Nyder
He llegado a casa con el labio magullado y Ahora mismo estoy en casa de mi tía, Keira se va a quedar aquí una semana ya que tengo mucho trabajo y ella está de vacaciones en el colegio. Tengo planeado que vayamos a algún lugar juntos, a Disney o qué se yo, desde que Skye le prometió que iríamos no ha dejado de pedírmelo una y otra vez.
– De verdad, que eres como un niño aunque ya seas tan grande – ríe mi tía mientras me acerca una taza de café.
– Ya sabes, las cosas viejas nunca cambian.
– Eso es cierto – ella sopla a su taza y le pega un trago – ¿Quién te ha curado? Por que intuyo que tú sólo no lo has hecho.
– Ha sido Skye.
– Oh, vaya – murmura ella con sorpresa – ¿Skye? ¿Cómo es eso?
– Ha sido en su casa, me he peleado con su hermano.
Rememoro el momento que hemos tenido en el salón, pero entonces, tampoco era plenamente consciente de lo que estaba haciendo o diciendo.
"Escucho atentamente la escena sin dar crédito a lo que mis oídos están escuchando. Acabo de llegar a casa de Jade y Kevin, él le estaba contando a su hermano que Skye y ese niño, Tyler, se habían acostado. ¿No era que eran cómo hermanos? Y una mierda.
– Ten cuidado Jade, ahora igual se tira a tu bragueta – comento, intentando parecer gracioso y despreocupado ante el tema. Pero para nada suena así.
Ambos se quedan en silencio, mirándome, procesando lo que acabo de decir.
– ¿Qué has dicho? – pregunta Kevin, en tono molesto – No te pases ni un pelo, Nyder – me advierte su hermano señalándome.
– Eh, eh – Jade se pone en medio de los dos – Venga, ya está. Sólo ha sido una broma, tío – dice Jade a Kevin, intentando calmar los ánimos.
Kevin se aparta y se va a la cocina, mientras que Jade se pone la chaqueta, porque ha quedado con Gertie para ir a no sé dónde y se marcha. A los pocos minutos, Kevin aparece de nuevo en escena.
– ¿Sabes? No debería preocuparte si mi hermana se tira a la bragueta de Jade o no, tú la dejaste.
– No me preocupa. Pero los amigos no hacen esas cosas.
– Ya, ni los novios tampoco hacen las cosas que hacías tú – enarco una ceja en su dirección, ¿me está atacando por haber dejado a su hermana? ¿Ahora? ¿Después de tanto tiempo?
– ¿Te he pedido opinión sobre lo que fue mi relación con ella? No, así que será mejor que cierres el pico – siseo ya, molesto de esta situación.
Sólo ha sido una broma. Una jodida broma y él lo está llevando al extremo. Vale, que tal vez no ha sido el comentario más acertado, pero joder, no es para tanto ni para ponerse cómo él se está poniendo.
– No, el que te tienes que callar eres tú. ¿Alguien te ha dicho algo a tí por estar con otra piba en la cara de mi hermana? No, así que no tienes ni un puto derecho a hablar de ella ni de lo que hace en la cama con quién le de la gana.
Se levanta del sofá y se pone frente a mí, examinándome a fondo. Cada detalle d emisión fisonomía es explorados por los ojos de mi amigo, tanto, que me siento hasta intimidado.
– Yo no estoy con nadie, y puedo hacer lo que me de la gana.
– Mírate, tío, eres un puto zombie andante, ¿por eso te gusta tanto ella? ¿Por que os enchufáis mierda juntos? ¿Por que te regala coca y speed? – tenso mi mandíbula al escuchar eso – No quiero que mi hermana esté con un yonki de mierda cómo tú.
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My Morphine
Romance- Pareces... intoxicado. - Sí, quién sabe. Siento cómo si estuviera drogado cuando estoy contigo; no es que me meta o esnife, ni nada de eso. A no ser que tú lo seas, que tú seas una, o todas las drogas, cada una de ellas. En ese caso sí que me drog...