Isabelle.
Los últimos cuatro días habían subido para mí como el infierno, me separaron de mi familia, la cual no sabía si seguía con vida. Extrañaba tanto a Max, Alec y a mi madre. Desde que nos separaron cuando estábamos en casa siempre estuve con esa preocupación ¿Dónde estarán? ¿Estarán bien? ¿Lograron escapar?, eran preguntas que me hacía constantemente, pero no estaba segura si Max fuese tan fuerte como para aguantar esto.
Cuando estaba estaba en el vagón del tren fue horrible, muchos hombres intentaron violarme, pero siempre habían personas buenas que lo impedían. Yo no tenía idea de lo que pensaban esos hombres ¡Habían niños con nosotros! me sentía ofendida, humillada, débil y triste, pero lo peor no terminó ahí.
Al llegar a Auschwitz nos despojaron de nuestra ropa para darnos unas telas frías que no bastaba para amortiguar el frío de las noches. Se nos llevó a un barracón y éramos puras mujeres, me sentía tan agradecida por eso.
Cuando entré todas las mujeres me miraron, no sabía el porqué hasta que me percaté de que todas estaban rapadas, su cabello había sido despojado de ellas y, sin embargo, el mío seguía en su lugar; largo, negro cayendo en ondas sobre mis hombros.
No estuve mucho tiempo ahí, pues tras pasar diez minutos, unos soldados vinieron por mí para llevarme a un lugar extraño. Me obligaron a decir mi nombre, edad, si era virgen o no y de dónde venía. Así que una vez más, me sentí humillada.
Estuve esperando a que me dijeran algo sentada en un colchón sucio y viejo que se encontraba en una habitación oscura, sin ventanas ni luz. Un hombre abrió la puerta solo para tirarme un vestido corto en el piso.
- Póntelo y espera nuevas indicaciones. - dijo con una voz fría y gruesa para luego cerrar la puerta y marcharse.
El vestido era rojo y demasiado corto, con problemas entraba ahí. Mis pechos casi se salían y mi trasero a penas se cubría con la tela elástica. Parecía una jodida zorra, después de unos minutos comencé a llorar, lloré porque tenía noción de lo que iban a hacerme, de lo que me iban a obligar a hacer y no había escapatoria, sabía que si no lo hacía probablemente iba a morir de una manera cruel y desagradable.
Dos hombres fornidos me sacaron de ahí y me llevaron a lo que yo pensaba era un barracón, pero no fue así. Era como un bloque o cabaña pequeña y en ella había un letrero; Bloque 24a. *
Sí hace unos meses me hubiera dicho que estaría en este lugar, hubiera escapado y me escondería entre las piedras, no sin antes llevar a toda mi familia conmigo.
Al entrar estaba oscuro y el débil sonido de la música se escuchaba, conforme íbamos caminando se oía más y más alto hasta que cruzamos otra puerta. Entrecerré los ojos porque en la oscuridad una débil luz su roja llenaba el lugar, habían demasiados hombres sentados en sillones ostentosos con mujeres bailando en sus regazos o besándoles.
Mi estómago se revolvió y un escalofrío me cubrió, ¿Eso tenía que hacer yo? El horror y el pánico me invadieron, trate de soltarme de los hombres, luché, grité pero nada sirvió porque al fin y al cabo solo me gané unos golpes en el estimado y en la nariz haciendo que esta sangrara mientras la demás mujeres se reían de mí, ¿Les divertía ver cómo me golpeaban?
Me llevaron a otra habitación dónde una chica me esperaba "Preparala" dijo el hombre que me golpeó y cerró la puerta. La chica me miraba con tanta tristeza, ella era pelirroja y bonita de ojos verdes con unos círculos morados en su cuello, manos y en la mejilla. Sentí tanta rabia en ese momento.
- ¿Cuánto tiempo llevas aquí? - se me ocurrió preguntar y al ver que no respondía y solo se dedicaba a limpiar mi cara decidí no hablar de nuevo.
Lavó y cepilló mi cabello y entonces con una voz muy baja y dulce dijo: - Un año y tres meses.
Me sorprendí tanto que me cité para verla a la cara. No era de esperar el porque de su cuerpo tan delgado y aún así seguía siendo hermosa. Entonces si ya había respondido mi pregunta, tal vez podía responder unas cuantas más.
- ¿Qué es lo que hacen aquí? - ella maquilló mis ojos con delicadeza y suspiró.
- Yo solo maquillo, peino y arreglo a las bailarinas. - me quedé muda, lo que ví allá fuera no fue exactamente un baile ético.
- ¿De verdad sólo bailan? - tenía miedo a su respuesta y ella tenía miedo de decirlo, lo sé porque pude notar el temblor en sus manos.
No contestó, así que decidí hacerlo yo. - Me van a prostituir, ¿cierto? - incluso la palabra dolía en mi boca, lengua y garganta.
- Sí. - se limitó a decir y yo me eché a llorar, arruinando el maquillaje y temiendo porque le castigaran a ella por mi culpa.
Así que horas después me ví en el espejo, maquillada, peinada y vestida como una prostituta. Me sacaron de ahí y me metieron a una nueva habitación, solo que ésta tenía una cama matrimonial con sábanas de seda rojas. Mierda. Aquí iba a perder mi jodida virginidad.
Mi piel se erizó, tenía tanto miedo. Me esposaron a la cama con fuerza y mis muñecas dolían demasiado. Sin esperar tanto, un hombre alto, delgado con ojos avellana igual que el cabello se acercó a mí con lentitud quitándose la ropa y también las gafas que yo no había visto hasta que estuvo lo suficientemente cerca para verlo. Un temor horrible se apoderó de mí cuando se puso entre mis piernas sonriendo.
- Hola, Isabelle. - su voz era extrañamente cálida y eso me causó más temor. - Permíteme quitarte ese vestido.
...
* El Bloque 24a era utilizado como un Burdel (prostíbulo) en Auschwitz.
Chan Chan Chan chaaaaaaan. Okey aquí necesito su opinión sincera, ¿quieren una relación tóxica o no tóxica? seguramente ya adivinaron quiénes son los nuevos personajes, así que necesito que me digan cómo quieren la relación de Sizzy, están a tiempo de cambiar las cosas ustedes mismas.
Yo siempre escribo para ustedes, así que díganme qué les gustaría.
Ah y una aclaración, realmente no sé cómo reclutaban a las mujeres en ese lugar, así que aquí lo pongo como yo CREO que pasó. Si ustedes saben cómo lo hacían por favor dígamelo para yo ponerlo.
Y bueno, mañana corregiré los errores que no pude revisar ahorita porque tengo un buen de cosas por hacer, así que una disculpa si se me va una letra o palabra errónea.
Nos leemos después, galletitas. 💜
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Amor en guerra. (Malec)
Fanfiction"El mundo podrá estar en guerra, pero jamás nuestros corazones". Así que lo único que está en guerra es la vida y la muerte de dos chicos que se enamoran en los famosos campos de concentración durante la segunda guerra mundial. Alec y Magnus luchará...