Juntos Una Vez Más [#1]

22. El 7

Ryan

—Por favor, adelante, alumno Brown— el director me da entrada libre a su oficina— ¿Sucede algo?

Como todo el actor que soy o que puedo porque juro que puedo sentir la mirada de la loca de Alice a un costado del ventanal del despacho. Esto tiene que salir bien a menos de quiera que me ahorquen.

—En las piscinas— señaló las puertas y sueno histérico haciendo que el director se levante de su asiento— ¡Ahí, asco!

—¿Qué? ¿¡Qué pasa, ahí?!

—Los alumnos de la otra preparatoria estaban follando y ahora están vomitando en la piscina— contesto y sueno asqueado— Algunos profesores estaban a punto de echarlos de la instalación. ¿Se imagina el escándalo? ¡Siguen allá vomitando y Johana Black quiere tomar las fotos!

—Mierda— se le escapa de los labios labios furioso. Ni siquiera le importa que esté ahí— Esos alumnos deberían de al menos detenerse en lugares públicos. ¡¿Que es esa grosería?! ¡En mis tiempos se respetaba los lugares publico! ¡O era en la habitación o era en el baño!

El hombre rodea su escritorio molesto y yo solo hago mala cara de lo que acaba de decir. Joder... no me imagino a esa pasa arrugada metiéndole el pito a alguien.

—Ah... ¿Bien?— digo mirándolo asqueado.

—Lo siento, alumno. Es la impotencia que tengo de que los alumnos no respeten nada en estos tiempo ¿Acaso usted ha experimentado eso?— suena desconcertado.

—No... soy virgen— suelto mientras asimilo las mentiras de mis labios—. Muy virgen. No se como hacen el resto de chicos que parecen pensar con la entre pierna.

El director asiente mientras deja salir un suspiro.

—Debe aprender a tener responsabilidad, Señor Brown, en algún momento lo experimentará— me habla como a un estúpido, como si en serio lo de ser virgen fuera cierto.

Claro que estoy preparado y tengo responsabilidad. ¡Tengo un envase de condones en el auto! ¿Quien dijo que no era responsable? Y hasta de sabores para la comodidad.

La puerta del despacho se abre y el director señala la puerta mirándome.

—¿Va a acompañarme, Señor Brown?

¿¡Que?! Eso no lo vi venir, joder.

—¿Acompañarlo?... ¿No conoce el camino hacia las piscinas o... sufre pérdida de memoria?

—Por favor, Señor Brown, exijo respeto— me regaña y bufa— Tiene que venir conmigo para que me diga quiénes son los alumnos que usted vio.

Trago grueso porque de acuerdo... no puedo perder la calma ahorita. Hago lo que dice saliendo con el del despacho caminando en dirección a las piscinas.

—No es tan difícil. Cuando vea a alguien vomitando el alma en la piscina, sabrá de quien le hablo ¿No?— intento zafarme de esta.

Me doy vuelta para irme pero el director me toma del cuello de la camiseta haciendo que permanezca a su lado.

—Es una orden de su director. Además es su testimonio— dice con la voz firme— ¿Acaso está bromeando, Señor Brown?

Me alarmo porque lo que menos necesitamos es que vuelva a su oficina y que se joda todo el plan.

—¿Crees que bromearía con eso? ¡Vi cómo vomitaba la hamburguesa de la cafetería!— intento sonar creíble— Por cierto tenía doble cebolla.

—Por favor, Señor Brown omita los detalles— el director me mira con cara asqueada.