Al principio, no entendía porque la madre sultana estaba vigilandonos tanto, nunca había sido así.
Con el tiempo entendería que las mujeres del harem, se ponen muy nerviosas cuando el sultán no está, y planean cosas en contra de otras mujeres.
A mí no me han hecho nada, pero una de las favoritas ha sido envenenada y no encuentran aún al culpable.
No sabemos aún si ella sobrevivira, solo sabemos que está muy mal.Ahora todas tienen miedo, Menos nosotras, Turhan y yo sabemos que no tenemos ningún rango para que quieran lastimarnos.
No tenemos precauciones.La noche siguiente a la noticia, acusaron a una muchacha joven del harem, nadie le creyó que ella no había sido entonces se suicidó.
Fue muy trágico y me sentí muy mal al respecto.
Hablé con Turhan sobre aquello.
-Yo no creo que haya sido ella...- le dije.
-¿Porque no? ¿Sospechas de alguien más?
-Me pregunto en realidad, ¿Porque lo haría? Si ni siquiera conocio al sultán, acaba de llegar y era muy joven, es muy sospechoso todo esto.
-Es verdad... Puede que tengas razón.
-Cuando el sultán vuelva y se entere, pediré hablar con el para decirle mí teoría.El problema era que solo quedaban dos favoritas más, la que fue envenenada, era la que más visitaba al sultán, las otras dos solo lo habían visto una vez.
Pero quién sabe... Quizás solo fue alguna chica del harem, que estaba celosa.Luego de unas semanas, la favorita murió y el tema quedo ahí.
Intentaron buscar a la asesina pero terminaron aceptando que fue aquella que se suicidio, que no aguanto la culpa.
Una de esas noches, al irme a acostar encontré una nota debajo de mí almohada.
"Kamra... Se quien fue la asesina, quiero contartelo a ti, encuentrame en el pasillo de las favoritas"
Era una oferta que no podía rechazar, quería saberlo y poder contarle al sultán, para tener su reconocimiento.
Me escabulli en el pasillo que era muy oscuro de noche y una sombra se acerca.
-Hola...
-Hola, ¿quien eres? Dime rápido quien ha sido la asesina, no me gusta este lugar.
-Soy yo... Te he escuchado hablar con Turhan, ¿Con que irás a hablar con el sultán? No permitiré que lo hagas...
En ese momento reaccione rápido y salí corriendo, pero ella me alcanzó y me golpeó con algo pesado en la cabeza.
Vi su rostro antes de desmayarme, mientras me arrastraba y luego ya no sentí nada más.
Las horas pasaron y al despertar estaba encerrada en un cuarto, no sabía en cual pero no tenía forma de abrir la puerta, lo único que me iluminaba eran dos velitas que estaban en la puerta.
Golpee y grité muchas veces esperando que alguien notará mi llanto pero nada pasó, el tiempo pasaba y esperaba realmente que alguien notará mí existencia.Me senté en una esquina, mirando a la nada y comencé a llorar mientras gritaba "Quiero salir".
Me quedé dormida y al despertar luego de anda a saber cuántas horas, seguía allí adentro.
Me resigne, para no aburrirme comencé a cantar.
Luego de mucho tiempo comencé a reflexionar, tuve mucho tiempo sola para idear un plan para escapar.
Lo peor era que comenzaba a tener hambre y sed.
Luego de una semana, comenzaba a tener pensamientos suicidas, de todos modos moriría igual ya que la deshidratación me estaba consumiendo.
Me desmayaba cada tanto y el tiempo simplemente pasaba.
Pensaba en el sultán, decía en mí interior "Si logro salir de aquí, no le diré quién fue, sere sultana, y me las pagarás" surgió como fuego en mí aquel deseo de venganza, y quemaba, quemaba mucho.Comencé a golpear la puerta otra vez, con las últimas energías que me quedaban y grité demasiado. Cuando estuve apunto de perder las esperanzas y por tirarme al suelo a morir, escuche unos sonidos de fondo.
La puerta se abrió bruscamente y una concubina me encontro.
Camine como pude hacia ella, y me sostuvo del brazo para que pudiera caminar.
-Todos te estaban buscando, ¿Como es que quedaste encerrada allí?
-No se quien me encerró...
Dije sin aliento.
En el camino hacia la enfermería, nos cruzamos al sultán y al mirarlo me sorprendí tanto que me desmaye.
Desperté en la enfermería y el sultán estaba allí.
-Mi sultán...- intente levantarme pero me dejó quedarme acostada.
-Al llegar, no te vi en el harem... Y pedí que te buscarán, hasta creí que te habías escapado.
-Me encerraron allí, durante una semana, no se que sucedió afuera , disculpe mí sultán.
-¿Quien te ha encerrado?
-No lo sé, no pude verle la cara majestad...
-Y ¿porque te han encerrado?
-Es que...
Le expliqué todo, sobre la nota, mí teoría y la falsa acusación.
Al terminar de hablar de eso, el sultán puso su mano en mí cabello.
-Estaba preocupado, menos mal que estás bien- Dijo mientras pasaba sus dedos entre mí cabello.
Me miraba de una manera diferente, ya no estaba enojado, realmente se veía preocupado.
-Bueno, debo irme, luego hablaremos.- volvió a su tono serio y se fue.
Eso dejo en mí un sentimiento extraño, es verdad, el ya me gustaba, pero ahora comenzaba a sentir algo más fuerte por el.
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Sultana Kamra
Random"Luna" cuando llegue solo podía observar la luna, en aquel carruaje. Nací en Argentina, en el 2000. Mí historia es una realidad en mí mente, como cuando viaje hacia un tiempo remoto y conocí al sultán Ayhan y logré vivir aquellas fantasías que al co...