Los Poderes Ocultos 1 - El anillo de tortuga (primera versión)

Sufriendo

*Annie*

¡LLORO! ¿Cómo diablos pueden ocurrir cosas tan buenas y tan malas en la vida? O sea, iba a besarme con Alex, ¡iba a BESARME con ALEX! ¡Estuve a punto! ¡Sentí su roce! Ay, ¿por qué? Voy a enloquecer.

Cuando se abrió la puerta, casi me da un infarto. Me estaba muriendo, fue algo tan injusto. ¡Y aparte salí huyendo! Es que sinceramente no sabía qué hacer. Estaba muy mal. En verdad. Luego, después de un rato cuando él vino conmigo afuera, me gritó y me movió, y entonces esa flecha... De no haber sido por él habría muerto o yo que sé. Y todo lo que pasó después, estaba aterrorizada. Lo único que me hizo guardar la calma fue que Alex estaba conmigo. Pero entonces él se fue, así sin más, se fue corriendo, dejándome, deje de respirar. ¡Tenía miedo y mucho! ¡Hasta acabe en el suelo! Sentí como las fuerzas me abandonaban y me derrumbaba. Es que pasaron tantas cosas, será que Alex, ¿me... me quiere? ¿Sí me ama? Estoy tan confundida, ¿y si sólo jugaba conmigo? Ay no. Cuantas complicaciones, enserio.

Cuando él desapareció de mi vista, me quede ahí sentada, intentando volver a respirar. Ya que me calmé lo suficiente, me levanté con dificultad y me fui a encerrar a mi cuarto. No sabía qué hacer, pero me di un largo baño para poder pensar, y luego ya en mi cama me puse a oír música con audífonos. No estuvo tan mal. Oí muchas canciones heavy, así que eso al menos hizo que me aturdiera un rato, después ya me desahogue chillando como una fuente. Tal vez exageré, pero así ya saque también cosas atrasadas. Y aparte, cuando agarré el teléfono, tenía mensajes de Ethel.

"Holaaaaaaaa"

"Como esta eso de que tú y Alex son amigos con derecho?

Y yo: "Quééé? De qué demonios hablas? Quién te dijo eso?

Se toma su tiempo en contestar, esto me enoja, ¿cómo demonios se enteró de esto?

"Me dijo Bel"

¡Ay Bel! La voy a acabar machacando, ¿cómo se le ocurre decirle a Ethel? En fin. No debo enojarme, debo tratar de conservar la calma. Después de discutir con Ethel me quedé profundamente dormida, y sin sueños. Eso sí que fue una novedad. 

Ahora me despierto, se siente raro no haber soñado con nada sinceramente. Yo ya esperaba sangre por todas partes. No sé si esos cuatro ya se hayan ido. Si es así, iré al pueblo, tengo una plática pendiente con Sophie y Bel. Pero ir al pueblo implica hacer el camino hasta el, con Alex, si es que se digna a dirigirme la palabra.

Me levanto, me visto y parto a mi peor pesadilla, el desayuno. Para colmo, cuando entro no está Alex. ¿Será que no quiere verme? ¿Y si ya nunca me vuelve a hablar? No me importa, iré a buscarlo. Creo que estoy muy mal de la cabeza.

Cuando llego al pasillo en el que está su habitación, me quedo paralizada. ¿Qué estoy haciendo? ¿Y si lo arruino todo? Podría irme... No. No le pienso dejar de hablar ahora, no con lo que casi pasa.

Voy decidida a su puerta, me quedo inmóvil unos segundos pensando si en verdad no debería irme, pero finalmente, me siento completamente decidida, sólo que cuando estoy a punto de tocar, la puerta se abre y Alex aparece frente a mí. Me da un brinco el corazón. Tengo los ojos como platos y me quede congelada. Él me mira desconcertado y sin respiración. En un segundo de lucidez decido empezar, aunque ni siquiera sé que carajos le voy a decir:

—Alex... —empiezo con voz débil y más aguda de lo normal, pero me interrumpe:

—Annie, creo... creo que no deberías estar aquí. — ¿qué está diciendo? esto realmente me deja muy desconcertada y preocupada. ¿Ahora qué pasa?