Jugatela Por Mí (JuaniXEmma)

Capítulo 47 (segunda parte)

Emma

Hoy se cumplen cinco años de mi primer beso con Juani, y casi cinco años desde que lo vi por última vez en el aeropuerto, la única manera de tener noticias acerca de él era por medio de Rodrigo, lo último que supe fue que hace tres años se mudó a Alemania.

Directamente no hemos hablado. Ni por llamada, ni siquiera por mensajes, elimino todas sus redes sociales así que tampoco puedo ver nada de sus publicaciones.

Y no puede ser que yo todavía le extrañe.

Aún cuándo tengo novia.

-¿entonces iras a cenar esta noche con tus padres? –pregunta Alicia. Una amiga que conocí en la universidad.

Estábamos en el centro comercial, ayer me pidió que la acompañara a hacer unas compras y como tengo el día libre no me negué, además que me divierto mucho haciendo compras con ella.

-quise postergarlo, pero creo que ya es hora de decirles –digo buscando  una remera de color gris, pero no veo nada de ese color por acá.

-la noticia de tu compromiso les va a impactar –dice riendo.

-tal vez mi vieja ponga el grito en el cielo, mi papá ya sabe, le dije por teléfono.

Por dicha siempre he tenido el apoyo de mi papá, cuando le conté que era bisexual se lo tomo bastante bien. Quien no se lo tomo para nada bien fue mi mamá, no me hablo durante casi un año.

Se portó peor aún cuando se dio cuenta lo de mi medio hermano, tuvo un ataque de histeria grave que tuvimos que internarla un mes en una clínica de rehabilitación, supongo que no le cayó nada bien que papá la engañara y encima tuviera un hijo a raíz de eso.

Luego de eso estuvo con medicamentos, llevar terapia le ayudo muchísimo y ahora es algo diferente, solamente que no se ha podido deshacer de tantos prejuicios sociales. Como vi que a mi mamá le ayudo muchísimo el recibir terapia, yo también me anime a ir con el psicólogo, realmente me sentía mal, deje pasar los meses y caí en depresión, el psicólogo me dijo que no era tan grave, pero si lo hubiera dejado pasar más tiempo tal vez sí.

Creo que se debería de normalizar el recibir terapia y quitarse esa estúpida idea de la cabeza de que solo los locos o desquiciados mentales reciben terapia, la salud mental es importantísima y también requiere de cuidados como la salud física.

-¿sabes? Me alegro mucho de que tus papás se lleven bien ahora, a tal punto de que puedan cenar en un mismo lugar sin aventarse los cubiertos…. ¿Qué tal me queda este color? –dice y me muestra una blusa color mostaza.

-horrible –digo en cuanto la veo –no te creas, costo demasiado que mi vieja asimilara lo de Sebastián.  –así se llamaba mi hermanito, quien ahora tiene seis años.

Mi celular suena y veo que es un mensaje.

“la fiebre empeoro, será mejor que lleve a la niña al hospital”

“iré al Santa Fe, tal vez puedas alcanzarme ahí”

-Ali, tengo que irme, la fiebre de la bebé empeoro. –digo echando mi celular en mi bolso.