Cuando le conté a mi madre que tendría que preparar una habitación para Will se extrañó un poco. Tuve que explicarle la situación y no le pareció mal que tuviera un guardaespaldas, pero le molestó que fuera de mi edad, y sobretodo que fuera él. Por lo menos yo no era la única incómodo aquí.
Estaba sentada en la cama con el ordenador viendo un capítulo de una serie cuando alguien llamó a la puerta.
-Pasa.-dije sin apartar la mirada del ordenador-
Will pasó y se sentó en el borde de la cama.
-¿Qué haces?
Me quité los auriculares.
-Ver una serie. ¿Por? No tienes que controlar todo lo que hago.-él asintió y observó sus manos-
-De verdad que esto tampoco es cómodo para mi. pero si nos intentáramos llevar bien sería más fácil.
No contesté.
-¿A qué hora vas normalmente a bailar?
-¿Vas a hacer un horario sobre todo lo que hago durante el día? Por que a diferencia de Sheldon Cooper yo no controlo a que hora voy al baño.
Se quedó en silencio pero vi como se le escapaba una sonrisa antes de volver a su estado serio.
-No lo preguntaba mi yo guardaespaldas, si no mi yo compañero de baile.-arqueé una ceja-Si, me gustaría ir a bailar para ver si me cogen. No hace falta que bailemos juntos, ni a cinco metro, ni a diez, tan solo en la misma compañía. No creo que te pase nada durante dos horas, además de que voy a estar allí.
-Pues últimamente voy de lunes a jueves de cinco a nueve y los viernes de cuatro a ocho. Por las mañanas salgo a correr con Darcy, puedes venir también si quieres.
-Vale.-sonrió-Gracias por el ofrecimiento.
-No te acostumbres.-sonreí levemente-
Se levantó y fue hasta la puerta. Se detuvo en el marco y se giró.
-Amelia, ¿quieres un consejo?
-No, pero seguro que me lo dirás igualmente.-se rió-
-Deja esa fachada de que me odias. Sé que el enfado de ayer fue algo repentino y ya lo tienes olvidado.
-Will, ¿quieres un consejo?-me miró con curiosidad-Aféitate. Pareces un vagabundo.
Me señaló riéndose y salió de la habitación cerrando la puerta. Minutos después me llamó Kira.
-Oye Amelia, ¿hoy salimos verdad?
-Sip, ¿a qué hora?
-Ocho en tu casa para prepararnos. Luego quedamos con los chicos a las diez.
-¿No será mucho tiempo hasta las diez?
-Es que quiero hacerte trenzas.
-¿Y tardas dos horas en hacerme trenzas?
-No, pero el resto del tiempo es para ropa, joyas y maquillaje.
-Mierda, no nos da tiempo.
-Cierto.
-Ven ya, corre.
-Ya estoy en tu casa. Ábreme.
Me asomé por la ventana de la habitación y la vi esperando con el móvil en la mano. Si que es rápida.
Le abrí y cuando venía por el pasillo se encontró a Will.
-Kira.
-Will.
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El rebelde y la bailarina: A continuación...
Roman pour AdolescentsContinuación de "El Rebelde y la Bailarina". Amelia tiene que estar separada de Kevin durante un tiempo, el cuál les pasará a los dos factura. Mientras ella hace nuevas amistades y desvela antiguos secretos, Kevin lucha por ponerla a salvo para, por...