Capitulo 2

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Días después

Tres dias habían pasado y Caroline aún no recordaba nada, me habían prohibido entrar a verla por qué eso la alteraría según Elena. Comenzaba a crear que era un comblot contra mi. Pero a mí eso no me aleja del hospital solo me iba a cambiar y regresaba a quedarme en la sala de espera, si ese a Sido mi sitio desde que Caroline tuvo el accionante. Liz venía todos los días dos o tres veces a verla al día. A mí solo me dejaban pasar cuando estada dormida. 

Elena decías que cuando bajará la inflación del cerebro de Caroline vendrían los recuerdos yo solo esperaba que eso sucediera pronto. El día de hoy Liz se había tardado en llegar seguro algo importante se había aprencentado. Suspire ondo mirando las flores que había comprado minutos antes con la intención que Liz se la diera a Caroline. Un grito en la habitación de Caroline se escuchó no dude ni un momento en entrar rápidamente en su ayuda. 

—¡Estoy horrible! —Grito Caroline desde el baño, la miré desde la puerta ella se veía minuciosamente en el espejo, rei internamente al darme cuenta que Caroline cada ves estaba más como su habitual ella — ¿Que haces aquí? —Pregunto al mírarme.

—Escuche tus gritos y pensé que podría ayudarme en algo. —Conteste Caroline me miró sería y regreso a su cama.

—Bueno pues ya viste que estoy bien ahora puedes irte. —Respondio mientras señalaba la puerta.

—Tambien te traje estas flores. —Le enseñe el ramo de flores que le llevaba sus ojos se iluminaron al verlas, luego cambió su expresión hacia a mi. Me dolía tanto su indiferencia.

—Gracias no eran necesarias mi madre me trae todos los días . —Tomo entre sus manos y flores y las olió. Rei un poco ante su comentario Liz le llevaba todos las flores que yo compraba aún ella no lo supiera. 

—¿Puedo preguntar algo? —Asintio al mírarme—por que decías que eras horrible. 

—¿Que no me vez?. —Solto un grito mientras tocaba su cara— mirame. Mira estas ojeras. Eso y que estoy más vieja. —Solto con horror negué con la cabeza.

—Es una locura Caroline, tú no necesitas maquillaje para ser hermosa, incluso sin maquillaje serías la más Hermosa en un certamen de belleza. —Respondi ganándome una sonrisa fugas de sus labios, la puerta se abrió de golpe entrando Liz con unos papeles en las manos, y una pequeña maleta mano. 

—Hola cariño —Hablo felizmente Liz luego me miró, cambiando su cara a una más sería.—Hola klaus que sorpresa.—me saludo cortésmente, regresando su atención a Caroline— ¿Como te sientes cielo?.

—¿Como crees que me sienta? No recuerdo casi una década de mi vida, me veo fatal. Y la comida de hospital es horrible. Estoy segura que he tenido mejores días, aún que no los recuerde. —Solto molesta. Provocando la risa de Liz, yo solo permanecía callado observando la escena.

—Bueno cariño seguro que está noticia te alegrará un poco. Ya tengo tú alta firmada. Ya nos podemos ir a casa. —Respondio Liz con emoción, la miré incrédulo, se suponía que yo tenía que hacer esos trámites era a mi a quien me tocaba pagar y hablar con la doctora a cargo. Suspire tratando de calmarme. 

—Ya era hora, ¿esas son mis cosas?. —Pregunto mientras miraba la pequeña maleta en las manos de Liz.

—Si, supuse que no querrías irte en vata. —Liz le entrego la maleta y Caroline la abrió con desesperación.

—Espero que hayas traido algo de maquillaje. —Caroline miro a Liz.

—Todo está ahí. Cariño. —Respondio Liz, la mirada de Caroline cambio hacia mí.

—¿Que haces aquí todavía? —Pregunto con molestia.

—Caroline no seas grosera con klaus el sólo se preocupa por tí. —Liz reprendió a Caroline.

—No es necesario que lo haga. —Respondio Caroline. Caminé hacia la puerta y me despedí, Liz me tomo el brazo impidiendome salir.

—Caroline es normal que se preocupe por ti, ya que el fue el que te trajo al hospital, también fue el te saco del río si no fuera por él tal vez estarías muerta. —La respuesta de Liz sorprendió a Caroline.

—Oh supongo que te debo las gracias. —Respondio pensativa. Negué con la cabeza.

—No es necesario, me alegra que estés bien. —Respondi con una media sonrisa.

—Bien. Pues gracias de todas formas. —Respondio secamente mientras se levantaba de la cama— Me iré a cambiar mami no tardó.

Caroline se encerró en el baño por unos minutos, convencía a Liz que me dejara llevarlas a casa, aún que al inicio no accedía la convencí. Liz recogió las cosas que estaba por toda la habitación de Caroline. Después de un rato Caroline salió hermosa del baño, hasta con pans Caroline lucia hermosa me tuve qué contener para no comermela a beso. 

—Estoy lista ¿ya podemos irnos? —Pregunto Caroline mientras tomaba el ramo de flores que le había dado. 

—Claro cariño. Klaus se ofreció a llevanos. Espero no te importe. —le explicó Liz a Caroline.

—Estoy tan desesperada por salir de aquí que no me importa quién nos lleve mamá. Andando. No pienso estar ni un minuto más en este lugar.

Salió rápidamente de la habitación con sus flores en las manos. Liz y yo la seguimos me apresure para abrir el auto, Caroline se fue en el haciento de atrás y Liz en el de copiloto. Todo el camino fue algo tenso. Ya que cuando trataba de hacer plática ella permanecía callada. Luego de unos minutos me di por vencido. Detuve el auto frente a casa de Liz. Me baje rápidamente para abrirle la puerta a Caroline. Ella solo se limitaba a verme. Liz abrió la puerta y Caroline entró rápidamente me quedé afuera al igual que Liz. 

—Siento que mi hija se comporte así contigo klaus. —Hablo Liz después de unos segundos de verificar que Caroline no estuviera cerca.

—Creeme a mí me duele más. —Respondi.

—Elena me entrego las cosas que traía Caroline en el accidente, también puse en la bolsa su celular. —Explico mientras me entregaba una bolsa resellable, la cual contenía accesorios que llevaba el día del accidente la abrió y saqué los anillos tanto de bodas como de compromiso.—Tambien dejé ahí los anillos de boda, como comprenderás no es bueno que los vea.

—Si entiendo. —Respondi mirando el anillo de compromiso.

—Klaus tengo que entrar Caroline me necesita. Espero no moleste que no te invite a pasar pero Caroline necesita estar tranquila.

—No te preocupes entiendo, cualquier cosa que necesiten llámame no importa la hora. ¿Si? .

—Gracias lo haré si necesitamos algo. —Respondio antes de meterse a su casa.

Espere a que Liz cerrada la puerta para subir a mi auto. Vi una última vez la casa y la ventana de la habitación de Caroline. Nada de esto se suponía que tenía que ser así. Se suponía que yo la llevaría a nuestra casa. Yo sería quien la cuidaría. Miré las cosas que Liz me había entrado de Caroline. Me dolía ver los anillos de nuestra boda en esa bolsa como si no significaran nada. Cuando para mí representaban lo más grande y sagrado que tenía en mi vida. Mi amor por Caroline. Pero sobre todo me dolía ver cómo cada recuerdo de nuestro amor se alejaba de Caroline. Cada día más y más. 








Aquí les dejo el segundo capítulo, espero les haya gustado. Si es así no Olviden dejar su estrellita y comentario. Para mí su opinión es importante. Comenten si les gustaría más de un capítulo semana.

Nos vemos hasta el próximo capítulo chaíto :-)

Volverte a enamorar -Klaroline-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora