El Destino Nunca Cambia

Toudo Nanami

Un nuevo día surgía, y tal como cualquier otra mañana en Tokio la alarma de cierta peliazul empezaba a sonar a las 5:30 AM, no era una ninguna novedad para ella el tener que buscar entre la pila de papeles que cubrían la mitad de su cama de dos plazas su teléfono para poder detener esa canción, tampoco era nuevo encontrar una lápiz rojo en su oreja junto con pruebas o trabajos a medio revisar, que a causa del cansancio por jugar videojuegos toda la noche del viernes y casi todo el sábado, la obligó a trabajar todo el domingo con un único descanso llamado dormir.

Bostezando se quitó el lápiz, prendió su parlante para poder escuchar música mientras se dirigía la baño para poder ducharse y repasar su rutina que por meses llevaba como si fuera un ideal religioso. Cuando empezó a sentir el agua en su cuerpo, la peliazul se tomó el lujo de volver a ser Sonoda Umi, hasta que al salir de la ducha decidió verse al espejo mientras se escucha Dancin de fondo.

-¿Quién eres?- dijo viendo su reflejo- Soy Toudo Nanami... ¿Cuántos años tienes? Jajajaja eso no se pregunta, pero tengo 25 años ¿me veo más vieja o más joven?-

-¿Dónde naciste? En Japón... ¿siempre has vivido aquí? No, en realidad me mudé a Estados Unidos cuando tenía cinco años debido a que mis padres murieron en un accidente- asiente- ¿Con quién vives? Vivía con mi tía hasta los 15 años, pero ella también falleció... aunque a esa edad obtuve el dinero que era de mis padres y también heredé el suyo, así que seguí viviendo en América varios años- suspira- ¿Qué haces aquí? Cuando me titulé supe que mi abuelo falleció y soy la única del clan Toudo que sigue con vida, así que soy la heredera absoluta de todos los bienes de la familia, por lo cual, vine a reclamarlos o ese era el plan... ¿pasó algo malo? En realidad no- ríe un poco- resulta que dentro de su testamento el heredero tenía que vivir 10 años en Japón como mínimo ¿puedes creerlo? Es por eso, que mi abogado me recomendó quedarme aquí hasta cumplir con los 5 años que me faltan para heredar todo... ¿entonces en dónde te quedas? Tuve la suerte de que mis padres tenían dentro de sus propiedades un departamento en Tokio, así que ahí estoy viviendo, ¿estás trabajando o no es necesario? Sí, estoy trabajando como docente en UTX, soy profesora de literatura, así que tengo la vida asegurada por ahora... ¿planeas volver a Estados Unidos? No lo sé, depende, si me agrada el sistema japonés y la preparatoria me termina más que gustando, yo creo que me podría quedar-

Una vez finalizada la canción la peliazul empezó a asentir mientras empezaba a secarse el pelo, el hecho de repetir todas las mañanas esas mismas palabras hacía que recordara mejor su nueva identidad y no llegara a confundirse si preguntaban varias veces cosas de ese estilo, la joven cada vez creía que pronto dejaría de ser Sonoda Umi y pasaría a ser solo Toudo Nanami, al final, nadie de su antiguo grupo social la conocía... bueno, solo Erena y Anju por consecuencia, pero ellas eran la excepción, no podía quejarse sobre ese matrimonio, si fue la propia Anju quien la llevó a su actual departamento y si bien se negó al comienzo, estar dos a tres meses encerrada sin poder hacer nada más que poder comer y jugar, logró el primer cambio de su personalidad.

Y mientras empezaba a sonar wow, Nanami empezó a buscar en su refrigerador los restos de la comida que compró ayer para poder desayunar mientras se vestía, después decidió asearse e irse rumbo a UTX, ya que dentro de su contrato, ella ingresaba a las 6 de la mañana a trabajar. Y tal como su rutina lo fijaba en cuanto llegó verificó que la directora aún no llegaba, así que dejó su mochila en la sala de profesores para empezar a revisar algunas pruebas mientras escuchaba música.

Así pasó su primera hora laboral, y como los demás docentes empezaron a llegar decidió ir a la azotea un rato, no es que fuera asocial, pero sus compañeros de trabajo eran mayores o menores que ella por una gran diferencia que se creó para su propia seguridad, por lo cual, siguiendo su protocolo se aisló en la azotea un rato mientras llamaba ah Anju para informar sus planes del día.