¿Será verdad que cada quien tiene un destino, algo por lo que existir? Sé que a muchas personas les puede parecer el destino algo cursi, estúpido y algo que se ven en las tiendas chinas de regalos que te ponen a reflexionar sobre la vida. Pero otras personas como yo piensan que todo pasa por alguna razón, no importa si es algo bueno o malo, si es algo importante o no, divertido o aburrido. Cuando uno llega a la mayoría de edad es que se empieza a dar cuenta de todo lo que pasa a su alrededor, uno sale del colegio pensando en lo que va a hacer con su vida, como por ejemplo ¿que estudiar?, u otros capaz no tan afortunados empiezan a trabajar. Existen otras excepciones como yo que ya entró a la universidad, por una carrera que no quería, y no tiene absolutamente ni idea de lo que quiere hacer con su vida.
Es un día frio, abro un ojo a causa del televisor que se encendió para despertarme, algo que funciona muy pocas veces. Ya he intentado con el despertador de mi reloj de mesita de noche, con incluso mi celular pero que va, tengo el sueño súper pesado, incluso prender la luz de mi cuarto no funciona y lo único que me queda es la TV. Me despierto gracias a que mi hermano gemelo está harto de que no me levante y me saca de la cama jalándome por los pies haciendo que me golpee horrible en la cabeza contra el suelo mientras me sigue arrastrando para meterme al baño, ahí estoy lo suficientemente despierta como para cepillarme los dientes y hacer mis necesidades. Dije lo suficiente, no completamente. Yo al despertarme soy como un zombie, no reacciona hasta que ve comida.
– Hey feto, ven a comer antes de que se enfrié – dice mi dulce y cariñoso hermano Vito. Él tiene las mismas facciones que yo, moreno, cabello castaño oscuro y con rulos, 20 cm más alto que yo, él es el que cocina ya que lo hace mucho mejor que yo. Si él no está, y me estoy muriendo de hambre, logro hacerme una pasta con queso o hago un ramen instantáneo, en otras palabras se lo básico para sobrevivir. Pero con la repostería soy diferente, no es por presumir pero me quedan fabulosos todos los postres que preparo.
Al sentarme, veo que mi hermano ha preparado huevos revueltos con jamón tostado y arepa más un vaso de chocolate. Se preguntaran por qué tomo chocolate en vez de café, la razón es que odio el café y mi hermano igual, nunca nos acostumbraron cuando éramos chiquitos, cuando nos teníamos que quedar despiertos por un proyecto de dibujo técnico de la escuela, mi papá nos preparó un café con chocolate para intentar mantenernos despiertos. Al probar el café aunque tuviera azúcar y chocolate era demasiado amargo y nos dio dolor de cabeza al rato, pero no una punzadita sino un dolor que no se quitó como por una hora. Más nunca volvimos a tomar después de eso.
– Gracias parasito – le digo de forma súper cariñosa a mi hermano.
– Vane hoy tenemos que ir temprano a la uni recuerda que tengo un proyecto que entregar a las 8 en punto – asiento y como lo más rápido que puedo para irme a cambiar con un jean, una camisa a cuadros azul y blanca que deja los hombros descubiertos y unos zapatos de goma blanco, me arreglo el cabello que, gracias a dios, lo tengo corto por encima de los hombros. No lo peino ya que tengo el cabello ondulado tirando a rulos y la regla principal de este tipo de cabello es que uno no se peina a menos que te hayas bañado, porque si no se te esponja horrible, y me maquillo al natural para esconder las ojeras.
En vía a la Universidad con mi hermano al volante, con la música alta escuchamos "Bloodline" de Ariana Grande, es una canción que nos gusta mucho a ambos, lo cual es muy raro ya que el casi no soporta mi música, mi playlist es variada en cuanto a idioma y genero puedo tener canciones tanto en español como en japonés, y desde rock hasta reggaetón, a mí no me importa mucho eso con tal de que la canción me haga pararme y bailar, soy feliz.
Al llegar me encuentro con uno de mis mejores amigos, Mark él es muy parecido en personalidad a mí, nos conocimos al entrar en la universidad, compartíamos una clase, geometría y nos hicimos amigos, él tenía una novia, que se la presente yo, llamada Lisa. Ella es única, divertida, alegre, muy bonita, delgada con curvas, ella es mi amiga también la primera que hice en la universidad, a ambas nos gusta la misma música. Al final ella termino con él por diferentes razones, y fue un completo desastre tanto así que terminó separando nuestro grupo de amigos.
Mark es un chico alto, con buen cuerpo, rubio, fan de los videojuegos, divertido, ojos marrones y piel blanca, le gusta mucho tocar la guitarra y compone canciones, yo por otro lado soy pésima con cualquier instrumento, incluso la voz, llego a cantar y juro que puedo matar a un gato. Él es súper popular con las chicas aunque no quiere aceptarlo.
El rubio quedó en la misma carrera que yo, pero con la diferencia de que él sí sabe a cuál cambiarse, quiere estudiar ingeniería en sistemas, y mi hermano estudia ingeniería mecánica. Lisa quiere crear cosméticos por eso estudia farmacia, tengo otro amigo llamado Víctor que se está graduando de comunicación social, por eso no lo veo mucho, está terminando la tesis, él es más como un papá para mí a pesar de que me lleva solo como 6 años.
Pasan 2 horas, ninguno de los dos tenían clases temprano, no las pasábamos en el club de astronomía y ciencia ficción, sé que es muy de nerds pero nos encanta. En eso llega mi hermano tirando todo en una mesa.
– Wow, ¿qué paso Vito? – pregunta Mark al ver que mi hermano está muy molesto.
– Nada solamente que la profesora de física decidió no subir hoy y no notifico nada, no se para cuándo se entrega el estúpido trabajo – como verán mi hermano es muy dedicado, una de las cosas por la que él es el favorito, y también es que se enamoró de la carrera, eso facilita muchas cosas en realidad. Una de ellas es la motivación algo que me falta a mí por eso estoy yendo a un psicólogo. No necesariamente necesitas ir a un psicólogo porque tengas una enfermedad mental, a veces hablar de tus problemas con alguien ayuda a solucionarlos de una manera positiva, a parte me ayuda a descubrir cuál es mi vocación, porque yo estoy muy decidida a graduarme de alguna carrera que me guste y ser millonaria.
– Ay no te amargues, puede ser que a la profesora le dio diarrea explosiva y es por eso que no quiere avisar, te imaginas que mande un correo que diga "lo siento alumnos hoy no puedo subir a la universidad ya que estoy como una muñequita, si me aprietas se me sale el relleno" – Mark ríe de mi comentario ya que una profesora de nosotros dos hizo eso y fue muy cómico, estaba explicando la ausencia de una clase y colocó eso como referencia.
– O capaz está tirando con su esposo encima de una colcha con un dibujo de un plano cartesiano y diga "házmelo en dirección del plano XY" – Vito y yo nos morimos de la risa, yo en especial ya que soy una persona que se ríe de todo y soy muy cosquilluda, ni siquiera me tocan y ya estoy tirada en el piso privada de la risa – ¿Qué? Uno nunca sabe cuáles son los fetiches de las personas. – Mark termina de decir mientras se seca una lágrima de la risa.
En eso veo la hora y en 15 minutos empieza mi clase, me voy despidiendo de los chicos y me dirijo al edificio donde va a ser mi clase. Al pasar por al frente de la biblioteca, como llevo los audífonos puestos, estoy absorta en mi mundo, choco con un chico y ambos nos caemos por el impacto, al parecer él también estaba distraído.
– Oh por dios lo siento tanto – dice el chico desconocido, que ahora viéndolo bien es demasiado guapo, tenia pelo castaño oscuro, ojos verdes, con la piel un poquito morena, cuerpo de dios griego, rasgos orientales. Se nota que él no es de por aquí. –Estoy buscando el departamento de relaciones exteriores, ¿sabes dónde es? – me ayuda a levantarme y eso hace que salga de mi ensoñación.
– Si claro me dirigía al mismo edificio, acompáñame. Por cierto ¿Cuál es tu nombre? Soy Vane. – ¿Qué? Creyeron que le iba a decir la dirección y me iba a ir, pues no mi vida no es tan suertuda como para encontrarme un dios griego en cada esquina, eso solo pasa en las películas donde todos son unos modelos de Calvin Klein, incluso el que hace el papel de "feo" está para chuparse los dedos, ni en mis sueños pasa esa situación que es lo peor.
– Mi nombre es Chris Pauls, soy de Canadá un gusto. – dijo colocándose a mi lado con una sonrisa brillante.
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Un Destino Inesperado
Teen FictionLa existencia del destino supone que nada ocurre por azar, sino que todo tiene una causa ya predestinada. Los acontecimientos no surgen de la nada, sino de alguna fuerza desconocida. Vane González no sabía que su destino iba a ser algo inigualable e...