Piénsalo, Dos Veces (II)

Capítulo 47 - Flashback

JOHN's pov.

—¿Crees que no es difícil para mí? —preguntó Brian.

Estábamos en una de esas pláticas terapéuticas que hace un buen tiempo no teníamos. Ringo y George se habían ido, un poco molestos o tristes, no sabría explicarlo.

—¿Por qué tendría que ser difícil para ti? Solo es cuestión de que te encargues de los ingresos y egresos de la disquera y de la banda, que promuevas a los Beatles y que consigas giras.

—¿Se te hace poco?

—Pensándolo bien... deberías tener un asistente.

—John... Ya la tengo... Se llama Kelly... ¿La conoces?

—¡Ah! ¿Es ella? ¿Ella es tu asistente?... Siempre pensé que era tu amante o algo así.

—¿Una amante que siempre la ves anotando cosas y pasándome llamadas?

—Yo no sé qué suceda en las noches —respondí.

—Soy gay John.

Troné los dedos señalándolo.

—Lo había olvidado.

—El punto es John... No solamente me debo encargar de ustedes como si fueran un negocio.

—Eso es lo que somos —dije cabizbajo.

—¡No John! —se levantó de donde estaba sentado, creo que lo estoy desesperando— ¡No son un negocio! —lo miré con cara de "¿Enserio?" —, bueno, no son SÓLO un negocio.

—¿Qué más somos? ¿Símbolos sexuales?

—Son personas. Así que olvídate ahora que eres John Lennon el Beatle... Y cuéntame ¿Qué está ocurriendo entre tú y Paul?

Volvió a tomar su lugar para quedar enfrente de mí.

—Tú eres el que siempre me recuerda que la figura que soy para la sociedad.

—Porque no quiero que pierdas los estribos... Supongo que los has perdido, o estás a punto de perderlos, así que empecemos de nuevo.

—¿De nuevo? —reí— ¿Cómo?

—Empecemos por aquel chico de, no sé, dieciséis, diecisiete años... quizás dieciocho... ¿Quién eras?

Agarré mucho aire. Esto me daba algo de flojera.

—Un soñador.

—¿Todavía lo eres?

Solté una pequeña risa burlándome de mí mismo.

—No tengo duda. 

—¿Cómo eras con Paul?

—¡Viejo! ¡Paul era mi mejor amigo!

—¿Todavía lo es?

Tomé unos segundos para pensar mi respuesta mientras me quedé congelado en lo pre-verbal.

—No lo sé... a veces... depende del día.

—¿Qué pasó? ¿Qué cambió su relación? —no contesté—... Hasta las preguntas son tontas. Es obvio... Alanna.

—No lo comprenderías... Eres gay.

Comenzó a reír.

—¿Y crees que no me he enamorado?

—Es genial, ella es única. Supongo que así son todas, pero ella es mi única.

—Tu única ¿Qué?