CAPITULO 51

2.7K 147 4
                                    

Narra Alba:
-¿Qué haces aquí?- no me esperaba su visita tan repentina y la verdad, no estaba muy bien en ese momento

-No me despedí

-¿Para eso has venido?- mi voz sonaba rota y mis ojos estaban rojísimos

-No, creo que tenemos que hablar

-Ahora no puedo, estoy ocupada- no tenía ganas de hablar. Obviamente hablaríamos pero ahora no quería

-Por favor, te debo una explicación de lo de Mikel- dio un paso hacia mí y yo lo retrocedí

-No me debes nada, no me importa si sales con Mikel, al fin y al cabo, tu y yo no estamos juntas- como siguiésemos hablando me derrumbaría allí en medio

-No estoy saliendo con Mikel, bueno si pero no

-Natalia ¿Te puedes ir?- señalé la puerta

-No hasta que me escuches

-¡No quiero escucharte!- grité y se me escaparon algunas lágrimas, y menos mal que la canción había acabado porque daba un ambiente más triste todavía- ¡Vete con él y déjame tranquila!

-¡Es que no es lo que tú crees!- ambas ya gritábamos

-¡¿No?!¿¡Y entonces el beso que os disteis antes porque era!?- su cara se puso seria de inmediato y no decía nada

-¿Lo viste?- preguntó en un hilo de voz temblando

-Si y ojalá no haberlo visto- respondí seca derramando varias lágrimas

-Te juro que no siento nada por Mikel, además, que dos personas se besen no significa que estén juntos, míranos a nosotras, nos besamos y no somos nada- eso me tocó el corazón, me acababa de decir que entre nosotras no había nada, es decir, que yo era un solo juguete para ella. Ya reventé y empezé a llorar descontroladamente

-Natalia vete de aquí

-Ay no Alba, no lo decía en ese sentido- se acercó otra vez a mí pero yo me volví a alejar. Se le estaba quebrantando la voz pero a mí ni aunque llorase me funcionaría sus disculpas

-Vete Natalia- señale la puerta

-Escúchame

-No te quiero escuchar, no necesito que me expliques nada porque ya me ha quedado muy claro. No puedo creer que digas que entre nosotras no hay nada porque yo me he mudado a Madrid especialmente por ti, porque no se cómo de odiarte he pasado a quererte y no poder estar ni un solo segundo sin tí habiendo estado a miles de kilómetros. Que estaba hasta las trancas de Joan y ahora lo estoy por tí y voy y me entero de que estás con Mikel. No entiendo entonces ¿Es que no soy nada para tí?¿Tan solo soy un puto juguete? Es por eso que no querías que nadie del instituto supiese de lo nuestro, porque estás con Mikel y no querías que él se enterase de que a la vez que sales con él, te lías con otra a la que ni siquiera le has dicho que tenías novio. Y no puedo entender cómo me puedes decir que no hay nada entre nosotras cuando tú misma fuiste la que empezó con esto, puede que no haya nada oficializado pero está claro que algo había o por lo menos eso creía

-No eres un juguete, yo te quiero

-Tú quieres a Mikel

-A él no lo quiero, necesito que me escuches, Alba

-Vete de aquí- no podía verla más, necesitaba que se fuese y me dejase sola

-No me voy a ir

-¡Qué te vayas!- grité

-Si es lo que quieres, pero quiero que sepas que nada de esto es lo que parece, yo te quiero

-Lo vi con mis propios ojos, vete Natalia- exigí

No dijo nada más y salió de mi cuarto con los ojos vidriosos dejando escapar alguna lágrima.

Me desplomé en el suelo y lloré tanto que me quedé sin lágrimas. Ni siquiera almorcé porque se me fue el apetito y lo único que hice en todo el día fue llorar y plasmar mis sentimientos en un dibujo. Ni la tarea que mandaron tuve ganas de hacer, total, era para última hora así que la haría en algún intercambio. La verdad, fue uno de los peores días de mi vida.

Only youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora