Voy a mi habitación, piscina o como se supone que debo llamarla y me pongo cómoda.
Cuando me traigan mi maleta no voy a saber dónde demonios ponerla.
La verdad es que no sé porque le gusta tanto esta habitación a la tal Nicolette, vale, tiene piscina ¿Y a mi qué? También hay una piscina fuera... ¿Dónde se supone que voy a poner mi ropa? Que yo sepa este sitio no tiene armarios...
Me siento en la cama, me quito los zapatos y los calcetines y pongo los pies en el agua. Alfred tiene razón, el agua está calentita, dan ganas de tirarse de cabeza y darse un chapuzón, pero no, no lo haré.
Me pregunto cómo seran mis días en este hogar, porque yo no conozco nada de U.S.A y por lo que sé este es el barrio más caro de todos.
Al cabo de unos minutos tocan a la puerta.
Xxx: El almuerzo se servirá en unos minutos.
Y se marcha. Nuevamente tengo que volver a usar mis zapatos y para mi desgracia tengo varias heridas en los pies...
Salgo y bajo por las escaleras hasta llegar al final. Llego a la cocina y no puedo creer lo que veo... Es hombre que dice ser mi padre está sentado en la mesa con la dueña.
Catalina: Daniela...tu padre ha venido para hablar contigo...Será mejor que me marche...
Catalina se marcha sin darme tiempo a decirle nada y me quedo sola con este hombre.
Yo: Márchate, no eres bienvenido en esta casa.
Joseph: No he venido aquí por gusto, la verdad es que hay algo que debes saber...
Yo: Continúa...
Joseph: El juez ha ordenado una orden de detención contra tu madre por un delito de sustracción de menores, está condenada a cárcel de 3 a 5 meses
Yo: ¡¿Cómo?!
Joseph: La policía ha venido al apartamento cuando a ti te llevaban para esta casa. Mira, sé que tu madre no se ha portado muy bien ocultándoos mi identidad pero lo que le está pasando no es nada bueno...
Yo: Yo tampoco sé quién ha podido denunciar pero ten por seguro que yo no.
Joseph: No digo que te estoy echando la culpa a ti, te pregunto si sabes quién ha podido hacer algo tan grave.
Yo: Seguramente mi padre, haría lo imposible por arruinar la vida de mi madre.
Joseph: En realidad tu padre verdadero soy yo, pero supongo que te refieres a su padre adoptivo.
Yo: Me refiero a mi padre, que fue el que me cuido durante 17 años.
Joseph: Y también te maltrató, no lo olvides.
Yo: Tú no eres nadie para venir aquí a hablarme de lo que me hizo mi padre. Padre se puede llamar a una persona que te cuida, te protege y demás cosas pero tú no hiciste nada de eso, así que lo siento, pero tú eres mi padre.
Joseph: Sabes que siento haber perdido tanto tiempo alejado de vosotros, de mis hijos, pero ya sabeis que vuestra madre me tenía amenazado...
Yo: Y mucho menos puedes venir aquí a hablar hablar mal de mi madre. Así que ya que has dicho lo que tenías que decir ahora vete.
Joseph: Me parece muy mal esto qué estás haciendo...
Yo: Vete si no quieres que llame a seguridad, y no vuelvas a aparecer por aquí si no quieres acabar igual que mi madre, porque te juro que te pondré una denuncia como vuelvas a aparecer por mi vida, que ni eres padre ni eres nada.
Joseph: Sí eso es lo que quieres está bien, me iré. Que sepas que siempre te quise y te querré hasta el fin de mis días.
Yo: Ahora largate.
Joseph se marchó por la puerta, y yo no pude evitar llorar, Catalina se acerca a mí y me dice...
Catalina: ¿Estas bien? ¿Ese hombre te agredido?
Yo: No, por favor acompáñame a comisaria.
Catalina: Ok, esta bien, vamos.
Catalina aviso al chófer y jamás me imaginé que hablaría de un avión puesto que pensé que nos íbamos a ir en coche, pues de Nueva York a Texas hay una distancia de 26 horas en coche y 3 horas en avión. Al llegar a la comisaría de Nueva York no puedo evitar sorprenderme al ver a mi padre adoptivo hablando con uno de los policías. ¿Qué mentiras les estará contando ahora?
Catalina me lleva a hablar con un policía y a su vez el policía me lleva una sala donde solo estamos él y yo.
Policia: Cuénteme señorita, ¿Que le trae de por aquí?
Yo: Quiero poner una denuncia contra Antonio Camilo Diaz Gil por un dos delitos, uno de violencia de genero y otro de violencia domestica.
Policía: ¿Puede decirme quién es ese hombre?
Yo: Ese hombre es mi padre adoptivo.
Policía: Está bien acompáñame...
El policía me lleva otra sala donde hay más policías. La verdad es que en ningún momento pensé en denunciar a mi padre, pero jamás creí que fuera capaz de hacer una cosa como esa no sé en qué estaba pensando ya se había divorciado que más quería.
Yo: Un momento quiero hacer otras dos cosa más... (le dije a un policía que estaba escribiendo rápidamente en su ordenador)
Policía: ¿Que desea?
Yo: Quiero poner una orden de alejamiento contra Antonio Camilo Diaz Gil y deseo saber de cuánto es la fianza de María del Carmen Vega Suárez...
Policía: ¿Acaso pretende usted pagar su fianza?
Yo: Por favor esa señora es mi madre dígame de cuánto es...
Policía: La fianza total asciende a unos $2457
Yo: Nos veremos para la semana...
Policía: ¿Va a pagar usted sola tanta cantidad de dinero?
Yo: Haría lo que fuera por salvar a mi madre.
Policía: Como desee, nos veremos la semana que viene...
No quería que se hombre se volviera a acercar a mí así que pensé que lo mejor era eso, ese hombre había arruinado la vida de mi madre y no iba a permitir que arruinar a la mía también.
Ibamos a coger otra vez ese avión privado blanco que parecía de cuento de hadas hasta que frené en seco antes de subir.
Catalina: Querida...¿Ocurre algo?
Yo: Quiero ir al apartamento, tengo que hablar con alguien...
Catalina: ¿Queda muy lejos?
Yo: Solo a media hora andando. Usted puede ir a Texas si quiere...
Catalina: No voy a ir yo sola. Esperaré en The Tipple hasta que termines.
Yo: ¿En dónde?
Catalina: Es un bar que está ahí al lado.
En ese momento saca una pequeña hoja de un pos-it y me la dá.
Catalina: Si ocurre algo no dudes en llamarme, nos vemos en una hora.
Me fuí andando para el supuesto apartamento, sabía muy bien lo que iba a decirle. Llegué al edificio pero como no tenía llaves tuve que llamar al telefonillo...
Joseph cogió el telefonillo y dijo:
Joseph: ¿Diga?
Yo: Soy Daniela, ¿Puedes abrirme?
En ese momento el portal se abrió, subí en el ascensor hasta el cuarto piso y ví que la puerta estaba abierta.
Joseph: ¿Se ha perdido usted? (sonaba demasiado sarcástico)
Yo: No he venido para discutir, quiero hablar contigo.
Joseph: ¿Cómo? ¿Estás borracha?
Yo: Acabo de venir de el departamento de policía.
Joseph me invitó a pasar a la sala.
Joseph: ¿Quieres beber o comer algo?
Yo: No, gracias, en un rato iremos a casa a comer.
Joseph: Puedes quedarte aquí si quieres...
Yo: Quizá en otro momento...
Joseph: ¿Que es lo que me querías contar?
Yo: He denunciado a mi padre adoptivo...
Joseph: Vaya, a estas alturas no sé que me sorprende más, que lo hayas denunciado o que le llames padre adoptivo.
Yo: Lo quiera o no tú eres mi padre verdadero.
Lo dije muy bajito, por un lado lo odiaba por no pasar tiempo con nosotros, pero por otro quería quererlo y que se comportara como se tiene que comportar un padre. Él me miró y se quedó callado, creo que ninguno de los dos sabía que decir en ese momento.
Joseph: Gracias...
Yo: Bueno, total que te quería decir que quiero pagar la fianza de mi madre.
Joseph: No voy a dejar que pages tanto dinero tu sola.
Yo: No es mucho dinero, puedo pagarlo perfectamente. Además no quiero que pierdas dinero de la empresa.
Joseph: Entonces lo pagaremos a medias.
Yo: Te estoy diciendo que no.
Joseph: Me da igual, lo vamos a pagar a medias y punto, que son ganas de discutir a lo tonto.
Yo: Está bien, mañana me paso por aquí con el dinero y vamos a la comisaría.
Joseph: ¿Cuánto es?
Yo: $2457
Joseph: Okey.
Yo: Nos veremos mañana.
Joseph: Hasta luego (me estaba yendo por la puerta cuando dice)
Joseph: Ah, y gracias por la visita.
Yo: (Lo miré por última vez y dije) De nada, papá...
Quería correr y abrazarlo, quería quedarme con él, pero no, obviamente no lo hice...
Llamé a Catalina, fuí hasta el bar en el que estaba, tomamos algo, charlamos, nos reímos mucho y después volvimos a Texas para el almuerzo. Pensaba que a la hora de la comida me iba a encontrar con su marido o su hija, pero al parecer la niña estaba en casa de una amiga y el padre pues no sabíamos, así que comeríamos nosotras dos tan ricamente. A la tarde fuimos a ver el "Parque Watkins Glen State" en Nueva York, era un lugar precioso.Pasamos una tarde maravillosa, me ha encantado pasar tiempo con ella. Como era muy tarde nos fuimos de vuelta para casa, mañana más y mejor.
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Cambio de vida
أدب الهواةDaniela no es una chica popular en la escuela que digamos. Casi todo el mundo se mete con ella y su vida no es muy fácil. Pero pronto va a ocurrir una cosa que va a cambiar todo su mundo, su manera de ver las cosas, pero lo más importante...va a cam...