Capítulo 15

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SEGUNDA PARTE CHICOS ESPERO LES GUSTE


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Diciembre, dulce y gélido diciembre.
Luces, música y alegría.  Una celebración inminente, bueno, dos.

Suigetsu  respiró hondo el aire frío mientras caminaba por la calle atestada de personas frenéticas que corrían de un lugar a otro en búsqueda del mejor regalo y ropa; juguetes, árboles y luces... Un agradable caos que lo llenó de nostalgia. A él siempre le habían gustado las celebraciones navideñas porque su madre solía contarle historias mientras lo apretaba contra su pecho; ella también le obsequiaba un par de aguantes y caramelos. Cuando ella murió, la tradición no lo hizo con ella. Entonces eran Suigetsu  y Setsuna los que se acurrucaban juntos en el fuego e intercambiaban sus presentes miserables mientras alguna de las mujeres contaba alguna historia para ellos.

A pesar del dolor y la constante amargura, aún cuando había que trabajar en la víspera de Nochebuena, Suigetsu  los consideraba buenos tiempos. Porque él nunca estuvo solo.
Ahora, sin embargo.....

Suigetsu se detuvo al darse cuenta de a dónde lo llevaron sus pasos: la puerta de Sasuke . «¿Qué mierda hago aquí? Él debe estar follando con la pelirrosa estúpida, como siempre». Oh, Suigetsu  no quería sonar como una novia celosa, pero realmente odiaba a Sakura Haruno. No solo porque era pelirrosa y él no las soportaba, sino porque era desesperante.

Todo lo que sabía hacer era gritar y exigir cosas que ni siquiera merecía y reclamarle a Sasuke por la muerte de su bebé. «Si me hubieras hecho caso, yo no lo habría perdido», solía decirle. Y aunque Sasuke no cambiaba su expresión estoica, Suigetsu  podía ver la tristeza en sus ojos. Era la misma que lo atravesaba al recordar a su pequeño Didier.
Suigetsu  no sabía cómo, pero tenía la certeza de que hubiera sido un niño.

Tomando una bocanada de aire, Suigetsu  levantó la mano para llamar a la puerta cuando la voz de Sasuke salió como un grito exasperado:

—¡No iremos a ningún centro comercial de mierda, niña, y ya deja de gritar!

—¡Por favor! ¡Usted no puede ser tan aburrido!

Bueno, mierda, ¿quién estaba gritándole al Colmillo del diablo sin temer por su vida? Esa voz no era la de Hinata, la adolescente que habían salvado de Sasori y a la que Sasuke  decidió conservar como su invitada. La chica era tímida y silenciosa, tan dulce que incluso derretía su corazón. Ella jamás gritaba. Sakura en cambio... No, pero esa tampoco era su voz. Era más nasal y aguda y tenía un acento extraño que... parecía más bien oriental.
Había algo en ella que se le hacía conocido.

—¡No!

—¡Por favor!

—¡No!

—¡Hinata, dile a tu Señor-Culo-Sexi que no puede ser tan aburrido!

Silencio... Alguien murmuró algo inentendible y Sasuke  continuó vociferando como poseído por el demonio.

Rendido, confundido e intrigado, Suigetsu  llamó a la puerta. Un minuto después, el rostro furioso de Sasuke  lo recibió.

—Hola, papi, ¿tienes una orgía y no me invitaste?

Él rodó los ojos, bufando. Suigetsu  rio entre dientes.

—No estoy de humor.

—Oh, pop, y yo que venía por esa mamada que te debo.

Sasuke  gimoteó por lo bajo, casi como un niñito. Suigetsu  pensó que era realmente extraño y un poco perturbador.

—Tengo problemas aquí, Minino, y mi cabeza va a explotar. No lo empeores.

—Bueno, ¿y qué pasa? Hasta aquí se oyen los gritos.

Él se masajeó las sienes.

—¿Recuerdas a la niña?

—Si te refieres a Hinata, sí. ¿Cuándo coño vas a llamarla por su nombre? No es un perro, ¿sabes? Y hasta los perros...

—Ya, cierra la boca. Ella tiene una nueva mejor amiga y es un dolor de culo.

—¿Y...?

—Me está volviendo loco. Quiero matarla, he imaginado un montón de escenarios con ella, pero si lo hago Obito me tendrá por las bolas. Ya he pasado por eso, no es agradable.

Suigetsu  alzó ambas cejas.

—Ni siquiera quiero imaginarlo.

—No lo hagas.

Suigetsu  resopló, fingiendo molestia.

—Y bueno, ¿me invitas a pasar o dejo que mi hermoso culo se congele aquí?

Haciéndose a un lado, Sasuke  extendió la mano hacia el interior.

—Bienvenido al inferno, Minino, estoy seguro de que va a gustarte.

—Oh, ¿sí? ¿Por qué?

—Encontré a alguien incluso peor y más insoportable que tú.

Suigetsu  silbó, quitándose la chaqueta.

—Eso quiero verlo.

Sasuke  le dio una sonrisa sucia y maliciosa, después exclamó:

—¡Niña, ven acá, alguien quiere verte... Oh, y trae a tu amiga la chillona!

Dos minutos después, Hinata apareció frente a ellos con sus grandes ojos perla, como de hada, y su habitual sonrisa tímida. Eso no fue lo que capturó toda la atención de Suigetsu , sin embargo, sino la bajita y delgada adolescente asiática junto a ella.

Esa mirada... Él reconocería esa mirada donde fuera. Aún más, su cabello largo  un poco ondulado castaño  cayéndole sobre los hombros y extendiéndose hacia su estrecha cintura. «Tú», el pensamiento golpeó desde lo más profundo. Los dos mil mejor gastados en toda su vida. Ahora él podía darse por servido: había valido la pena.

Ella le dio una sonrisa pequeña y vacilante antes de hacer una ligera inclinación hacia él. Una reverencia.

—Buenos días, señor —dijo.
Y Suigetsu  supo que no se equivocaba, era ella, la conejita del club de sexo.

—Buenos... buenos días.

Tenten  tragó duro al oír nuevamente la voz del hombre, el fuerte acento italiano, que le había salvo del infierno en el que vivió desde que era una niña. Ella no lo olvidó en todo este tiempo.

Él no solo había alejado al hombre que trataba de violarla y del que nadie la defendió, sino que le dio el dinero para pagar su deuda. Siempre estaría agradecida.

Por un instante, Tenten se quedó sin aliento al verse reflejada en sus medianos ojos. Eran de un morado intenso y vibrante, que le recordaba al de unas uvas, rodeados de un borde de un tono más oscuro que resaltaba sus irises. Fantásticos. Encantadores. Y el infierno estaba en ellos.
Tragando duro, Tenten alargó la mano hacia él.

—Tenten Ama —dijo.
Él le regaló media sonrisa reconocedora mientras la estrechaba.

—Suigetsu  Hozuki, es un placer... Ten.

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NOTAS FINALES:

Holaaaa chicos espero que estén bien aquí con el primer capítulo de la segunda parte ,como se dieron cuenta aparecieron dos personajes que son Hinata y la esperada Tenten .

Que emoción nos acercamos a lo último escrito por Lorena la escritora de esta historia así que ya saben al terminar solo queda esperar los siguientes capítulos.

No siendo más me despido nos leemos en otra ocasión y espero les guste el capítulo.

Besos 😙😙😙😙

BESTIA  (Adaptación) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora