⭐ Capítulo 14 ⭐

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No puede ser...

Que clase de juego, broma o película es está, acabó de tener un sueño extraño donde yo veía mi cuerpo sobre mi cama durmiendo, pero yo no era la que lo controlaba.

Desperté en un lugar extraño, específicamente en una especie de sala. Mire alrededor para encontrar al menos a una persona. No recuerdo que fue lo último que paso después de la mundaza.

—Despertaste, ¿te sientes mejor?—Un chico de cabello negro, alto y piel clara dejó un vaso de agua en la mesa de centro y se sentó frente a mi en el sillón de a un lado.

—Disculpa...¿quién eres? ¿Donde estoy?—Tome una mejor posición para verlo.

—Estas en mi casa...¿ cómo te llamas?

—Tania Miller...no recuerdo que pasó.—Toque mi cabeza tratando de recodar, nada. El chico sólo me miraba y cuando lo volvi a ver me sonrió.

—Es normal, te encontré desmayada en el puente y te traje. Toma un poco de agua. —Obedeci al chico desconocido, de repente frunci el ceño, ¿desmayada? Yo recuerdo haber llegado a la ciudad, ir al puente y regresar a la nueva casa, ¿en que momento regresé al puente que me desmayé?

—¿Vives solo?

Claro, hace un año empecé a vivir solo.

—Ya veo. ¿Tus padres donde están? Te vez muy joven para vivir solo.—Sonrió amargadamente y vio el suelo.

Dos Almas Un CuerpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora