Una noticia

Un mes después y varios decoradores, mi casa ahora si parecía un hogar, la gente de servicio llegaría mañana y yo estaba en casa completamente sola ya que Josh tuvo que viajar por su trabajo.

Aún no podía asimilar completamente el hecho de que el fuese mi esposo, todo sucedió tan de repente que solo pensé en las personas que perderían sus trabajos si yo no me casaba.

Me detuve a pensar en Norman antes de estampar mi firma en el documento que me convirtió en la señora Reedus...pensé en que estaba siendo la esposa del hermano equivocado. Ahora eso ya no importaba, lo que importaba era mantener todo esto a flote por un año y yo obtendría mi libertad nuevamente.

Creo que la idea de casarme no me aterro completamente porque sé que Josh es mi amigo y no va a exigir nada de mí.

—Este matrimonio no es real.

Tuve que convencerme de ello para no entrar en pánico, este matrimonio no significaba lo mismo del anterior, aquí no estaba obligada a dar nada...absolutamente nada.

...

—Es un permiso de salida por un tiempo limitado—observo detenidamente el documento en mis manos—es todo lo que pude conseguir Jiuliana, Trione es una persona poderosa y los amigos de su padre también tienen negocios con él, negocios que no quieren perder.

—Trione está presionando ¿es eso?—pregunto a pesar de saber la respuesta.

León se acomoda en el sofá, mirándome con seguridad.

—Jiuliana, sé que muchos fuimos cobardes antes, pero ahora créeme que estoy haciendo lo posible para que todo lo que Trione haga no recaiga sobre ti, con este permiso puedes salir del país, el joven que te acompaña ya es tu esposo, es de la familia Reedus ellos también tienen contactos y pueden...

—No, no...—Me pongo de pie mientras que la idea de que Norman o cualquiera de los Reedus sepa la verdad sobre mí. —Ellos no pueden saberlo, no quiero que lo sepan...

—Mi niña...—Irina me abraza llorosa—la vida ha sido tan injusta contigo.

—Mi padre está muerto y aun así me sigue destrozando la vida...te juro que estoy cansada de esto... ¡estoy harta...harta!—masculle llena de rencor.

—Debes irte, mientras estés lejos estarás más segura de ese hombre, León hará lo posible para que todo se aclare, lo hará ¿no es así?—este asintió.

—Pedí la exhumación del cuerpo de tu ex esposo—la sola palabra me revuelve el estómago— Trione está bloqueándolo y es por algo, no voy a permitir que...

— ¿Te ha pedido algo, es eso?—León se calla de inmediato—solo dímelo, sea lo que sea necesito saberlo antes de irme.

—Él quiere seguir con los planes que tenía con tu padre...no dudo de que si continuas aquí él te buscará, te quiere como esposa y asegura que le dio a tu padre una gran suma de dinero por ti.

Caigo sentada en el sofá sosteniendo mi cabeza con mis manos, ¿Cómo era posible todo esto? Unas ganas inmensas de vomitar me invaden mientras los recuerdos dolorosos se mezclan en mi cabeza.

—Lo hizo de nuevo—susurro recordando el día en que mi padre aceptó dinero por mí—lo volvió a hacer.

—Mi niña—Irina me acuna en sus brazos, mientras yo me siento en un vórtice que abre sus fauces para tragarme nuevamente y llevarme al mismísimo infierno—ya no estás sola cariño, tu padre ya no nos puede amenazar, nunca dejaremos que te haga lo mismo.

—Jiuliana no permitiremos que nada te suceda—León me abraza junto a Irina brindándome el apoyo que siempre sentí pero que nunca pudieron hacer real gracias a la constantes amenazas de mi padre, ellos dos eran los únicos que conocían mi verdad.

Perfecta ImperfecciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora