Bienvenida a Riverdale fueron las primeras palabras que Lilian pudo ver entrando a ese pequeño pueblo dejando así su pasado atrás, escapando de todos los problemas de Nueva York, dejándo sus secretos atrás, sin embargo nunca pensó que un chico a qui...
Han pasado algunas semanas desde aquel encuentro íntimo con Sweet Pea, hemos vuelto a intentarlo, sin embargo, siempre necesito detenerme. Cada vez que cierro los ojos veo a Ethan y todos los recuerdos me invaden impidiéndome seguir.
Hoy era día viernes, faltaríamos a clases ya que había convencido a Sweet Pea de viajar a Nueva York, quería que mi abuelo conociera a Sweet Pea porfin.
Sabía que Sweet Pea estaba nervioso, pero se hacía el rudo.
Sweet Pea: ¡Amoooor! - escuché gritar a Sweet Pea desde el primer piso- Se nos hará tarde
Terminé de maquillarme, tome una pequeña maleta con ropa y bajé las escaleras.
Sweet Pea: ¿En serio bebé?,¿otra maleta más?- dijo tomándola en sus manos-
Lilian: Es pequeñita- dije riendo-
Sweet Pea: Pero en el auto ya hay 4 maleta más- dijo caminando hacia el auto-
Cerré todas las puertas y ventanas de la casa y salí de ella. Me dirigí al auto en el cuál Sweet Pea se encontraba sentado en el puesto de piloto.
Lilian: ¿Seguro de que quieres manejar tú? - dije subiendome al puesto de copiloto-
Sweet Pea: Si pequeña tranquila- dijo encendiendo el auto-
Sweet Pea comenzó a conducir, pude notar su nerviosismo cando vi que sus manos apretaban fuertemente el votante del auto, por lo que, decidí dejar mi teléfono de lado y tomar una de sus manos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Lilian: Amor, relajate- dije regalándole una sonrisa- Estoy segura de que le agradarás.
Sweet Pea: Me conoces tan bien- dijo sonriendo- espero agradarle
Lilian: Lo harás- le aseguré.
Sweet Pea encendió la radio del coche e inmediatamente comenzó a cantar la canción que se sonaba a través de los parlantes. Comencé a cantar junto a él, el viaje pasó bastante rápido, ya que la mayoría del tiempo la pasamos cantando, riendo o Sweet Pea me contaba anécdotas que había pasado junto a Toni y Fangs.
Acabábamos de llegar a Nueva York, por lo cuál me encontraba dándole instrucciones a Sweet Pea acerca de cuáles calles debía tomar. Llegamos a un edificio gigante y le pedí a sweet Pea que se detuviera.
Sweet Pea: ¿Que hacemos aquí?- dijo estacionándose- Es enorme
Lilian: Es la empresa de mis padres ... era- me corregí- mi abuelo debe estar acá. Vamos
Bajamos del auto, Sweet Pea tomó mi mano nerviosamente y nos dirigimos al edificio
Portero: Señorita Edwards hace mucho no la veía por aquí, sea bienvenida y lamento lo de sus padres
