Tomoyo
No tengo ni la menor idea de cuanto dormí, caí rendida por el desgaste psicológico que me causó todo el día de ayer, me doy la vuelta y enciendo mi celular, me estiró un poco en lo que aparecen los números en la pantalla. ¡8:23! Mierda, ya debería estar en el cuartel, me paró de golpe y comienzo a cambiarme con lo primero que encuentro, no se cuanto tardó pero creo que estoy bien así, tomó mi celular, corro hacia mi sala, tomó el maletín y salgo. Demonios, no importa cuán dañada este yo, no debo fallar en mi trabajo, eso me lo enseño mi papá, ese señor me enseñó tantas cosas que no estoy segura de que tanto vive el en mi.
Corro por las calles, empujando gente y viendo como los niños me adoran por correr tan rápido, tengo buena resistencia y condición, suficiente como para que de mi departamento al cuartel hice sólo minutos. En cuanto estoy a una calle de el cuartel me detengo y me agachó tomando mis rodillas como soporte, respiro hondo, debo tranquilizarme, debo disculparme con el comandante, Dios esto es muy vergonzoso, me levanto y comienzo a caminar, tomó mi cabello y con trabajo lo logró acomodar para hacerme un chongo comienzo a buscar mi liga en lo que entró al cuartel, comienzo a darle vueltas a la banda elástica y ¡pum! Aquí estoy yo en el suelo, choque con alguien, levanto lentamente la vista y...¿Akihiko?
-Sazumi, buenos días, ammm me debes un te negro.- me pongo roja y me levanto rápidamente, <<Excelente forma de empezar el día>>.
-Perdoneme detective.-saco un pañuelo de mi maletín, y comienzo a secar su saco azul un poco marino, que hace unos segundos estaba seco.-No vi por donde venía caminando, se me hizo tarde y yo...yo.-Akihiko toma mi mano y la separa de su pecho, volteo a verlo y esa mirada fija suya me captura.
-Vete a disculpar mejor con el comandante,pregunto por ti y le dijeron que aún no habías llegado, corre a su oficina, esto me lo pagas después.- me suelta, me da una palmada en el hombro y se va.
Me quedo parada por un segundo, me trato de tranquilizar...olvidalo, camino hacia la oficina del comandante rápidamente, debo de disculparme con el.
-Puedes pasar.-se escucha al otro lado de la puerta.- Apenas cierro la puerta, hago mi reverencia.
-Perdoneme por llegar tarde comandante, fue un imprevisto, no volverá a pasar.- me quedo quieta en mi posición, debo de permanecer así. El comandante teclea rápidamente en su computadora un poco obsoleta, parece un poco enojado.
-Sazumi, primer retardo ¿eh? Jaja, no te preocupes pequeña, se que es difícil acoplarse, Pero no te preocupes el primero es de chocolate, el segundo será como si fuera el primero y así sucesivamente hasta tu despido...-me incorporo para verle la cara, deja de escribir y voltea a verme.- ¿quedó claro?
-Si señor, muy claro.
-Muy bien ahora devuelta al trabajo, tienes un cuerpo esperándote.
Abro los ojos de la sorpresa, es cierto, el cuerpo de Keitah está aquí, en mi laboratorio, en mi trabajo. Me retiro de la oficina sin decir nada, y camino lentamente hacia mi laboratorio, antes de entrar respiro profundo, inserto la llave y entro.
Ahí está, el cuerpo del hombre al que yo ame durante toda mi adolescencia, postrado en mi mesa, que vueltas da la vida.
Cierro con llave y bajo la cortina de seguridad, mientras baja dejo mi celular y mi maletín, comienzo a tomar mi cabello y ahora si puedo amarrarlo, me acerco al anaquel donde decidí guardar las batas, y todo el equipo que necesito para vestirme, comienzo a hacerlo. Cuando terminó respiro profundo una vez más, pongo mi pizarron para apuntarlo todo, pongo la camara a grabar y pongo la pizarra con todos los datos del delito y caracteristicas generales del cuerpo, tomo mi bandeja de instrumentos y me acerco lentamente. <<Puedes hacerlo, puedes hacerlo.>>
Quito la sábana y veo el pálido rostro de Keitah, comienzo a quitarle la sábana dejando su cuerpo desnudo, comienzo a palpar todo, desde su cuello el cual si está roto, asfixia, hombros intactos, brazos, sin marcas de lucha ni huesos rotos o safados. Piernas, nada particular, área genital, ni heridas superficiales ni nada infeccioso. Muy bien pasemos a el área interna, tomó el bisturí y respiro una vez más, esto es muy extraño, comienzo a hacer conté en y, hombro al pecho, hombro al pecho y el corte se sigue hasta el ombligo. Lo abro para ver si hay algo roto, nada, ni costillas rotas pero si calcificadas, comenzaba a tener signos de cirrosis severa, Dios, el estómago está un poco enfermo pero nada grave, corazón normal, no se ve mal un poco grande, pulmones un poco dañados, tal vez comenzó a fumar de nuevo, apuntó todo en la pizarra, aún que esto no tiene mucho sentido, tomó su cara y abro su boca, lo primero que veo es la lengua, está negra completamente negra, tambien veo algo blanco en las mejillas, tomó un poco con un hisopo y la pongo en un tubo de ensaye, debo analizarlo, tomó un poco del tejido de la lengua y a un tubo también, dientes, nada en medio de ellos están blancos como perlas, aún que no entiendo como los tiene tan blancos si el fumaba, encias pálidas comienzo a dudar y voy al telescopio a analizar el hisopo, la pongo en el portaobjetos, y cubro, comienzo a ver sus caracteristicas, es una sustancia, química, pero ¿qué puede ser...?
Corro hacia el y comienzo a ver el estómago, está un poco duro, lo abro y tomó un poco del líquido estomacal, ojalá haya algo aquí. La muestra la pongo a lado de el microscopio, la analizaré en cuanto termine con Keitah, vuelvo frente al cuerpo, trato de ver que me falta por analizar, le corto la muñeca para analizar la sangre...no está coagulada..., no está coagulada. <<Veneno>> Veneno...veneno, eso es, veneno, en exclusiva veneno para ratas, es el que tiene más anticoagulantes de todos los venenos que se pueden comprar, corro hacia el pizarron y anoto, lo de la sangre, el posible uso de veneno de ratas y sólo me falta los ojos. Camino hacia el y le abro el párpado, ojos vidriosos, si efectivamente es veneno, no queda otra razón, Pero tiene que ser en cantidades grandes para causarle esto, no hay hemorragia, así que tal vez debido a tanto veneno en su sistema le causó un ataque al corazón. Escribo en la pizarra mi hallazgo, cierro a Keitah y lo tapo, me despido en el vídeo y apago la cámara.
Camino hacia el microscopio y pongo la muestra del estómago bajo el lente, si es veneno se ve claramente, inserto un poco en un ácido para comprobar si en efectivo es veneno, cambia de color, si, fue el veneno.
Corro hacia mi escritorio y me dejó caer en la silla para deslizarse hasta mi computadora, comienzo a teclear en una hoja en blanco mi reporte, todo mi hallazgo y mi suposición, veo como crecen y crecen los párrafos, esto es muy excitante, tranquilo Keitah, me encargaré de descubrir quien te mato.
Terminó en 22 minutos y lo mando a la impresora, en lo que sale, camino hacia mi mesa y veo el cuerpo de Keitah, su cara sobre todo, le cierro la boca y el párpado, me acerco y le beso la frente, atraparan al que te haya hecho esto. Lo tapo nuevamente con la sábana y voy por mi informe, se lo deben llevar a la morgue para que vengan a reconocerlo, oh no, su madre...
Cuando llegó con el comandante le entregó el informe.
-Comandante aquí tiene el informe de el caso del restaurante, espero no haber tardado tanto...-
-¿Casi 4 horas no te parece demasiado...?- volteo a ver el reloj que siempre traigo en mi mano, tiene razón, comencé casi a las 9 de la mañana, son 15 minutos para las 2 de la tarde.
- Lo siento comandante, pero así es el trabajo de un forense.
-Comprendo, puedes retirarte.
-Comandante ¿a quién tengo que llamar para que se lleven el cuerpo a la morgue?
- Por falta de personal y por respeto a los demás establecidos la morgue a lado de tu laboratorio, para que se te haga más sencillo a ti y también a los demás, no todos soportan ver un cuerpo acabado de analizar.- voltea a verme y me sonríe ampliamente, saca de su escritorio una llave.- Toma no te la había dado por que pues no había habido oportunidad.
-Ah, gracias, compermiso.- salgo de la oficina y si efectivamente no había notado que después de la puerta de mi laboratorio no hay otra puerta o ventana, entro a mi laboratorio y veo la puerta atrás de una cortina que nisiquiera había notado <<Esto es demasiado bueno para ser verdad>>
Abro la puerta y enciendo la luz, 6 bloques de resguardo, seguro de las puertas y aire acondicionado para el olor, perfecto. Llevo la mesa hasta el cuarto y pongo a Keitah en un bloque, prácticamente sólo lo deslizó, cierro y pongo en la parte de arriba de la cerradura, nombre de Keitah, causa de supuesta muerte y día de hallazgo, no quiero ver a si madre, no puedo.
Antes de cerrar la puerta veo por última vez el bloque, respiro fuerte pero siento como una lágrima baja por mi mejilla, salgo y cierro, me recargo en la puerta y me deslizó al suelo, abrazo fuerte mis piernas. Al fin termine con mi trabajo, ya puedo sacar todo el dolor. Comienzo a llorar pero recuerdo donde estoy...es mejor tranquilizarme.
De repente alguien toca la puerta, la toca un poco fuerte.
-¿Sazumi? ¿Estas aquí?- es Akihiko, me levanto y me seco las lágrimas, que bueno que no me maquillo, Abro la puerta y veo al radiante hombre con el cual choque en un chaleco de color negro y azul, perfectamente listo para salir.
-¿Te interrumpo?
-No Tomoheda, ya termine con la autopsia.
-Oh wow, lo siento, no pensé que...
-No te preocupes, está bien.
- ¿Qué harás está noche? ¿irás sola a casa?
- Puede que si, quiero arreglar algunas cosas, probablemente ir de compras...-
-Tengo una mejor idea...- volteo a verlo a los ojos.- salgamos,Sazumi.

Tomoyo Sazumi.Where stories live. Discover now