Algo se avecina

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El día siguiente de Halloween fue uno de los más incómodos y pesados para Mikasa.
A duras penas pudo levantarse, ir a la escuela y entrar en el salón en donde un Levi Ackermann daría clases. Tenía tanta vergüenza de verle la cara.

Llegó mucho antes de lo normal, de hecho, era la primera que había llegado, tanto así que ni siquiera el profesor Levi se encontraba en el salón. Había preferido no ir a la cafetería esa mañana ya que estaba dispuesta a cuestionar a su profesor sobre la noche anterior al tener muchas dudas al respecto.

7:30

7:35

7:40

Era raro que el profesor Levi llegará después de las 7:30, algo que hizo que la chica empezara a ponerse impaciente.

7:45

7:50

Había llegado temprano para poder hablar a solas con Levi, pero con el paso del tiempo los primeros alumnos habían aparecido y con ellos la falta de ganas que empezó a sentir  Mikasa para interrogarle.

Ya casi son las 8:00, qué extraño...

Cuando todos los alumnos hubieron llegado, era ya una señal de que Levi no asistiría, ya que él jamás llegaría tarde, ni loco.

El alboroto de los chicos que empezaban a formar sus teorías sobre su profesor, el director Dot Pixis se hizo presente.

-Buenos días, jóvenes, espero se encuentren muy bien. Me encuentro aquí porque tengo que darles un aviso. Como podrán notar, el profesor Levi se encuentra ausente por un problema de salud; él mismo me ha dicho que se recuperará en unos cuentos días así que el profesor Mike se encargará de suplir sus clases.

Mikasa no podía creerlo del todo. Si Levi era aquel hombre misterioso de la otra noche, era casi imposible que esa mañana amaneciera tan mal como para no ir toda la semana a menos que lo que dijo Auruo haya sido verdad y que Levi nunca bajó a la fiesta.

Todos se encontraban algo sorprendidos por la noticia. El hecho de que Levi estuviera enfermo era algo raro. De por sí él luego exigía la asistencia de todos aún si se encontraban convaleciendo amenazando con quitar el derecho a examen si alguien se atrevía a faltar. Y conociendo a Levi... No es alguien que pediría unos cuantos días porque lo primero que haría sería curarse y asistir como fuera al día siguiente a menos que de verdad estuviera muy mal.

La joven seguía divagando en sus pensamientos cuando Pixis le llamó la atención.

-Señorita Mikasa, terminando esta clase necesito que pase a mi oficina.

Las voces comenzaron a estar presentes y todos sus compañeros hablaban entre sí mientras le lanzaban miradas furtivas.

-Hey, Mikasa ¿Acaso asesinaste al profesor Levi?

-Oi, Hitch, no seas tan pesada...

-¿Qué, Marlo? ¿Acaso te da miedo esa tétrica? 

-No, es sólo que...  -El chico se acercó a la joven de pelo ondulado y corto y entre murmullos le dijo: -Si ella es capaz de enfrentarse al profesor Levi no me quiero imaginar si...

-No seas exagerado. Lo más seguro es que está enamorada del profe... ¿No es por eso que tanto quieres llamarle la atención mi casita?

No era como si hubiera sido la primera vez que le hacían burlas sobre su actitud pero ese último comentario había sobrepasado los límites de su temperamento. En un instante, Mikasa se hallaba de pie, con esa expresión sombría que emanaba un aura tenebrosa y que hacía que cualquiera se alejara. 

Café Paysans (Rivamika fanfic)Where stories live. Discover now