La Maldición de la MediaNoche ©

XV

YunHyeon sintió la presencia de sus compañeros, había permanecido solo en aquel lugar, solo escuchando las voces de sus otros amigos en la obscuridad, sin saber a donde dirigirse o pedir ayuda. 

Se levantó del frio pasto y con lentitud caminó, el sonido de sus pasos era música para esa dimensión tenebrosa de su escuela en donde permanecía.

YH- ¿Chicos? - preguntó en voz alta y siguió hasta llegar al segundo patio donde visualizo a el cuarteto. - ¡Oigan! - gritó llamando la atención de los nombrados, los otros se volvieron encontrando a uno de sus tantos compañeros perdidos.

DH- ¡YunHyeon! - exclamó alegre y corrió hacia él con tal de tomarlo en sus brazos sin embargo cuando creyó que lo hacía cruzó la figura fantasmal de su compañero. - ¿Pero que? - susurró al ver las palmas de sus manos, volteó hacia atrás y YunHyeon seguía ahí.

YH- No se donde están los demás - comenzó - Solo los he escuchado un par de veces y de ahí en mas no. 

L- Escuché a Yeon

YH- Están en otro lugar, lo importante aquí esque los encuentren...

TH- ¿Sabes algo? ¿O donde puedan estar? 

YH- En la Torre. Pero primero deben volver al mundo real, esa cosa no sabe que están aquí. 

JK- Vendrá por nosotros ¿verdad? - YunHyeon asintió. 

YH- Ayudenos, ayuden a YoonGi. Está con los demás, en algún lado. 

TH- Eso haremos - fue lo último que le dijeron a YunHyeon antes de desaparecer. 

Abrieron los ojos y se encontraron en la habitación donde habían llegado una vez salieron de la ventilación. Miraron a su alrededor y tal cuarto estaba normal, no había paredes desgastadas ni nada por el estilo, los pasos apresurados de la policía se oían por todos lados.

L- ¿Que fue eso? - preguntó Leo a los demás.

DH- Una visión... Estoy creyendo que ellos están dentro de una también. 

TH- ¿Encerio lo crees? 

DongHyuk asintió.

DH- YunHyeon dijo que todos están en la torre, pero solo los cuerpos.

Cuando terminó de decir dicha conclusión y el lugar se quedó en silencio un extraño gruñido provino de la ventilación por donde habían llegado. Los nervios los invadieron a todos y antes de que vieran ese par de ojos rojos macabros salieron disparados de ese cuarto.

DH- Separanse, aseguranse de que el profesor SuHo y el Director no los vean. - ordenó

L- Todos lleguen a la Torre. 

Leo y DongHyuk corrieron por el pasillo derecho y Tae junto con Kook por el izquierdo. Los dos segundos tuvieron que esconderse de tras de unos arbustos para evitar ser vistos, en sí, la policía estaba buscando mas dentro del edificio.

TH- Vamos - alentó y corrieron hasta llegar a la valla, entraron por la pequeña avertura y de escondieron ahí.

En cambio Leo y DongHyuk tuvieron que meterse en otra habitación, una que estaba en la cocina, tuvieron que bajar unos escalones para estar seguros, pues los oficiales recorrian los pasillos consecutivamente. 

DH- ¿Y ahora qué? - preguntó

L- Sabes, ahora que recuerdo los planos de la escuela mostraban algo raro, algo que conectaba ésta institución con la torre.

DH- ¿De que hablas? ¿Un pasadizo? 

Ambos de miraron unos segundos.

L- Creeme, hasta ahora lo capte, las veces que miramos los planos siempre veía esa línea conectada en ambos lugares, pensé que era la distancia contada, pero no es así.

DH- ¿Cómo estás tan seguro Taek Won?

L- Por algo jamás derrumbaron la torre.

DH- ¿Y donde crees que esté ese pasadizo?

Leo despegó la mirada de DongHyuk y estiró su brazo apuntando a la pared. El contrario miró al lugar señalado y se dio cuenta que estaba tapizada dicha pared, y claramente se observaba el molde de la puerta. 

Ambos arrancaron el papel tapizado, y quitando una ligera capa de cemento seco pudieron visualizar la puerta de madera. Leo la empujó y ésta cayó de golpe al suelo, rápidamente sacaron las linternas y alumbraron el corredor, era algo grande y a lo lejos solo había obscuridad. 

L- Vamos - alentó - Tenemos que darnos prisa.
DongHyuk asintió y ambos se echaron a correr con todas sus fuerzas, por el fuerte golpe sabían que la policía pronto los iba a encontrar. 

Por otro lado TaeHyung y JungKook habían llegado hasta la torre, se miraron una vez estuvieron frente a la puerta y tomando el picaporte la abrieron.
Iluminaron su camino con sus linternas y apreciaron el entorno una vez ingresaron a la torre. El suelo era de madera, y a cada paso rechinaba. 

TH- Huele... A algo podrido ¿no crees? 

JK- Fétido - concluyó llevando su mano a su nariz. 

JungKook alumbro unas escaleras que iban en forma de caracol hasta una puerta azul.

JK- Debe ser el único segundo piso. 

TH- ¿Subimos?  - cuestionó dubitativo.

JK- Aquí abajo no hay nada mas que un espacio abierto, arriba no se si sea conveniente.

TH- Vamos - alentó, primero Tae y luego Kook ascendieron por dichas escaleras de madera y como el suelo antes pisado éstas rechinaban por el peso de los muchachos. 

Por suerte nada se derrumbo o se cayó, una vez llegaron al segundo pasillo antes de la puerta Tae esperó a Kook y cuando el segundo pisó en el mismo lugar que el primero un extraño chirrido se hizo oír. 
Ambos iluminaron al mismo tiempo hacia la puerta y YoonGi estaba ahí parado. Mirándolos con una expresión terrorífica, sabían que no era exactamente su compañero, pues tenía una sonrisa de oreja a oreja y los ojos rojos cual carmín. El par de chicos no sabían como reaccionar a tal aparición demoniaca.

TH- ¡Corre Kook! - exclamó empujando al menor, éste hizo caso al instante pero Tae no tuvo la misma suerte pues un tirón lo hizo estremecerse, YoonGi lo había atrapado, forcejeo con todas sus fuerzas mientras gritaba y apenas Kook llegó al primer piso el ser demoniaco aventó a TaeHyung al vacío, fue un grito aterrador el cual dejó salir el estudiante una vez se sintio en el aire, después un fuerte golpe en su espalda que lo hizo perder el aliento por completo.

JK- ¡TaeHyung! - el suelo de madera rechino al momento del golpe y las tablas se rompieron, ambos chicos no pudieron sostenerse de alguna cosa y cayeron a la obscuridad, solo con la imagen de aquellos ojos rojos en su mente. 

DongHyuk y Leo se detuvieron a medio camino, cuando un fuerte estruendo hizo eco por el enorme túnel.

DH- Hay que darnos prisa

L- Si - susurró

Dieron un paso pero un gruñido los alertó, al volverse a unos quince metros aquella criatura estaba mirándolos, se puso a cuatro patas y corrió hacia ellos mientras chillaba de forma aguda.
Los chicos gritaron del susto y corrieron con todas sus fuerzas por lo restante del camino, por suerte al llegar al otro extremo abrieron la puerta de un golpe y la cerraron, sintiendo los golpes que la criatura hacía para poder entrar. 

Una vez alumbraron de nueva cuenta, estaban al parecer dentro de una caverna, un olor fétido inundó sus fosas nasales y arrugaron su expresión facial al inhalar esa incómoda fragancia. 

Cuando aluzaron unas rocas abajo encontraron lo que mas ansiaban, a sus compañeros sumidos en lo que pronto sería un sueño mortal.