Capitulo 18: El Regreso

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Abrazos por aquí, abrazos por allá, me sentía muy querido en ese momento tan especial. A veces uno no se toma el tiempo de decir un "Te quiero" o dar un cariñoso apretón de brazos, yo de vez en cuando me molestaba en mi cabeza de que eran muy irritantes las personas al exhortar nos en todo momento a declararle a la persona que amamos mucho que es muy importante, en ciertos casos sonará cursi. Hay que rechazar la vergüenza y dejar que el amor por tus seres queridos fluya libremente, las acciones hablaran por sí mismas.

Mis padres siempre fueron buenos conmigo (todo el rato lo he recalcado), algo que prueba eso es que cuando faltó el pan (o hubo escasez) siempre me cedían sus alimentos cuando tuve hambre, y ¿Qué hice yo en su momento para merecer su gran cariño? Ciertamente nunca podré pagar su afecto y su atención hacia mi, así es el amor, ayudar aún sabiendo que el otro ser no hizo nada por ti. De esa manera hay que actuar, pero todos sabemos que pocas veces aplicamos lo que aprendemos.

Esas dos personas que me criaron y de las cuales hablo tanto me prepararon para el mundo, pero todas estas situaciones nuevas y tan extrañas se salen de los parámetros y de mis propias perspectivas, ojalá pudiera sacar toda esta tristeza y angustia de mi corazón, pero me siento solo cargando con todo esto, desearía que alguien me comprendiera y me ayudara, aunque se bien que todo esto me lo guardaré hasta encontrar el momento para conversarlo.

Intentaba sonreír, pues ¿Qué tienen que saber ellos lo que ocurre con mis emociones? Ya tienen bastantes problemas para cargar con mis basuras, y sí, digo basuras porque lo que me ha ocurrido en este último tiempo son puras cosas malas (deben pensar que soy un exagerado). Estaba metido en un tremendo enredo y mis cargas se volvían más pesadas, y si algo he aprendido es que me responsabilizaré de mi propio saco, sea culpable o no de tenerlo encima.

Después de esta tonta reflexión que yo solamente escucho, volví al mundo real y me acordé del silencio incómodo que hubo hace unos momentos, había venido con las mejores intenciones del mundo ignorando mis "situaciones", y ellos se quedaron callados de lo sorprendidos que estaban de verme, llegando a generar una expresión divertida (boca exageradamente abierta y unos ojos tremendos que se salían de sus cuencas), hasta que cada uno me empezó a abrazar como si intercambiar dinero por esa acción.

-Yo también estoy gozoso de verlos de nuevo-dije mientras recibía abrazos múltiples

-Tú si que eres duro de matar-dijo Elizabeth riendo

-Demonios Mateo ¿Cómo es que sigues vivo? - preguntó Diego Sorprendido

-Créanme que en su momento sentí que mi alma se desprendía de mi ser-dije

-Y ¿Cómo fue? - preguntó Cristina qué también estaba viéndome

-Fue horrible, es algo desesperante y que no se lo deseo a nadie. Cambiando de tema, Cristina ¿Me puedes por favor prestar un traductor? Es que es difícil hablar en dos idiomas a la vez-dije y Cristina me pasa el traductor

-¡Por Dios Mateo, estas azul, Debes tener hipotermia. Ven rápido antes de que pase a peores! - alzó la voz Luna preocupándose por mi

-No, tranquila que eso tiene una explicación-dije intentando calmarla

-Y también estas más robusto-dijo Hugo fijándose en la forma de mi cuerpo

-Eso... También tiene una razón, pero ¿De verdad me veo robustito?-pregunté asustado

-Osea, sigues siendo flaco, pero pareciera que tuvieras más masa que antes-dijo Valentina  que también estaba allí

EL YETI (Pie Pequeño Fanfic) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora