En el Silencio De Nuestra Amistad

*27*Situación crítica

Se removió en la cama al oír el teléfono sonar.
Desbloqueo la pantalla y vió el mensaje. Sonrió.
- Buenas noche YoYo. Sueña con los angelitos, o sea conmigo. ❤
Tecleó rápidamente la respuesta, y metió el celular bajo la almohada.
- Buenas noches Minmín. Duerme bien. 😘
Se acostó boca abajo, y se puso a pensar en el mayor.

Desde la cita con Phana, Ming estaba raro. Pero no como otra veces.
Se comportaba lindo, muy lindo.
Lo iba a buscar, le llevaba regalos, estaba pendiente de él.

Sabía que él era muy atento con sus novias. Y tener sus atenciones así, le gustaba mucho, aunque sea pasajero , o hasta que un nuevo amor aparezca.

No quería indagar en esta situación. No quería saber el porqué. Solo quería disfrutar todo lo que pudiera.
Y experimentar este "salir" con él, que ya era más que ser amigos.

Wayo no pedía, ni esperaba nada. Esto era un regalo.

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Unos días después, recibió un mensaje de Phana.
-Hola. ¿Podríamos juntarnos? Necesito hablar contigo.
Wayo se imaginaba de qué. Tendría que aclararle las cosas de una vez.
- Bueno. Nos vemos mañana en el almuerzo.

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Wayo estaba sentado hacia 10 minutos en la cafetería, cuando Phana llegó corriendo. Se paró frente a él, agitado y sudado.
Hizo una seña de que lo espere mientras tomaba aire.
- Cada vez se me hace más difícil llegar.
El menor gritó por dentro:
- ¿Por qué no entendés el mensaje?

- ¿ Puedo sentarme ?
-Si, claro.
-Me imagino que sabes para que quise reunirme contigo.
-Si, tengo una vaga idea.
-¡Wayo¡ ¡ te dije abiertamente que me gustabas! -respondió un poco irritado- ¿Quieres salir conmigo?
- Woow, que directo- pensó y continuó. - Ay Phana.
Se tomó la cabeza, pensando ¿Cómo rechazarlo?
El doctor lo miraba ansioso.
-Gracias. Pero no estoy interesado.
-¿Por qué? ¿No te gusto?
- Me gusta otra persona.
-¿ Quién?
Wayo se levantó de golpe.
-¡No tengo porqué decirte nada!¡ Eres mí superior nada más! Creo que es mejor que ya no me busques.
Terminemos esto aquí. -El menor estaba furioso.
-¿ Tanto me odias?
Wayo se tranquilizó y habló.
-No te odio, pero no quiero hablar de mí vida privada contigo. No somos amigos. Y por cómo van las cosas, tampoco lo seremos.

Wayo se dió vuelta lentamente. Phana lo sujetó del brazo.
Esta bien, ya no voy a insistir. Pero necesito pedirte un favor.
- ¿ Qué?
- Necesito que finjas ser mí novio por unos días .
- ¡¿ Qué?! ¡ Ni loco!
- Dale 'Yo. Por favor. Hay una chica que me está acosando. Me sigue, me persigue. Me llama por teléfono, se aparece en mis clases. Solo unos días, hasta qué se de cuenta que soy gay.
- ¡No, no! Ni loco- repitió- No quiero ser blanco de una psicópata.
- ¡Oh no Wayo!, ¡ahí viene! Abrázame.
Wayo intentó zafar de Phana, pero fue más rápido qué el. Su pequeño cuerpo quedó atrapado por sus grandes brazos.
El menor forcejeaba inútilmente, empujando el torso del otro, cuando Ming los vió de lejos.