VEINTIDÓS

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En este ultimo tiempo el Gabriel anda super extraño, decaído, desganado, es como si fuera otro. He intentado saber que le pasa pero con cuea habla, ni al Pizarro le ha querido hablar. 

—Oye, no crei que el Gabo anda un poco decaido— me pregunto el tonto ese, intente no soltar un comentario pesado a su pregunta pero no pude.

—Nah, seguro que la NASA no se ha contactado contigo, eres un genio. 

—Puta la weona pesá.

—Sorry, no puede contenerme. Pero es algo obvio ¿no? Si antes andaba webiando de aquí por allá y ahora se la pasa metido en la sala con el celular y los audífonos.

—Sii, igual como que teni razón.

—La tengo, eso no esta en duda.

—Un poco mas de ego porfa— webio el Pizarro

—Filo, tenemos que saber que le pasa al Gabo.

El se quedo un tiempo en silencio, yo creo que pensando en que hacer para sacar información.

—Y si le preguntamos— dijo con la mano en la pera, ¿sera weon? No me aguante y le pegue un wate.

—Y que creí que he intentado todos estos días. No me dice nada.

—Puta, esa wea dolió— dijo sobando su nuca —. La otra wea es seguirlo—

Se me encendió la lucecita, esa era una muy buena idea.

—Oye, esa es una buena idea.

—¿Enserio?

—Si weon, una misión encubierta.

•••

Estábamos siguiendo al Gabo, que por lo que habíamos escuchado se iba a juntar en el mall con la desconocida de hace algunas semanas.

—Se sento, disimula— le dije al Pizarro, en efecto el Gabo se había sentado en una de las bancas del mall.

—Ya, cuando llegue la persona con la que se va a juntar nos corremos para quedar mas cerca— dijo el Pizarro

Esperamos un buen rato pero nadie llegaba, demás que lo dejaron plantado.

—Oye Pizarro no llega nadie, mejor vamos a comer...— no pude terminar porque puso su dedo en mi boca.

—Esperate que llego alguien, no te des vuelta por que estan mirando hacia aquí.

Le hice caso y me pare de donde estabamos, camine un poco para quedar a nada de donde esta el Gabo y la mina.

—Para que me llamaste— pregunta el Gabriel super cortante.

—Queria explicarte todo lo que paso con el Tato— dijo la mina, esta voz la he escuchado. Mire de reojo para ver quien era y el alma se me fue del cuerpo.

La Francisca estaba en frente de mi amigo, no quiero formar ideas apresuradas pero conchesumadre que hace mi hermana con el Gabriel.

—No tienes nada que explicar, lo nuestro ya se acabo.

¿Que chucha? No estoy entendiendo nada.

Mire a mi lado para ver si el Pizarro entiende algo pero esta igual de colgado que yo.

—Pero bebo, no es nada...

—Bebo nada, Fran te metiste con el mientras estabas conmigo. Como quieres que lo tome.

En estos momentos me estoy formando una película y siento que soy parte de ella.

—No hicimos nada, el weon ni un piquito me dio, era una pantalla.

—Bienbien, que bueno por ti pero yo ya no quiero nada.

—Bebo yo te quiero mucho, no dejes que esto termine por una wea insignificante.

—Puta que me querí caleta puertas adentro, pero cuando te mencionaba alguna junta para salir juntos altiro te negabas.

—Pero si sabí que era por la Mila, que ella no apoyaba nuestra relación.

Esa wea me cayó como pata en la guata, como balde agua helá, como un rojo coef. dos.

De verdad ellos hicieron todo eso por mi culpa. Intente pararme para afrontarlos pero la mano del Pizarro me detuvo.

—No te recomiendo que lo hagas ahora— susurró para que nonlo escucharán tanto.

—Ni siquiera sabemos si la Mila nos apoyaba o no. Le escondimos lo nuestro por mese. Mejor me voy, no quiero seguir con el tema— el Gabo se paro de la banca y mi hermana fue tras él, lo seguimos de cerca.

—¡Gabriel espera!— grito mi hermana en medio del pasillo, el susodicho se dio vuelta y apenas pudo reaccionar al beso que le dio mi hermana.

—Porfa dame otra oportunidad— le dijo mi hermana, el Gabo en estos momentos tiene los ojos brillosos por las lágrimas.

Me da pena verlo así, pensar que fue todo mi culpa weon.

—Fran te quiero demasiado pero esta wea me dolió, no te puedo perdonar así como así. Dame un tiempo— dijo mi amigo dandole un beso en la frente para luego irse limpiando las lagrimas de su cara.

Mi hermana se quedo ahí  en medio del pasillo inmóvil secando las lagrimas de sus ojos.

Y puta yo también estoy llorando, dos personas importantes en mi vida estan sufriendo por mi culpa weon.

Me siento como la mierda misma.

El Pizarro me hace cariño en la cabeza intentando consolarme pero dudo que pueda.

—Nubecita no llores, que me da pena a mí.


•••
4/8

Que triste :(

¿Que piensan que pasara en los próximos capítulos?



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