Una mexicana viviendo con los matsunos (tu x ____matsu)

Mudanza y Conociendo a Osomatsu Cap11

Al terminar de hablar con Karamatsu, me fui al puesto de Chibita puede que él tenga información del último que busco, de echo tal vez me diga un poco de los demás, baje por el puente y trote hacia el puesto encontrándome con Chibita y Iyami.

Max-¡Oni-Chan!, quiero hablar contigo, y con Iyami si me puede responder-.
Los dos voltean confusos, me siento en la banca y les respondo.
Max-escuchen, ya hablé con cinco de los matsunos pero me falta uno...¿saben donde puedo encontrarlo?, me gustaría hablar con él-.
Chibita hace más oden y Iyami se quedó pensativo para luego decirme.
Iyami-Creó poder ayudarte, ¿cuáles matsunos conoces-zansu?
Me dice con un acento bastante raro, le menciono los nombres mientras cuento con los dedos.
Max-bueno, conocí a Todomatsu,... a Jyushimatsu,... Ichimatsu,... Choromatsu...y acabó de conocer a Karamatsu-.
Le digo mientras Chibita me pone un plato de Oden.
Chibita-come, necesitas proteína hermanita, ¿no has comido esta tarde verdad?-.
Me dice con los brazos cruzados y le respondo apenada.
Max-...solo un helado...-.

Me golpea la cabeza con su cucharón y me dice.
Chibita-¡Hay niña, tienes que comer bien!, ¡anda come o ya no habrá más oden!-.
Agarro los palillos y le digo.
Max-si mamá...-.
Agradesco la comida y como del oden de Chibita. Y espero una respuesta de Iyami...
Iyami-mmm...¿cual te falta conocer?...mmm...¡ah ya recordé!, estas buscando a Osomatsu-.
Max-Osomatsu eh...bueno y ¿donde lo puedo encontrar Iyami?-.
Le digo mientras como de mi oden.
Iyami-probablemente lo puedas encontrar en el pachinko...siempre pierde ahí-zansu-.
Termino de comer mi oden y volteo confundida hacia el.

Max-pa...¿pachinko?, no se donde es eso, ¿eso se come?-.
Chibita suelta una pequeña risa y Iyami hace lo mismo, me enfade por que no me decían que era, ya que lo pienso podría usar esto como tema de conversación con osomatsu.
Max-...bueno Iyami ¿podrías llevarme al pachinko?, intentaré buscarlo por mi cuenta-.
Iyami pareció pensarlo, ¿acaso es un interesado?.
Iyami-mis servicios cuestan-zansu-.
Vaya por Dios, este tipo se aprovecha de mi nobleza, claro si queda un poco de ella.

Chibita-¡Iyami, solo llévala ahí maldita sea!-.
Le dice mientras le lanza un poco de ese caldo de oden.
Max-Oni-Chan tranquilo no desperdicies el caldo y Iyami qué tal si te compro oden y me llevas ¿siiiii~?-.
Le digo mientras junto mis manos como súplica y hago ojos de cachorro.
Iyami-...bien te llevaré niña...-.
Dice con un pequeño sonrojo en las mejillas, feliz lo abrazo.
Max-¡Gracias Iyami, eres el mejor!-.
Le digo mientras lo jalo del brazo.
Max-¡bien vamos guíame, guiame!-.
Y caminamos por un rato atravesando un parque hasta llegar al "pachinko".

Max-¡bueno, muchas gracias Iyami, dile a Chibita que te dé el oden que yo se lo pago!-.
Le digo con una sonrisa y me despido de él, bien ahora buscar a Osomatsu, según Iyami el estaría aquí pero no lo veo por aquí afuera, quiere decir que el está dentro, entro y veo un montón de máquinas de monedas, me recuerda cuando mi mamá me deba dinero para ir por coca cola, y el cambio lo gastaba en las maquinitas de monedas, siempre llegaba a casa con el doble de lo que me sobró...que tiempos.

???-¿queee?, ¿acabo de perder? ¡No puede ser, esta máquina está dañada!-.
Se escuchó a un tipo molesto golpeando la máquina, ¿podría ser que sea Osomatsu?, me acerco para averiguar y...¡es el! Igualito a los otros cinco, solo que este va con una sudadera roja, lo miro con una sonrisa, por fin lo encontré el último matsuno, él voltea a verme un rato y camina hacia mi, ¿¡que hago ahora!?, se supone que yo debería acercarme a él pero él está viniendo hacia aquí.
Osomatsu-¡Karamatsu hermano! ¿podrías acompañarme un segundo?, tal vez me traigas suerte-.

¿Karamatsu?, ¡cierto! estamos vestidos igual, Osomatsu me jalo el brazo y fuimos a otra máquina, ¿no noto que soy más pequeño que Karamatsu y que mi piel es diferente?, debe estar desesperado por ganar.
Osomatsu-¡bien suerte, no me falles!-.
Dice besando la moneda y la mete a la máquina, jala la palanca y...creo que perdió pues no soltó ni una moneda.
Osomatsu-¿queee? ¡No otra vez!-.
Dice para luego sacar otra moneda, pero esta se le cae y se va rodando bajo la máquina, que mala suerte.