Me atreveré a decir que fui yo quien te invocó, quien te hizo volver tras tanto pensarte, al estar siempre tan cerca y lejos a la vez. A diario divisaba aquella luz de tu recamara sabiendo que estabas ahí, recostada con un vacío en el cuerpo del que no reconocías porqué; a diario pronunciaba tu nombre en mi pensamiento, a diario te suplicaba por siquiera verte asomarte para que vieras que estaba ahí, pasando siempre cerca de ti y, al final, ese deseo te hizo venir... Dejó de importarte consecuencia alguna de tu decisión, dejó de importarte cualquier regla o acuerdo quebrantado, tú y yo sabemos que lo que necesitabas esta noche, era estar a mi lado.
Jürgen Rodríguez.
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Versos de Pasión Oscura
RomancePequeños versos, escritos y publicados en el antes mencionado grupo de Facebook: Pasión Oscura. Letras en las que se busca transmitir todo aquel deseo, aquella pasión desmedida que inspiran los recuerdos que laten a diario en la piel y reviven en el...
