_1 Capitulo_ Pies de arena

2.9K 99 0
                                    

Me gusta manejar mí auto durante las noches, siempre creí que era más espiritual y mágico.
Me agrada el aroma del verano de noche y la gente de fiesta en todos lados.
Tenía que ir hacia lo de mí madre, yo vivo con mí padre a unos muchos kilómetros y tengo que ir de vez en cuando a visitarla.

"Hoy el tránsito está bastante pesado entonces tendré que tomar otro camino" pensé, así que di la vuelta y maneje hacia aquel otro camino que ya conocía y ya había recorrido miles de veces.

Mientras escuchaba música a alto volúmen, note que por detrás había un auto que estaba manejando de manera extraña, no llegaba a visualizar bien porque estábamos en una carretera al lado de un río enorme y si perdia el control caería.
Así que los ignore y seguí mí camino, pero comencé a sentir que me estaban molestando, que lo hacían a propósito.
Detuve mí auto a la orilla del río un minuto para esperar que ellos pasarán y así poder seguir mí viaje tranquila.
Pero no pasaban, comenzaron a ir lento, cuando estaban cerca mio, comenzaron a acelerar y chocaron mí auto, logrando que este se diera vuelta y cayera al agua conmigo adentro.
Llegué a escuchar unas risas y que escaparon con velocidad, mientras yo me hundía cada vez más en aquel río.
Sentí que era mí final, sabía que estaba por morir, aunque intente salir del auto y luche por mantenerme con vida, de repente comencé a desmayarme y en mí interior logré despedirme de mis padres.

En mí mente pasaron unos minutos en los que sentí como si estuviera durmiendo, y de repente volví a respirar, levemente, como si nunca me hubiera ahogado.
No podía abrir los ojos pero si podía pensar. "Que está pasando?" "porque no puedo abrir mis ojos?" Estaba algo asustada pero no tenía miedo en realidad, solo necesitaba saber que sucedía.
"Así se siente morir?" Simplemente estar con los ojos cerrados y pensando, entonces la muerte era muy pacífica.

Ya no hacía fuerza para abrir mis ojos, estaba quieta, podía sentir mí cuerpo tumbado en algo, y comencé a escuchar ruidos de olas.
Creí que era mí mente, imaginando cosas, porque si estaba muerta ya no tenía cuerpo.

Cuando de repente comencé a escuchar unas voces, de un hombre a lo lejos, lo cual me sorprendió porque no eran voces familiares.
Así que volví a intentar abrir los ojos solo para probar, y esta vez los abrí.
Lo primero que vi fue el cielo estrellado, la luna, llena, el olor era diferente a otros veranos y estaba tirada en arena.
Miré la arena mientras seguía tumbada y me logré sentar. Estaba completamente confundida.
Un señor, con unas túnicas raras y viejas, pelado y con mucha barba, se paró a mí lado y me gritaba en un idioma que no entendía.
"Dios?" Le dije y me observó raro, me hizo un gesto de enojó y me levanto del brazo, con fuerza me llevo hacia un lugar que parecía un mercado.
Habían otras mujeres, de todas las edades, jóvenes, ancianas, hasta muy menores, en ropas muy ligeras.
Yo igual tenía también como un "vestido" hecho como de trapos.
Estábamos en verano pero aún así tenía frío con aquel estropajo.

No estaba entendiendo que sucedía, parecía como que me estaban vendiendo.
Tenía los pies descalzos y llenos de arena, pero en el mercado no había arena.

Miré a los ojos de aquellas chicas y todas estaban tristes pero calmadas, como esperando a que algo malo sucediera.
Todas estábamos paradas mirando hacia abajo, ellas también parecían avergonzadas.

Las horas pasaban y yo seguía ahí parada, comenzaban a dolerme los pies pero el señor ya había golpeado a dos mujeres por intentar sentarse, y no me sentía con fuerza para defenderme.

Así que luego de un rato, unos hombres de notable clase alta resguardados con hombres que parecían ser guardaespaldas pasaron por enfrente nuestro.
Comenzaron a comprar cosas varias en aquel mercado.
Cuando se detienen enfrente nuestro, y comienzan a hablar con aquel señor que me arrastro por aquel lugar.
Luego un señor, que parecía ser el más importante de ellos, comenzó a observarnos de arriba a abajo a todas nosotras, eligiendo a unas pares.
Al verme, lo primero que observo fueron mis pies llenos de arena y mí cabello también Cubierto de arena.
Parecía que no iba a elegirme a mí, pero uno de sus hombres le hablo algo al oído y me eligieron.

Nunca supe bien porque me habían elegido, pero junto con las otras chicas nos levantaron y Nos llevaron con ellos a su carruaje, a la fuerza.
Mire Hacia atrás esperando que algo pasara pero no sucedió nada, los hombres seguían llevándonos del brazo.
Nos subieron a su carruaje y arrancaron.
Me di cuenta que me habían vendido, y que estaba yendo para ser esclavizada.
"Qué es lo que había pasado? no me había muerto?" Pensé.
sólo sé que el camino fue muy silencioso y que ninguna dijo ni una palabra y aunque dijeran algo no las entendería.



Sultana KamraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora