Moonlight ~ Hwang Hyunjin Y Tú~ TERMINADA.

Capítulo 23.

Ahora no sabía que responderle a Hyunjin.

- Te esperé.- mentí, pero él no se las creyó.

- Sabes que detallo bien a las personas, cuando mientes te tomas tú tiempo y te suenas los dedos.- Vaya que este chico me conocía de pies a cabeza.

- Bueno, solo le pregunté algo a tú mamá.

-¿Qué le preguntaste? - Sonó con autoridad

- Simplemente lo se JiWon y ya.

- Nunca te rindes, ¿Sabes lo que hiciste?

- ¿Preguntar?- creo que él se empezaba a enojar- Bueno, ella ya sabía que "Haneul" estaba viva.

-¿Ah? No, ella no sabía.

- Sí, lo sabía, ¿Cómo? No sé, de hecho quería saberlo y me di cuenta que tú padre tiene un fetiche raro con mi mejor amiga, tengo que protegerla porque ella lo hizo muchas veces incontables.

- ¿Pensaste en cómo saldrás? ¿Te quedarás esta noche?- Dijo serio, no sabía si su propuesta lo decía en forma buena, o mala.

- ¿Eh? Supongo que espero para irme- bajé la cabeza.

- No.- dijo con autoridad - te quedas hasta mañana, tú te lo buscaste, ni se te ocurra salir.

Yo asentí con la cabeza, de hecho me sentía bien porque había dicho tal cosa. Mientras tanto, que le digo a Jiwon y a mis padres, no traje mi celular. ¿Por qué a estás alturas de la vida no llevo mi celular conmigo? Realmente jamás aprendo.

-¿Me prestas tú teléfono? Necesito llamar, olvidé el mío.- me rasqué la cabeza

- De acuerdo, toma.- me pasó su móvil, yo di las gracias y llamé.

Llamé a Jiwon, traté de no mencionar su nombre por ningún motivo, pero todo fue en vano, mencioné su nombre por lo menos veces. ¿Por qué todo me sale al revés?
Pero cuando mencionaba su nombre, Hyunjin no hacía ningúna expresión, parecía que no le importara.

Pasamos un rato hablando hasta que se hizo de noche, Hyunjin me pasaba comida al escondido y me prestó un hoodie negro que me llegaba hasta los muslos, pero algo me decía que seguía enojado conmigo, por lo que hice, la verdad siempre me busco las cosas, pero le agradecía mucho el hecho de yo poder cruzar con él al menos pocas palabras, yo sacaba tema de conversación de todo, él solo asentía o daba su pequeña opinión al respecto.

- ¿Sigues enojado? Ya pasó más de 5 horas que andas frunciendo el ceño, te saldrán arrugas feas.- Le eché un pequeño regaño.

- De hecho van 7 horas, y ¿Que quieres que haga? Te metiste a mi casa, te escondiste en mí cuarto y no haces si no hablar.- Me ofendió lo último

- Pues perdón por hablar mucho y por meterme a tú casa, solo quiero hacer mejor el ambiente.

- Perdón.- se calló un segundo, su siguiente acto fue coger mis cachetes y besar mis labios, pensé de todo menos que haría esto.

Hyunjin empezó a acostarme poco a poco a su cama, una vez conseguido, pasó su delicada y suave mano por mis muslos. Todo era nuevo para mí, no me esperaba ésta reacción de Hyunjin, las sensaciones que me emitía su contacto de esta manera, era nuevo.

- No puedo contenerme, no debí prestarte mi hoodie negro- Dice entre suspiros y jadeos.

Siguió besando mis labios; pasó sus labios húmedos por mi cuello, sentía cómo mi cuerpo era vulnerable por él.
Su mano fue subiendo un poco más arriba de mi muslo.

- ¿Q~Quieres continuar?- Preguntó Hyunjin, me pareció un gesto muy agradable de él, si no fuera otra persona creo que no me preguntaría nada de lo anterior, por esto decidí no dejarla cagar esta vez. Siempre me mentía otro tipo de pensamientos que controlaban las otras emociones.

- Sí- afirmé muy segura de mi respuesta y de lo que hacía.

Una vez dicho, él quitó la mano de mi muslo, se subió la camisa que traía puesta en ese momento y la tiró a algún lugar de esa azulada habitación. Al quitarse la camisa, exhibió su delgado abdomen y un poco marcado, Hyunjin no era de ir al Gym, pero su cuerpo estaba bien para mi.
Yo me senté arriba de Hyunjin, lo besaba en el cuello y labios, puso sus manos en mis caderas, yo hacía movimientos de arriba hacía abajo, cada movimiento que hacía en sus caderas me permitía sentir su pene, sus manos empezaron a hacer posición de mis caderas, el movia mis caderas a su manera y cómo más le gustaba, yo solo me dejaba llevar por sus manos, una que otra vez soltabamos pequeños jadeos, él en un instante se puso duro, esto permitió que mí zona sintiera un poco más de tacto con su miembro.
El dejó de hacer movimientos con mis caderas, se detuvo para quitarme el Hoodie que llevaba puesto.
Estimó por un momento mi lencería gris, este fué quitando primero mi brasier para que solo me quedara en bragas.

Pero todo esto no podía ser perfecto. Tocaron la puerta, Grandioso.

- Mierda.- Me bajé rápido de Hyunjin, cogí el Hoodie negro de la cama y me lo puse.

-¿Quién?- Gritó Hyunjin para el otro extremo de la puerta.

- Soy mamá.- dice tocando la puerta.

- Un momento- Dice Hyunjin colocándose las prendas que le faltaban, se arregló un poco el cabello y trató de bajar su amigo, pero este no bajaba, así que se acostó en la cama y se arropó, yo me senté en la cama e hice cómo si nada hubiera pasado.- Pasa

- Hola, solo vine a ver como estaban. Ya es un poco tarde y mi marido sigue en la sala viendo el partido de Soccer, no hagan ruido y no hagan cosas sospechosas.

- De acuerdo- respondimos los dos al mismo tiempo.

Ella dijo unas cuantas cosas más y se fué, Hyunjin y yo nos miramos un poco decepcionados y con ganas de reír.

- Mejor nos calmamos- Dice Hyunjin.

- Báñate con agua fría.- reí maldadosa

- No, gracias, con este frío se me baja solo.- dice con gracia e ironía.- Será para otra ocasión- se levanta de la cama para cambiarse la ropa y ponerse pijama

- ¿Dónde dormiré?

-¿Por qué haces preguntas tontas?

- Soy tonta, es natural.

- Al ladito mío, próxima señora Hwang.- al escuchar eso reí mucho.

Hwang Hyunjin, controla tus emociones.