➹VICTIM

❝ O6

― Vamos Nina, levántate.― Dijo bruscamente Seungmin, llevaba por lo menos, diez minutos intentando levantar a la chica.

― Espera, no la llames más. Sé que hacer.― Dijo Hyunjin, entrando a la habitación. Dicho esto, Seugmin se apartó levemente, Hyunjin agarró a la morena por los brazos, inclinandola y finalmente, tirandola al frío suelo.

― ¿Pero que haces?― Dijo, mientras se frotaba la cara, con las manos. Y se sentaba en el suelo.

― Vamos Nina, hoy puede ser que te ganes un poco de dinero. Eso sí, date prisa.― Animó Hyunjin, dando palmadas.

― ¿A quien vamos a matar?― Preguntó, con la curiosidad invadiendo su interior, mientras se levantaba.― Hay un problema, ¿Cómo voy a salir, si no tengo ropa?―

― Sí, la llevas puesta ahora.― Bromeó Hyunjin.

― Mira, Hyunjin, no me jodas. Llevo con esto unos 3 días, está sucio. No he podido ni darme una ducha. ¡Me siento asquerosa!― Gritó, poniéndose de pié. Se acercó a Hyunjin y fue empujando el hombro del pelinegro, con el dedo índice, a medida que pronunciaba la frase.

― No te alteres, te dejaré algo mío. Puedes ducharte en la habitación de Woojin.― Habló Seungmin, tranquilizando a la chica. Sujetándola por los hombros.

― Bien.― Se giró, zafándose del agarre de Seungmin y yendo hacia la habitación del mayor.

― Desgraciada.― Murmuró Hyunjin. Seungmin le dio un golpe en la parte trasera de la cabeza. Causando que él se quejara.― ¡Ay! ¿Por qué no puedo matarla ya?― Dijo, cruzándose de brazos como un niño pequeño.

― Por qué nos sirve de mucho, es una interesada solo quiere dinero. Además, es cruel, y una cara bonita nunca viene mal.― Susurró Seungmin. Casi inaudible.

― ¿Y yo qué? Mi cara es bonita, conmigo ya teníamos suficiente.― Se volvió a quejar.

― Ya lo verás, va a servirnos de mucho.― Finalizó Seungmin.

― Esta mierda es gigante, pero bueno, ¿Nos vamos ya?― Dijo impaciente. Quería salir, y sentir la luz del sol calentar su piel.

― No tan rápido, hay que ponerte en situación primero. Vamos a matar a alguien, que muy inocente no es. Como dijiste tu hace unos días, no matarías a alguien inocente. Así que supongo que, en este caso, no hay ningún tipo de problema para ti.― Paró Woojin a la chica. Cogiendola de los hombros.

― ¿Quieres vengarte de alguien?― Preguntó Seungmin a Woojin, él había planeado absolutamente todo. Los demás solo ayudarían con lo más sucio.

― Sí. Ahora, vosotros tres, me acompañaréis.― Explicó Woojin. Los otros dos, simplemente asintieron. La chica se encogió de hombros, quería conseguir algo de dinero.

― Seungmin, trae las inyecciones. Hyunjin, trae las botellas de plástico.― Ordenó Woojin. Los demás obedecieron.

― Vamos, el trayecto es largo. Empezaremos con esto, por la noche. Que bien lo vamos a pasar.― Sonrió con malicia.

― ¿A por quien iremos?― Preguntó la chica, mientras abrochaba el cinturón de seguridad.

― A por un viejo amigo, estará encantado de verme.― Dijo, arrancando el motor.

― ¿Quien coño es "victim"?― Dijo Chan alterado.

― ¿De que hablas?― Curioseó Jisung y agarró la carta de las manos de Chan, y se recostó en la silla. Alejándose un poco de él.― No quiero que pienses que mi intención es engañarte, sé como piensas, sé cada movimiento que haces y cada movimiento que harás. Han, Bang y Lee, jaque mate.― Leyó Jisung en voz alta.

― ¿Que es esto?― Preguntó Felix, quien todavía ni había mediado palabra.

― ¿Como sabe nuestros apellidos?― Ya se empezaba a alterar.

― Eh tranquilízate, será algún tipo de broma. No te alteres, Chan.―

― ¡¿Como quieres que me tranquilice, Jisung!? ¡¿Nunca has jugado al ajedrez?!― Gritó Chan, Jisung y Felix no acababan de comprender, por qué tanto ajetreo por parte de su compañero.

― Sí, he jugado, Chan.― Habló Jisung, con voz tranquila.

― ¿No sabes como acaba?― Jisung asintió obvio.― Jaque mate, el rey está muerto. Así acaba la partida.― Sus ojos transmitían estrés y miedo.

― Chan, cálmate no lo dirá literalmente. Puede que sea un tipo de amenaza, pero no creo que nos mate.― Felix intervino, acomodándose en su asiento.

― Quien sabe, Felix, es posible.― Estaba comenzando a ponerse bastante paranoico, y eso cansaba levemente a Jisung.

― Dame eso.― Jisung le arrebató el trozo de papel de las pálidas manos de Chan.

Jisung se dirigió a la basura, mientras rompía la carta con sus manos. Finalmente la tiró, como si de nada importante se tratara. Chan, bastante alterado, se levantó de la silla y corrió hacia la basura. Empezó a rebuscar todos los trozos de papel que habían ahí dentro. Felix hizo una mueca de asco y Jisung se quedó confundido.

― Eh, ¿Que haces? Saca las manos de ahí.― Dijo, yendo hacia él y posando su mano en la espalda del pálido.

― ¿No ves que puede ser importante?― Chan acabó de agarrar los pequeños trozos, se acercó a su mesa y los colocó encima. Empezó a juntar las posibles partes, se fijó en que habían algunos del revés. Se dio cuenta de que había una palabra que no había visto. Más bien que una palabra, era un apellido; "Stravinsky"

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