Perfecta Imperfección

QUE EMPIECE EL JUEGO

Que empiece el juego

*Jiuliana*

Al llegar al aeropuerto Josh revisa su celular sin soltar mi mano, el viaje había sido bastante cansado y mi pierna me molestaba un poco.

—Cuando lleguemos al departamento quiero que descanses el resto del día—asentí sin rechistar porque me sentía cansada—Qué raro, tengo la bandeja de mensajes llena—marca su buzón y de pronto se detiene, mi piel se crispa al ver su semblante, sea lo que sea que escucha hace que pierda todo color en su cara—No puede ser.

— ¿Qué pasó Josh...es Norman le ocurrió algo?—La idea me golpea. Su mirada se clava en mí mientras sus ojos claros se llenan de tristeza. — ¿Que paso con Norman?—suelto asustada.

—No, no bonita él está bien, es...es Clara ella...Dios ella falleció. —me abrazo fuertemente.

—No Josh...no, ella no.

—Shtt tranquila mira, debemos llamar a Norman—al mirarlo él también tenía sus ojos anegados en lágrimas, con el dorso de su mano se secó las lágrimas que mojaban su cara, yo por mi parte me sentía fatal. —Ven—su voz se quebró entretanto tomó mi mano dirigiéndonos hacia el auto solo hasta entonces llamó a Norman. —Hermano...si...—un gemido lastimero broto desde mi pecho—si ella está conmigo, acabamos de llegar, la llevó al departamento y luego vamos hacia allá...no, no pienso dejarla sola.

El resto del viaje a casa no lo sentí, mi pecho dolía demasiado.

¿Cómo era posible que esto pasara? Cuando me marche ella quedó perfectamente bien.

Me cambié de ropa de inmediato mientras Josh hizo lo mismo en la habitación contigua, él no había dicho nada pero sé que la quería un montón.

Yo ya la adoraba y la conocía desde hace poco. Norman debe sentirse fatal.

—Dios Daniel—Clara era el primer amor de su vida según sus palabras.

...

Al llegar a la iglesia, divise a Marcus junto a Alina, él la tenía a ella, mi mirada se paseó por el lugar sin poder ver a Norma, de inmediato a quien si vi fue a Daniel debajo de un árbol de pie mirando a la nada. Mis lágrimas brotaron nuevamente cuando me vio, avanzó varias zancadas hacia mí y lo abrace tan fuerte como pude mientras el lloraba en mi hombro.

—Ella solo se fue a dormir y no despertó Jiuliana.

—Dios Daniel, no sé qué decirte—hable en su oído. —lo siento tanto.

—Solo abrázame que lo necesito mucho.

...

*Norman*

Había estado loco por verla, necesitaba verla, deseaba tener un abrazo como el que ahora Daniel recibía. Deseaba decirle lo que había descubierto este tiempo lejos de ella

—Norman, la misa está por empezar—Elena tira de mi brazo y yo doy un último vistazo hacia la escena que Daniel y Jiuliana protagonizan.

Estaba sentado en tercera fila, y desde aquí podía ver a Jiuliana en medio de Marcus y Daniel, ella no se había alejado de él, supongo que ahora que Rebecca se fue, tal vez él tenga una oportunidad con ella. Y esa sola idea me hacía sentir enfermo.

Hace un mes atrás había decidido rehacer mi vida con Elena y no todo marchaba bien...aún sentía un vacío en mi pecho que por más que lo deseara no podía llenarlo.

Ahora una persona llenaba mis pensamientos y era la misma persona que había rechazado cuando me dijo que me amaba.

Era por eso que había buscado concejo en Clara.