WonHyuk' !¡
____________________--MinHyuk, ¿asististe a la escuela primaria?
--Claro, señor Shin.
--¿Y por qué las divisiones están mal? ¿Qué hacías en las clases?
--Lo que hago en las suyas.-- Rió
--Nada... Vas muy atrasado en Matemáticas, se me ocurre ayudarte pero no aquí. Te ofrezco clases privadas gratuitas, en verdad quiero ayudarte.
--Lo que quiero estudiar no lleva nada de ciencias exactas.
--Pero las matemáticas están en cada minuto de tu vida. Piénsalo, puedes irte.
Ese día en clase del perfecto profesor Shin no había mucho que hacer. El profesor debía evaluar proyectos y exámenes y no tenía tiempo para una clase completa; Entonces, colocó operaciones básicas en la pizarra y dejó que sus alumnos respondieran mientras trabajaba.
MinHyuk, su alumno problema resultó ser muy malo en Matemáticas. Cuando revisó sus ejercicios, todo estaba bien hasta que revisó las divisiones y las ecuaciones básicas.
Sus ejercicios eran siempre así y había estado pensando en ayudarle. Sus horarios escolares estaban llenos y se le ocurrió asistir a su hogar para darle clases más tranquilamente y ese día al final de su clase, detuvo al chico y le dio su oferta.Al final del día, el chico le persiguió hasta el estacionamiento y cuando estaba por subir a su auto, este le detuvo y le dio una respuesta positiva.
--Acepto sus clases, profesor.
--¿De verdad? Dame tu dirección y los días que quieras que vaya.
El chico arrancó una hoja de su libreta y tomó un bolígrafo que estaba en la bolsita oculta del saco de profesor. Anotó su dirección en el papel y le entregó todo de nuevo al mayor.
--Puede visitarme Lunes, Miércoles y Viernes a las cuatro de la tarde. Los Martes y Jueves tengo entrenamiento vocal.
El chico habló tan rápido que el profesor sólo asintió al final.
--Hasta mañana, Lee.
Dijo con formalidad y el chico se despidió con su mano yendo corriendo de vuelta con sus amigos los cuales comenzaron a preguntarle mil cosas.
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.--MinHyuk, cuando venga tu profesor sé educado, él lo está siendo.
--Sí, mamá. Cuídate.
La señora Lee se despidió con un beso en la mejilla de su hijo y se fue con su lindo bolso a la comida que tenía con sus amigas. MinHyuk subió a su habitación y comenzó a cambiarse de ropa y en sí, a ponerse lindo.
El profesor Shin le atraía desde que ingresó y es que a cualquiera. Era el profesor más guapo de toda la facultad. Era alto, pálido y de buen cuerpo pues era joven. Daba bien sus clases y era un profesor muy permisivo, daba mucho amor a sus alumnos y les ayudaba en lo que podía, esta vez se lució con MinHyuk.
Sus amigos estaban celosos, cualquiera aprovecharía la oportunidad para insinuarse y la excepción no era MinHyuk. A pesar de sólo tener dieciséis, no le importaba estar con su profesor de veinticinco.