Capítulo 13 "Huelga del corazón"

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Sasha se fue entrada la noche, me dejó sola en mi habitación después de intentar consolarme de algo que incluso yo desconocía.

¿Por qué me afecta tanto Levi? Si sólo somos amigos, al final de cuentas él puede hacer lo que quiera al igual que yo.

Si... exacto, estoy soltera, debería actuar como tal en lugar por sufrir por mí amiguito.

Me dí un baño y me puse mi mejor vestido para salir sola por esa noche y sentirme bien conmigo, sin embargo después de salir de la casa tuve que regresar de inmediato pues comenzó a llover y toda mi noche se arruinó, de cualquier forma no tenía idea de a hacía donde ir o que hacer así que sólo me quite los tacones y descalza fui a tirarme a la sala de estar para leer al azar las páginas de un libro.

-Uff ya me cansé.

Me levanté del sofá y decidida a regresar a mi habitación para dormir, el toque de la puerta me detuvo.

-¿Quién es?
-Mikasa, abre por favor.
-¿Uhm?

Abrí la puerta un poco impactada por lo que veía justo frente a mí.

-Que bueno encontrarte en casa, esta lluvia me sorprendió.
-Espera, dejame darte una toalla seca.

Fuí por ella y se la di para después preparar un poco de té para ambos. Se veía muy pálido que podría enfermar por haber pasado no sé cuanto tiempo afuera en esas condiciones.

-Gracias, no tenías que.
-Descuida, ya estamos a mano, comandante.

Erwin Smith había vuelto a mi casa, me considero para ayudarlo, así como me brindo ayuda ese día, cuando buscaba una mano amiga... yo... Levi. ¿Por qué estoy pensando en él aún?

-¿Pasa algo?
-No, sólo un dolor de cabeza.
-Oh si quieres que me vaya...
-No, está bien. Puede quedarse esta noche.

¿Enserio lo dije? Espero que no vaya a  malinterpretar lo que acabo de decir.

-Ese gesto... tu dedo sobre tus labios. ¿Estás nerviosa?
-Tal vez.
-No pasa nada, Mikasa. Puedes confiar en mí.
-Si.

Oh no, estoy temblando tanto que podría notarlo. No, ya lo hizo por eso tiene esa mirada sobre mí.

-Mikasa...  ¿Tú has pensando en lo que te dije?

Realmente no, me emocionaba que alguien como él se haya fijado en mí pero después de todo lo que pasó hoy, yo no sé que sentir.

-Aún necesito tiempo.
-Uff está bien.

Debe creer que soy una cría con esta reacción. Lo veo en sus ojos llenos de impaciencia, como si estuviera buscando algo más.

-Seguiré esperando tu respuesta.
-Bien.

¿Qué pasa Mikasa? ¿Por qué actúas tan fría frente al hombre que solía gustarte?

Decidí liberarme de eso y comenzar una plática normal con él sobre cualquier cosa que se me pasará por la cabeza para lucir interesante y atenta con su visita, sin embargo a la par de unos minutos se volvió difícil mantener el hilo.

-¿Y cómo van las cosas con tu nueva casa?

Ha preguntado eso anteriormente. ¿Acaso me está prestando atención?

-Bien, todo va bien.

Nos hemos quedado estáticos sin tema de conversación, esto jamás había pasado porque nunca habíamos hablado por tanto tiempo.

Y si esto... lo que sentía por él cada vez que lo miraba sólo era deseo y atracción. Debo admitirlo, es hermoso, tiene lo que quisiera probar en un hombre pero también tiene aquellas cosas que me molestan.

No me gusta quedarme callada, necesito algo para no aburrirme tan fácilmente además Erwin sigue con esa manía tan suya de hacerme sentir como...

-Mikasa ya te he dicho que me enorgullece tener a un soldado tan prometedor como tú de lado de la humanidad. De echo estaba planeando con el resto del consejo que encabeces tu propio escuadrón en un misión para extendernos. Tú y Levi podrían ser los pilares para nuestra victoria.

...si sólo fuera un arma, una simple arma que pueden usar para sus propios beneficios.

Mi mirada se posó en uno de los ramos de flores que Sasha había acomodado en un jarrón para ambientar la casa hace unos días en una de sus visitas. Un ramo de flores de tonos rosados que se salvó del basurero pero hoy está resintiendo el precio de ser un ser vivo, sus pétalos están marchitos y se caen, pronto morirá y tendré que desecharla.

Si yo fuese herida en batalla hasta el punto de no poder continuar... mi destino sería el de esas rosas.

Definitivamente no quiero ser un objeto para ningún hombre.

-Uff que tarde es, me temo que iré a dormir.
-Vayamos.

Cada quien durmió en un sitio muy alejado del otro, él en mi sofá y yo en mi recámara.

Por la madrugada...

Erwin Smith podrá ser alguien digno de mi admiración y atracción pero no es mi amor. Sus ojos celestes son bellos pero no me miran como mujer sino como un soldado para la guerra, como una de sus insignias. Quiero que alguien me ame por mí y no por lo que puede obtener de mí.
Además, conozco la vida que lleva y no quiero ser el bicho raro dentro de su mundo de gente elegante, importante y aunque pueda escucharme mal... yo no encajo entre esas edades.

Por otro lado, Levi no pasará de ser uno de mis amigos más preciados ya que él... ha decidido por alguien más.

Los dos únicos hombres que lograron impresionarme... Erwin... Levi... ellos tampoco son los indicados.

Hermanito... toda esa vida a tu lado me hizo severamente selectiva cuando se trata de hombres. Me enseñaste que... lo que yo busco es a alguien que sólo sea para mí y me haga sentir como una abeja reina. Tú me enseñaste con tu claro ejemplo a que hombre no debo elegir.

Mi corazón está en huelga, está cansado de romances fallidos y reconozco que aún me falta madurar.

ONE GIRL TWO MENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora