Volverte a enamorar -Klaroline-

Capítulo 15

Una semana después

Los días pasaron sumamente lentos. Pues darme cuenta de los sentimientos que comenzaban a crecer dentro de mi hacia Klaus, volteo mi mundo de cabeza. Eso complico que ultimara los detalles de la boda de Elena. Pues no me concentraba lo suficientemente. Evitaba a klaus lo más que podía. Porque al verlo solo podía pensar en sus labios sobre los míos. Su sexy sonrisa solo me distraía. Y su actividad complaciente solo lo dificultaba más.

Tal vez no solo era lo que sentía por klaus. Una semana bastó para que me inflara como globo. Ya que mis bebés comenzaron a notarce cada día más y más. Hasta formar una no tan pequeña pancita. Qué ya era imposible de ocultar. Incluso mi vestido de Dama de honor tuvo que ser ajustado nuevamente. Ya que no me quedo cuando me lo probé por última vez. Por fortuna teníamos tiempo de sobra para arreglarlo.

Al día siguiente que regresamos de Washington. Nos mudamos a la casa Salvatore. Tardamos varias horas en instalarnos. Incluso klaus ayudó a llevar cosas que mamá no quiso dejar. Cuando Damon nos indico cuáles serían nuestras habitaciones. Me quedé sorprendida con la que le tocó a mamá. Pues era la más grande y espaciosa que era la que ocupaba Damon y Elena.

Mamá se negó a ocuparla. Pero no le ganó a Damon así que termino por aceptarla. A mí me tocó la de a lado. También era grande y muy acogedora como el resto de la casa. Damon y Elena ocupaban la habitación de enfrente a la de mamá. Así cualquier cosa que necesitará, rápido la podríamos auxiliar. En cuanto a la habitación para mis bebés Damon nos habló sobre los planes de remodelar una habitación y poner una puerta que conectará a la mía.

Incluso llevo a un arquitecto para comenzar con el plan. Un día después de eso. Mamá, Elena y yo. Fuimos a comprar las cunas y algunas cosas más para mis bebés. Realmente comenzaba a emocionarme la idea de ser mamá. Y en un pestañear llegó el día de la boda de mi mejor amiga. Todo estaba listo. La ceremonia sería en el jardín de la casa. Al igual que el banquete. Pues sería una pequeña he íntima ceremonia solo con los amigos y familiares más cercanos.

Le dije a klaus que convenciera a Damon de ir a dormir a su casa solo por una noche. Así al amanecer Elena podría prepararse para la boda A gusto sin temor a que Damon la viera. Afortunadamente Damon accedió. Y hoy muy temprano comenzamos a prepararnos para la boda. Todas nos reunimos en el cuarto de mamá. Qué te tenía la mejor luz para maquillarnos. Me mire por tercera vez al espejo sin quedar complacida por como había quedado con mi vestido de dama.

—¡Cariño te ves hermosa!. —Dijo mamá detrás de mí. Negué al tiempo que tocaba mi vientre.

—Me veo gorda mamá. —Me queje, y di la vuelta para mirarla defrente.

—¿Quién se ve gorda? —Pregunto Elena mientras salia en bata de la ducha.

—Yo que no es obvio. —Elena negó, mientras se acercaba a nosotras.

—Caroline no estás gorda, es normal que el embarazo comience a notarse. Estás entrando al cuarto mes de gestación. Pronto sabremos que serán. ¿Acaso no te emociona eso?. —Pregunto, mientras tocaba levemente mi vientre. Asentí con una media sonrisa.

—Creo que tienes razón. Valen la pena unos kilos de más. Todo por conocer a mis bebés. —Concorder con felicidad mientras acariciaba mi pancita.

—Me alegra que pienses así cariño. Ser madre es la mejor cosa que le puede pasar a una mujer. —Explico mi madre.

—Por eso mismo Damon y yo lo hemos estado hablando. Y queremos tener uno pronto. —Confeso Elena, con emoción la cara de mamá y la mía fue de asombro y alegría total.