Un paso más cerca

Capítulo 20: Perdidos en el bosque.

*Lena*

Luego de la competencia de patinaje, y la loca visita de mi abuela y tíos para hablar de mi futuro, había vuelto a mi rutina usual de vida. Disminuí de forma drástica mis horarios de practica en el roller y comencé tener más tiempo para mis estudios de forma impresionante.

Tía Jesica suspiraba cada vez que veía mis patines sin moverse de la entrada. Ahora que se había conseguido un novio casi no pasaba sus tardes en casa, así que la veía brevemente en las mañanas antes de salir junto a Mina a la escuela.

—Tía necesito que firmes esta autorización para una salida grupal organizada por el departamento vocacional y la psicóloga escolar. Ellos creen que es necesario para un pequeño porcentaje de alumnos brindarle ayuda para discernir sobre sus futuros. 

—¿A dónde irán? Antes no hubieras salido a ninguna de estas cosas. 

—Creo que iremos a unas cabañas en el bosque de los Zorros en Faulkner. 

—Esta bien. Aprovechare esos días para organizar la casa. —dijo firmando el papel para luego entregármelo. 

—Yo creo que es una buena oportunidad para que invites a tu novio a casa. Aprovecha que no estoy para preparar una cena romántica. —dije dándole un guiño. 

—No somos novios aún, y tampoco podría invitarlo se encuentra completamente ocupado con su trabajo. Así que gracias por la sugerencia, puede que para una próxima vez lo tenga en mente. 

—Cuando ese día llegue solo avísame y organizo algo con mis amigos.

—Como me gusta oír la palabra amigos en tu boca...

—Mejor me voy. Por cierto llegare tarde tengo hora con la psiquiatra. 

—¿Sesión de hipnosis? —asentí. —Si quedas mal no dudes en llamarme.

Salí de la casa llevando mi bolso en el hombro. Mina salió entre los gritos de su tía, al mismo tiempo que su prima menor corría fuera detrás de ella.

—¡¡Cindy no corras!! —grito molestas la tía de Mina desde la puerta. —¡¡Y pobre que vayas al centro comercial y no a tus sesiones de estudio!!

Mina llego a mi lado mientras hacia una mueca y con un leve gesto me decía que partiéramos antes de que comenzara a gritarnos a nosotras. Mina vivía con sus tíos paternos desde que su madre falleció, su padre se refugio en sus hermanos y viajando desde Corea con su pequeña hija a cuesta. La tía mayor de Mina y madre de Cindy era una verdadera bruja.

—¿Qué hizo tu prima ahora? 

—Nada fuera de lo normal. Tiene trece, es obvio que le llame la atención ir al centro comercial, sobre todo teniendo en cuenta que todas las chicas de su edad en su escuela gastan su mesada en ropa y maquillaje para llamar la atención de los chicos. 

—Siento que nosotras nunca hicimos eso. —señale mientras llegábamos al paradero. 

—Nosotras a su edad estábamos rodeadas de mujeres en uniforme que priorizaban el estudio y solo se maquillaban si se topaban con un chico de camino a casa, por lo que no era una pasarela.

Llegamos a la escuela justo a tiempo, luego de toparnos con un accidente de transito. Apenas nos topamos con la señorita Gemma le entregamos nuestras autorizaciones. En el salón note a un perdido Dave que había visto rondando la casa del frente durante el fin de semana. Las chicas también notaron que Dave tenia algo raro, sugiriendo que debía de estar enfermo.

Las clases terminaron rápidamente y no tuve oportunidad para preguntarle por qué se sentía tan mal. De camino a Faulkner una leve llovizna usual en la época de primaveral caía. La librería el cielo como siempre que iba tenia solo un par de clientes, además de que la chica tras el mostrador era un encanto. Sabiendo que me tocaba hora con la señorita Grace, me indico que subiera y tocara la puerta. La psiquiatra ante de que pudiera golpear me abrió la puerta con una gran sonrisa.