Rituales de Apareamiento & Sterek

(Me he enamorado de ti)

-¡Derek! ¡Derek! Despierta te necesito. –me pidió Stiles sus labios se presionaron con urgencia contra mi mejilla, sus manos sacudían mis hombros mientras su cuerpo se presionaba a mi costado. –Dios, Derek. Vamos. –suplico abiertamente, quejándose, podía adivinar que tenía dibujado un puchero en sus labios gruesos, solo por el tono de su voz. El olor fértil y el propio aroma dulce y achocolatado de Stiles me llenaban con la abrumadora necesidad de aparearme con él, de marcarlo y criarlo con mis cachorros. Apenas tuve tiempo de abrir los ojos antes de que Stiles estuviera sobre mí a horcajadas. El solo movimiento hizo que mi polla se contrajera con interés y mi boca salivara. Los ojos de Stiles brillaban en sus profundidades con deseo, lujuria y algo más... Me estire y con mi mano acaricie su mejilla con ternura, tratando de anclarlo con mi toque.

-Vamos, bebé. –lo incite a seguir con mis manos deslizándose por sus muslos y ahuecando su precioso trasero. –Monta tu lobo. –gruñí sensualmente con mi voz áspera y gutural. Mis palabras parecieron ser todo el incentivo que Stiles necesitaba escuchar, y con una sonrisa traviesa se levantó en sus rodillas, sostuvo mi pene en su mano alineándome con su agujero; haciendo crecer el ardiente deseo que consumía mi interior. Sostuve sus mejillas separadas mientras se hundía en mí lentamente, siendo llenado por completo haciéndonos gemir a ambos. Stiles se levantó hasta sentir la cabeza de mi pene estirar su borde y se volvió a hundir, me monto con movimientos inexpertos y fuera de control por sus hormonas. No me importo, estaba feliz de ser el primero de Stiles, deleitándome en la dulzura de su virginidad. No hice esfuerzo de moverme disfrutando de la vista, de la forma en que Stiles se mordía su labio inferior regordete, como su cabello se enredó en un desastre, la forma en que su largo torso se ondulo y los movimientos de sus caderas.

Mis labios se separaron en un jadeo cuando empezó a hacer movimientos circulares, sus paredes internas se masajeaban y ondulaban alrededor de mi polla palpitante, mire con asombro sus ojos color whisky. Con mis manos sostuve sus caderas, guiándolo a moverse con movimientos más constantes y contundentes y mucho más satisfactorios para ambos. -¿Me quieres dentro de ti, tan mal? ¿Quieres que te marque con mi venida? ¿Quieres que te llene con mi semilla y te de un cachorro? –le pregunte con voz ronca, mis dedos flexionándose en sus caderas en mi agarre mortal.  No sé de dónde provenía la charla sucia, solo me estaba dejando llevar por mis instintos pero me sorprendió la respuesta visceral de Stiles.

Stiles gimió placenteramente, mordiéndose el labio inferior y sosteniéndose de mis antebrazos. Sus movimientos se volvieron más erráticos y desesperados, dejándose guiar por un instinto profundo y primitivo. –Anúdame, Derek. –me pidió en voz alta, suplicando hambriento con sus ojos muy abiertos. –Lo hare, bebé. Llévame ahí. –le prometí mirándolo a los ojos. Asintió determinado, acelerando sus movimientos y enterrándose en mí una y otra vez. Los quejidos agudos escapan de su boca abierta mientras lo llenaba, su cabeza se inclinaba hacia atrás de placer. Estaba abrumado por todas las sensaciones, el olor, su roce, los sonidos que provenían de ambos, el placer infinito que ambos nos estábamos proporcionando.

Mi nudo empezó a expandirse nuevamente, estirando su borde hasta llenarlo hasta el límite de su estrecha cavidad. -Ven por mí. –lo incite, entonando una orden suave con los dientes apretados. –Márcame como tuyo. –le ordene en un gemido bajo mientras frotaba mis manos de arriba abajo sobre su espalda, tratando de evitar que mis garras marcaran su piel sensible. Mis palabras y el gruñido debajo de ellas, hicieron el truco. El orgasmo golpeo a Stiles inmediatamente, su columna vertebral se tensó para estremecerse por completo un segundo después, sentí el calor húmedo salpicar mi estómago completamente. Sus ojos se abrieron de golpe y su boca formo una o perfecta. –Joder, Derek. –grito abiertamente.

Deje escapar un largo y profundo gemido cuando Stiles se apretó a mí alrededor. Mi agarre en sus caderas se apretó mientras me derramaba dentro de él y mi nudo se estremecía de placer, llenándolo. –AH Joder. –gemí con los ojos cerrados mientras mi cuerpo temblaba con las réplicas de mi orgasmo volviendo a llenar a Stiles con mi venida. Él se desplomo contra mi pecho, con un suspiro satisfecho mientras me estremecía. Stiles se quedó profundamente dormido acurrucado contra mi pecho casi inmediatamente después, resoplaba entre sus labios separados. Mis dedos acariciaron distraídamente la piel inferior de su vientre, extrañamente deseando que lo imposible pudiera ser.