Valentina sabe que lo que siente por Juliana no es un simple "crush", o algo pasajero.
Juliana está perdida por Valentina, pero las circunstancias alrededor parecieran no ayudarles en nada.
Ambas saben que son almas gemelas... ¿Tendrán su final fe...
Valentina caminaba por la recepción de Grupo Carvajal, tenía que reunirse con su hermano y uno de los inversionistas de New York. Había estado haciendo un proyecto para una de sus clases ahí en la empresa, lo cual involucraba el uso mayoritario de redes sociales para promocionar las noticias y todo lo que Grupo Carvajal posteaba día a día como noticia.
Había pasado un mes y medio desde la gran pelea que tuvieron ella y Juliana. En la cual, las dos tuvieron que replantear el estado de su relación, ya que los desacuerdos habían estado a la orden del día.
Aún recordaba la sorpresa que sintió cuando despertó y vio a la morena frente a ella, viendo el collage de fotos en su habitación.
~Flashback...~
Juliana llegó pronto a la mansión Carvajal, sabía que le debía una gran disculpa a su novia, bueno... Si es que Valentina aún quería serlo. Después de lo que pasó comprendía el enojo de la rubia, con ella y con la situación. Pero todo se les había ido de las manos. Así que tenía que arreglarlo, sólo esperaba ser recibida.
Cuando llegó a la puerta de la entrada principal de la casa, respiró hondo antes de tocar... No sabía quién la recibiría. Las camionetas estaban ahí afuera, por lo que era probable que los tres hermanos estuvieran ahí.
Su respiración se atascó cuando la puerta se abrió y dejó ver a Eva Carvajal... Y por la mirada que le estaba dando, no le hacía gracia verla ahí.
-Ehm... Hola Eva- se aclaró la garganta- Está... ¿Está Valentina?
-Depende... ¿Tú eres la responsable de que haya llegado llorando?- preguntó directamente mientras se cruzaba de brazos.
-Ehh... Yo... Yo no...- se removió nerviosa.
-Oh, no sabía que tartamudeabas. Te hice una simple pregunta. ¿Fuiste tú la que hizo llorar a mi hermanita?
-Eva, basta...- llegó Lucía- Hola Juliana- sonrió- Soy Lucía, es un placer conocerte- estiró su mano.
Eva la miró como si tuviera dos cabezas.
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-Ok, si ya terminaron con su interesante presentación. Te comunico que no puedes ver a mi hermana- dijo, mirándola nuevamente.
-Eva, yo no...
-No. Nada. Ella llegó muy afectada, no la había visto así en mucho tiempo. Y ahora me has confirmado que tú tienes que ver en eso.
-Cometí un error, tienes razón- habló Juliana, intentando juntar todo el valor posible. No sabía cómo es que la mayor de los Carvajal podía intimidar tanto con su mirada- Pero vengo a disculparme, Valentina me importa más que nadie en el mundo, y no quiero que se sienta mal. Menos por mi culpa. ¿Podrías por favor dejarme pasar a verla?
