La tierra donde todo está al revés.
Todo. De niebla basta y silenciosa, húmeda por el presente. Y te cala hasta los huesos, enfriando a la mismísima sangre. Dando protagonismo al parásito que es tu sombra. Sin baremos, ni tiempos, ni puntos cardinales. Avanzando y solo hacia adelante, con antifaz vital, el forjado por un@ en su camino.