❝Glory Nights; 1930❞ ﹙Yoonmin﹚

VIII

— Te haré las cosas bastante fáciles — Dijo Yoongi apagando su cigarrillo en la mano del irlandés, quemándole una pequeña zona de la mano, provocando en este una expresión de dolor en su rostro. — Ustedes trabajan para nosotros o no trabajan, si quieren comercializar aquí sus sustancias, entonces deberán darnos a nosotros la mitad de sus ganancias. Me parece un trato justo, ustedes venden y nos dan la mitad porque nosotros les damos el permiso, ningún policía los molestará.

—Serian más perdidas que ganancias— dijo el irlandés apretando su mano en la zona donde Yoongi había quemado. — Pero conociendo a los Montana era obvio que harían algo como esto...

Yoongi solo oía lo que decía y lo miraba fríamente, no estaba para perder tiempo, quería sus respuestas ya.

— ¿Que harán? — Dijo Yoongi levantando una ceja.

—Aceptamos el trato, sé muy bien que no saldremos vivos de aquí si nos negamos — Dijo el irlandés cruzándose de brazos — Pero acepto, la mitad de nuestras ganancias en londres serán completamente para ustedes.

— Un placer hacer negocios con ustedes — Dijo Yoongi estrechando la mano del irlandés con fuerza, apretando hasta hacerle doler la mano a este — No va a hacer falta advertirles que si me traicionan lo pueden pagar muy caro ¿No?

—No hace falta señor Montana, tenemos muy en claro con quién estamos lidiando — el hombre con el ceño fruncido respondió.

—Perfecto, ya pueden irse — dijo Yoongi soltandole la mano — Mi colega hablará con ustedes en estos días para acordar las ganancias, RM se encarga de eso...

Se despidieron y todos regresaron a sus casas o donde sea que estaban, Yoongi por su parte decidió ir al bar que a esa hora se encontraba cerrado pero necesitaba hablar con Seokjin sobre el muchacho que había puesto a trabajar. Quería hablar con él especialmente por ese chico que no le daba muy buena espina.
Al llegar al bar estaba Seokjin sentado detrás de la barra acomodando algunas botellas, al ser el encargado del bar pasaba la mayoría de su tiempo allí.

—  Seokjin... — Entró Yoongi al bar quitándose su boina y dejándola sobre la barra.

— Buenos días Tony — Saludó Seokjin sorprendido por la visita de éste a tan temprana hora — ¿Que te trae por aquí a esta hora?...

—Queria hablar precisamente contigo...— Dijo Yoongi juntando sus manos apoyando sus codos en la barra — Sobre el nuevo empleado...

— ¿Se viene un sermón o una felicitación? — Seokjin dejó lo que estaba haciendo para sentarse frente a Yoongi.

— No lo consideres ninguno de esos dos, más bien es una precaución...— Yoongi miró al mayor — No me da confianza, lo encontré prestando mucha atención a nuestras discusiones y también me di cuenta que es muy mal mentiroso...

—Sigue te escucho— Dijo Seokjin frunciendo el ceño.

—Sabes cómo soy con este tipo de personas que no me dan confianza, pero... Haré una excepción con Jim. Tal vez, solo es un muchacho curioso y miente por alguna razón en especial, yo me encargaré de averiguarlo pronto. Mientras tanto te pido que no le confies nada, no le digas nada si pregunta y quiero que estés atento. Puede que sea un espía de los irlandeses o algún enemigo.

— Gracias por el aviso Tony, me encargaré de ayudar con el tema, tal vez él pueda darme algún tipo de información— Dijo Seokjin dudando un poco, la verdad le sorprendió lo que Yoongi había dicho, conociendo al muchacho, Jimin ya era hombre muerto. Pero algo vió Yoongi en él para darle otra oportunidad.