Después de unos días me despedí del kazekage y de los shinobis que me recibieron, y salí de la aldea para seguir con mi camino, mientras caminaba escuche unos pasos detrás de mi, asi que cree un clon y lo sustituí por mi para esconderme entre los arbustos.
Cuando vi que detrás de mi me seguía un humilde campesino, me tranquilice y destrui el clon. Pero mientras mas pasaba el tiempo me di cuenta que el campesino caminaba hacia donde yo lo hacia. Al inicio creí que estaba alucinando pero cuando el camino se separaba en cuatro senderos distintos, me quede quieta para que el pasara primero, pero solo se detuvo por un buen rato. Al ver que no se movía decidí tomar el sendero que me llevaría a un bosque sin camino y cuando el tipo eligió mi mismo camino, ahí supe que me estaba siguiendo.
Pasaron los minutos hasta que me harté detuviendome de golpe y volteando rápidamente hacia a el mirándole la cara.
- Disculpe, le puedo ayudar en algo?-El tipo pareció salir de trance.
- Eh?- me miro confundido, para después mirar a su alrededor- yo...que hago aquí?- su voz sonaba asustada y confundida.
- Usted me siguia- dije con algo de pena.
- Oh...- se paso su mano atrás de la cabeza nervioso para después inclinarse y pedirme una disculpa.
Le dije que no se preocupara, y me agradeció.
- Bueno...-dijo nervioso- entonces me reti-
No pudo continuar, una gran flama de fuego lo incendio por completo. Inmediatamente tome guardia y di un gran salto hacia tras.
- Kakuzu!! Mira no mas como lo dejaste!- escuche una voz varonil acercándose.
Un tipo de cabello plateado y un tipo con la cara cubierta se hicieron presentes, pero por mas espeluznantes que se vieran, lo que en verdad me aterraba eran las capas negras con nubes rojas que confirmaban que pertenecían a la organización mas peligrosa por las cinco grandes naciones..."Akatsuki"
El hombre de tez morena en un intento de voltear con su amigo volteo a verme. Y ahí se quedo. Sin decir ni una sola palabra.
- Kakuzu no me ignores te estoy hablando!!- grito con enfado el de cabello plateado.- Que demonios estas-
Giro su mirada hacia mi y se quedo igual que el tipo de ojos esmeralda. Paralizado, quieto, solo mirándome.
- Quienes son!- grite firme. Los tipos al escucharme salieron de su transe.
- Pero que...!!- gritó el peliblanco confundido, pero al verme de nuevo sonrió maliciosamente -...interesante cosita nos hemos encontrado,no lo crees Kakuzu?
Mi corazón empezó a latir, estos tipos encerio me aterraban.
- Tu quitale al cadaver el tesoro del hijo de señor feudal- dijo el de ojos esmeralda- mientras yo me encargo de la chica.
- Ah! Porque siempre te toca lo divertido.
Me distraje por los gritos de fastidió del peliblanco y no me di cuenta de la velocidad con que se acerco Kakuzu. Gracias a ese error logro noqueandome dejandome todo oscuro.
(...)
- Que es esto?
- Tranquilo, te va a encantar- escuche la voz del peliblanco.
De golpe empecé a ver todo, al darme cuenta vi que estaba atada y varias personas me veían; y mis ojos se encontraron con el.
Sentí que el corazón se me iba a salir del pecho y mi nariz me empezó a arder, para después mis ojos se volvieran borrosos.
- Ita-
No pude decir nada, sentía que la garganta se me cerraba y me faltaba la respiración. El no dijo nada y ni me miro a como me solía ver, sus ojos frios se fijaban en mi sin ni reacción alguna, yo solo respondi agachando la cabeza.
- La conoces?- preguntó extrañado el peliblanco.
Hubo un largo e incomodo silencio.
- Solo eramos compañeros por la aldea, pero nunca la conocí en si.
Por mas que no quisiera su pregunta me dolió haciendo que una lágrima resbalará por mi mejilla.
- Ya veo- sonó una voz gruesa y atemorizante.
Sentí una mano en mi barbilla que me obligo a levantar la cara. Pude apreciar un tipo con muchos pircings en la cara, cabello anaranjado y unos ojos que jamas había visto en un ser humano. Y por mas que intentara desviar mi mirada, no podía.
-Cosita...esta asustada- se escucho la vos del tipo de cabellos claros. De golpe el de cabello anaranjado me soltó mi rostro, pero después el peliblanco me lo volvio a tomar- tranquila- me acarició la mejilla- yo me llamo Hidan y prometo que no dejare que ningúno de ellos te toque- me sonrió de manera coqueta- pero no prometo protegerte de mi.
- Para que la trajeron- preguntó de golpe el de ojos extraños.
- Tiene una habilidad muy interesante que podríamos usar para nuestro propio beneficio- explicó kakuzu- puede paralizar a los enemigos con tan solo mirarla, y solo pueden volver en si cuando ella les habla.
Todos guardaron silencio. Me sorprendí por lo que kakuzu dijo, ni siquiera yo sabia eso. En eso de golpe me llego el recuerdo de las palabras de senshi.
- Y por que nosotros no estamos paralizados?- preguntó uno con aspecto de pez.
- Bueno...creo que esa parte aun no la hemos descubierto- dijo hidan soltandome de golpe.
El de cabello anaranjado cerro los ojos un momento, y cuando los abrió, habló.
- Esta bien, siempre y cuando no cause problemas- dijo dándose la vuelta empezando a irse. Pero se detuvo lentamente- Ah casi lo olvidaba. Itachi, tu hazte cargo de ella- fue lo ultimo que dijo antes de salir de la habitación.
- Demonios- mascullo hidan- no te preocupes tesoro, pronto podremos divertirnos- dijo para después salir de la habitación.
Todos los tipos salieron dejandome a itachi y mi sola. Se hizo un largo silencio, yo lo miraba seria e esperando que dijera algo pero al ver que no, decidí tomar la iniciativa.
- No dirás nada?
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Mas Vale Tarde Que Nunca
FanfictionEran amigos desde su infancia. Ellos dos no lo sabían pero se amaban, y sus corazones eran cómplices de ello. Miles de sucesos y desgracias tratarán de separarlos. Y ahí es donde su amor se pondrá a prueba. •°Cubrieron sus cuerpos y cerraron sus ojo...