Prólogo

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Mariana:

Estoy corriendo por mi vida, ni siquiera estoy segura cuanto tiempo llevo corriendo pero el ardor en mis piernas me confirma que estoy por rendirme, él me persigue, no me dejará tranquila hasta que obtenga lo que quiere, soy más ágil que él y logro escabullirme por un callejón haciendo que me pierda de vista aunque no tardará en encontrarme, debo pensar algo, una manera de huir de él y que nunca me vuelva a encontrar; no entiendo por qué me pasa esto yo solo quería divertirme un poco con mis amigos, hace unas horas estaba en la fiesta de cumpleaños de Cami bebiendo un poco con mis amigos, solo salí un momento a tomar aire y ahora me encuentro viviendo una pesadilla, no sé porque me persigue o quién es solo sé que me tenía vigilada hace días, con razón no paraba de ver un auto estacionado al frente de mi casa y sentir que alguien me perseguía cada vez que salía.

Me encontró, estoy intentando huir pero mis piernas ya no dan más y caigo al suelo, me golpee la cabeza con el pavimento y de inmediato sentí un fuerte mareo, me atrapó no tengo salida, se sube encima de mí y logro reconocer el rostro de Sebastián, ¿Por qué quiere hacerme daño?, No logro formular palabra alguna y el dolor de cabeza cada vez se intensifica más, el pone un pañuelo en mi cara y siento como empiezo a dormirme, es todo, estoy inconsciente.

¿cuál es la realidad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora