Ahora estoy tan rota que hasta mi perro siente tristeza de mí, porque solamente hace es mirarme, moverme su cola y lamerme, no quiero bajar de peso, no quiero volver a descuidarme, recientemente llame a mi madre y estaba tan ebria que me hizo reír a carcajadas, me dijo una y mil veces que soy su orgullo, eso me hizo sentir tan querida en plena oscuridad.
YOU ARE READING
Pensamientos de un adolescente
RandomPensamientos de un adolescente cualquiera. La vida trastornada de un adolescente.