Pensamientos de un adolescente

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Se lo mucho que estás rota y que tu corazón ya no resiste más dolor, esto me afecta porque veo como una niña tan dulce como tú es cruelmente herida y no lo mereces, porque te he visto y sé que eres generosa, comprensiva y tienes miles de cosas lindas que dar a los demás. Se también que yo no soy la excepción porque yo también puedo herir, ya que tengo malos hábitos que por más que intento no sé quitan, pero puedo prometerte que yo estaré contigo en tus días grises, besar cada una de tus cicatrices y darte el calor que tanto necesitas, pero te conozco y sé que no me necesitas, porque eres tan fuerte y puedes levantarte sola, como siempre lo haz hecho desde que te conocí.