|Capítulo 13|Casi.

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Llegué a mi casa.

Dejé la mochila por ahí y fui a buscar mi laptop.

Suspiré y la conecté a la corriente eléctrica, mi fondo de yo y mi gato me dio la bienvenida. Tecleé con rapidez algo en el buscador y cero resultados.

Proseguí con buscar "soñar con fantasmas, ¿Realidad o mentira?"

—Los fantasmas son espíritus, algunas personas testifican poder verlos. No existen pruebas de que los espíritus son reales, probablemente la causa de verlos sea el estrés, la pérdida reciente de un ser querido o algún trastorno mental. Estos animas se pueden manifestar mediante "visitas", pero algunas personas las desmienten. Por favor, sí siente que padece esto, llame a un médico y consultelo. Algunas víctimas acaban con su vida debido a la presiónleí y dejé mis labios entre abiertos, tenía la necesidad de decir algo más; no podía. Me bloqueaba.

Tomé aire y luego lo solté en un suspiro, me sentí una extraña en mi propia casa.

¿Tanto había pasado en estas eternas semanas?Cumplí años, pronto deberé decidir que estudiar. Últimamente la carrera de abogacía no me satisfacía como pensé que haría.

Cerré la laptop y la dejé en el escritorio. Debía terminar trabajos, tareas, estudiar para la lección oral de historia...

Me sentía a punto de explotar, una bomba a la que le faltaba poco tiempo. Ya la comida no podía calmarme y las apariciones de Espectro sólo lograban estresarme más.

Mi madre iba a verme dentro de unos días, me hubiese gustado ser mayor de edad para ese tiempo.

—Bebé, ¿Quieres comer? —hablé dulcemente a mi gato, trataba de distraerme con algo y sentirme mejor emocionalmente por unos minutos.

Eso apenas empezaba.

***

Mi madre me saludó, correspondí a su saludo mientras la veía arrastrar sus dos maletas. Imagino que el viaje le fue muy agotador.

Mi bebé bonito, apodo de mi gato con mucho pelo y bonito, apareció bajando las escaleras con su andar elegante.

—Iv, ¿Qué es eso? —señaló con su vista el suelo, tenía pisadas embarradas y un papel.

—Oh, eso... Invité a Aaron ayer y como has visto... llovió mucho, entonces vino todo mojado y lo ayudé con ello... —hablé rápido, esperando que no notara que mentía. A medias.

Sí, lo había invitado a casa. Sí llovió ese día, pero no se había humedecido con el bonito cielo llorando. Fue listo y llevó paraguas.

Además, procuró no pisar en el barro. Se lo agradecí internamente.

—¿En la puerta que da al patio trasero?
—arqueó una ceja, parecía no creerme.

—Sí, porque... la valla del patio trasero se rompió y ya sabes que el terreno próximo está desocupado. No te preocupes, ya lo iba a limpiar —sentí una gota de sudor caer por mi nuca.

Mamá asintió lento, creyéndome. Bien, al menos no estorbaría.

Mi principal problema era descubrir porque había malditas pisadas y un papel mojado. Eso se veía tan humedecido que me iba a dar asco tocarlo.

Mamá desapareció mientras subía las escaleras hacia la habitación que antes compartía con mi padre.

Ahora, mi problema comenzaba. ¿Y sí Espectro venía a la madrugada y madre lo sabía?Me trataría de loca o lo que fuera...

Bastante sufrió con mi perdida de memoria como para darle más problemas con un fantasma que no existe.

Claro que existe》 replicó mi consciencia.

Busqué en la cocina los productos de limpieza y me dispuse a limpiar. Ya luego seguiría investigando sobre fantasmas.

Y sobre todo, sobre las cartas "viejas" que recibía. No queda duda que las fechas son de 2016 y estábamos en 2019.

Espectro (Completa | Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora