One Shots part 2

Chilling adventures of sabrina ➡️Nick Scratch

Con Sabrina teníamos mucho en común, éramos un par de brujas que vivían en el mundo de los morrales, sentían que eran más mortales  que brujas y para mi eso estaba bien, pero para mi familia no.

Mi único apoyo en el mundo de  las brujas era Sabrina, no conocía a nadie más porque no era mi necesidad conocerlos, pero para mi familia si.

Nunca tuve la misma valentía de Sabrina, nunca luche por lo quería, era de esas que solo seguían las órdenes. Papá y mamá decidieron que era hora de dejar de compartir con los humanos y me alejaron de todos ellos, incluso de mis amigos que quería tanto.

—¿Estas bien?— pregunta Sabrina en la puerta, estoy recostada mentalizando en que en unos minutos tendré que ir a una escuela repleto de brujos.

—Si— le doy la mejor de mi sonrisa—Siempre lo e estado, Marie es siempre positiva.

—No tienes por qué ser así, no trates de ocultar lo que sientas— ella acaricia mi brazo.

—Sab, en serio — sonrió—No te preocupes, me acostumbrare, soy buena haciendo esas cosas. Quiero que te despidas de James, Caroline, Chris y Amanda por mi, no tengo en valor suficiente.

—Lo haré, no dudes de nuestra amistad— me sonríe—Siempre estaré para ti.

Por eso adoraba a Sabrina, ella me mostraba su amistad en algo humano en vez de otra cosa.

—Marie—aparece mi madre en la puerta— Es hora.

—Si— asiento—Llámame siempre Sabrina.

—No dejes que las produnce te intimiden — dice Sabrina.

—Claro que no—sonrió, tomó mi maleta y bajo a la primera planta.

Me despido de mi padre y mis hermanos para luego irme , camino un poco hasta que finalmente llego, por afuera el lugar se ve escalofriante.

La puerta se abre y entró, lo primero que veo es una estatua del diablo.

—Miren  que tenemos aquí — habla una de la las prudence, la que pareciera la más importante—No sabía que los humanos venían aquí.

—Lastima que estoy aquí — ladeó la cabeza—Mala suerte la mía estar con ustedes.

—No sabes con quienes te estás metiendo — habla la de pelo rojizo.

—La cosa aquí es que ustedes no saben con quién se están metiendo, no conocen mi lado bruja —me acerco amenazante —Así que yo si fuera ustedes dormiría con Un ojos abierto. Fue un gusto.

Me alejo de ella y comienzo a ver el horario.

—Veo que estás perdida — dice una voz, bajo el papel y veo a un chico.

—Si, un poco— sonrió—Soy Marie Flurrer.

—Soy Nick Scratch, un gusto — me sonríe, tiene esa típica sonrisa de ensueño —Se escucha mucho de ti por aquí, la bruja rebelde.

—Vaya, no sabía que era famosa— hablo—También e escuchado de ti, el chico rompecorazones de aquí. Si me permites tengo que irme.

(...)

Otra vez tuve que irme del cuarto, lo compartía con las simpáticas de las produnce, como están medias locas hacen rituales extraños así que mejor me fui para no meterme en problemas.

Camino hacia su cuarto, cuando llegó golpeó la puerta.

—¿De nuevo?— pregunta.

—Si—asiento, me deja pasar y me recuesto en su cama.

—No está nada mal que vengas, pero dile que dejen de hacer tonterías— se encuesta y me abraza.

—Lo se Nick, pero pareciera que fueran sordas — me volteo y quedamos frente a frente—¿Te dicho lo mucho que te amo?.

—Quien diría que tanto rechazarme al final dijeras que si — sonríe.

—Hiciste cosas increíbles por mi, y por fin dejaste esa faceta de rompe corazones — digo mirándolo.

—Te amo Marie— dice y le doy un corto beso.

—Lo se Nick, lo sé — digo para enseguida cerrar los ojos.