Una Nueva Vida, Vivir Solo Para Ti.

18. ¿Cómo lo haces?

En bien aquel imbécil desapareció Yosano se acercó de manera rápida a los cuerpos inertes de mi hijo y de Ozaki, pero en bien los toco estos desaparecieron.

—Eran solo una ilusión —murmuro Tanizaki.

—Eso quiere decir que, ¿si Chuuya hubiera dejado que el enemigo los tocara, hubieran desaparecido al instante? —pregunto Atsushi.

—Así es, pero él sabía que Chuuya no dejaría que se acercara al mocoso —pronuncio Kunikida.

—Lo que quiere decir que ellos están bien —hablo Tachihara aliviado.

—Lo están —aseguro Rampo— mejor de lo que creemos —suspiro— pero ellos no están en este edificio, es más estoy seguro que ni siquiera están en esta zona.

—¿Cómo es eso posible? —pregunto Higuchi.

—Es una habilidad de tele transportación muy inusual —respondió Fukuzawa.

—Había oído de él, unos subordinados habían tenido la oportunidad de enfrentarlo —pronuncio Hirotsu— es más en uno de los videos que tenemos se le puede ver, es un muchacho de unos veintitrés años.

—¿Se dan cuenta que los dos sujetos tienen casi la misma edad de Chuuya? —pregunto Kunikida.

—Eso es porque ellos pertenecían a la banda que en su momento Chuuya llego a liderar —respondí seguro de eso.

—Pero se supone que "The Sheep" desapareció, es más tú fuiste el encargado de eso ¿no? —pregunto Akutagawa.

—Lo lamento, pero en ese momento solo matamos a los miembros de GSS, ya que aquellos niños no representaban ninguna amenaza —suspire agobiado.

—Ahora que lo recuerdo, el único que tenía poderes sobrenaturales era Chuuya, ¿Cómo los otros los consiguieron? —pregunto Hirotsu.

—Eso no lo sé... tal vez esos mocosos guardaban más secretos de los que pensamos —suspire— y siendo así, Chuuya lo sabía, pero nunca no lo dijo.

—En pocas palabras, el engaño al demonio prodigio —murmuro un Tachihara burlón.

—No solo eso, tal vez todo esto fue solo una jugada de Chuuya —pronuncio Yosano— para hacernos pensar que él era víctima y no sospecháramos.

—No, Nakahara no es así —salió a la defensa Atsushi.

—En eso concuerdo con el Jinko —apoyo Akutagawa— Chuuya no es de los que pone en riesgo la vida de otros.

—Aunque si nos ponemos a pensar, ninguno de nosotros tenemos alguna herida —por primera vez hablo Kenji— así que yo concuerdo con la doctora Yosano.

—¡No! —gritaron al unísono Atsuhi y Akutagawa.

—Ya muchachos, yo tampoco creo que Chuuya supiera sobre esto —pronuncio Fukuzawa— pero puedo asegurar que el, estará mejor con ellos que con nosotros.

—¿Cómo estas tan seguro de ello? —pregunto Tanizaki.

—Fácil, ellos ya lo conocen e hicieron todo esto para llevarlo con ellos —suspiro— no creo que lo vayan a tratar mal o hacerlo menos, así como ustedes lo hacían —pronuncio de manera seria— volvamos a la agencia, tenemos cosas pendientes —ordeno.

Todos fueron tras el líder a excepción de los integrantes de la port mafia y de mí, no podía creer lo que pasaba, esas malditas ovejas le habían traicionado y ahora lo querían de vuelta, tal vez descubrieron que todo lo que les dije en su momento no eran más que mentiras.

—¿Qué piensas hacer? —me pregunto Hirotsu— estamos a sus órdenes.

—Recuperar a mi hijo, a Chuuya y Ozaki —respondí seriamente— su misión termina aquí, pero ¿puedo contar aún con ustedes? —pregunte.

—Haremos lo que sea necesario para proteger a nuestro líder Chuuya —respondió Tachihara.

—Ya tienes la respuesta Dazai, solo llámame cuando tengas el plan perfecto y ahí estaremos —pronunció Hirotsu y dándose media vuelta se fue junto con sus subordinados.

Era increíble ver como Chuuya, se volvía esencial en la vida de las personas que conocía, el siempre dejaba un hermoso recuerdo en ellos, que, sin duda alguna, aquellas personas darían su vida para protegerlo, aun si este se los prohibía. Atsushi y Akutagawa eran el más claro ejemplo de eso, ellos fueron mis estudiantes, yo fui la persona que les brindo un lugar en este mundo, pero el solo verlos hace unos minutos como defendían a ese pelirrojo, me mostro la capacidad que este tenía para ganarse la confianza de las personas, esa capacidad que yo no poseía.

—Dazai, ya verás que lo encontraremos y lo traeremos de vuelta con nosotros —pronuncio el albino— Nakahara es fuerte y sabrá cuidarse en lo que vamos por él.

—¿Desde cuándo él se volvió tan importante para ti, Atsushi? —le pregunte.

—No sé desde cuándo, pero Nakahara es una buena persona, el siempre da más de su 100% en lo que hace, no le importa ensuciarse las manos con tal de proteger a los suyos, y aun cuando sus propios problemas lo ahogan, él siempre está dispuesto a ayudarte —respondió sin ninguna duda.

—¿Te ha ayudado? —le mire curioso.

—Sí, más de una vez, incluso cuando estuvo enfermo, el me apoyo —contesto y una leve sonrisa se dibujó en su rostro.

Ahora lo entiendo, cuantas veces no hiciste lo mismo conmigo cuando éramos compañeros, tu siempre estabas dispuesto ayudarme, incluso dejaste que usara tu cuerpo para matar la ansiedad que muchas veces se adueñó de mí, aun cuando en algún momento me confesaste que no te habías acostado con nadie, pues querías que tu primera vez fuera especial. Y yo como la basura que soy, te tomé más de una vez sin importarme si tú lo disfrutabas o no, incluso te forcé a estar conmigo cuando me dijiste que no querías, te tome sin ningún problema, ni siquiera me cuide y solo te deje cuando note las lágrimas en tus hermosos ojos, ni cuenta me di cuando te desmayaste.

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